Por siempre tuya
Capítulo 2

Capítulo 2:

“Hansen no ha encontrado a nuestra luna y dudo que lo haga pronto, está enfocado en sus deberes de Alfa y lo que menos le preocupa en estos momentos es encontrarla” dijo Iván con una sonrisa sarcástica.

“Entonces sigue siendo el mismo de siempre, un estúpido engreído sabelotodo y ¿Dónde está?, no lo he visto” dije esperando no encontrármelo pronto.

“En un viaje de negocios fuera de la ciudad, debería de estar de regreso mañana” dijo Iván.

“Los entrenamientos empiezan a las 6 de la mañana espero verte en primera fila sin excepción alguna” dijo seriamente.

Después de descansar unas horas y cenar, decidí dormir y estar lista muy temprano para inicia mi  primer entrenamiento.

Al día siguiente….

Son las 5 de la mañana y no podía seguir durmiendo, decidí alistarme, me puse un short negro y un top blanco deportivos, recogí mi cabello con una liga para los entrenamientos y salí a correr  para reconocer el área.

Hacía mucho tiempo que no recorría estos bosques y necesitaba estirar las piernas, pero lo más importante es que mi loba Kayla necesitaba correr y  sentirse libre.

Mi loba es de pelaje blanco y ojos grises con destellos azules, con una velocidad sorprendente y  fuerza con la cual podía ganarle fácilmente a cualquier hombre lobo y darle una gran batalla a un beta e incluso un alfa.

Llegue a mi lugar favorito desde que era una niña el lago Chenek, puedo sentir la brisa del aire rozar mi rostro y el aroma del viendo justo cuando esta por caer la lluvia ese aroma es intoxicante, me hace sentirme viva.

Cuando tenía 14 años cada mañana solía correr y ejercitarme cerca de la cascada, nadie viene por este lugar, porque no es muy conocido y es perfecto para estar sola con mis pensamientos.

Al llegar al lago cambie a mi forma humana y tome la ropa que tenía amarrada a mi pata, la puse en el suelo a pesar de que en los árboles siempre teníamos ropa, para evitar que anduviéramos desnudos, aunque la desnudez era algo natural en nosotros, a veces era algo incomodó.

Decidí entrar a agua, la libertad que sentía en ese momento era maravillosa, por primera vez en mi vida me sentía libre, dueña de mi destino y podía volar tan alto como quisiera, sin ataduras sin limitaciones, cerré mis ojos y deje que el agua  recorriera mi cuerpo.

Hasta que de repente llego a mí la esencia más rica e intoxicante que jamás imagine, Chocolate y coco mis aromas favoritos.

Aún estaba en el agua y me  sentía vulnerable en mi desnudez, podía aspirar ese aroma que me intoxicaba hasta la más íntima parte de mi ser.

Gire mi cabeza buscando el origen y entre en pánico al ver una sombra del otro lado del lago, entre en pánico y nade rápidamente hacia la orilla.

Mi mayor temor se estaba haciendo realidad.

‘No, no, no ahora por favor, cuando apenas recupere mi libertad’ pensé, no quería pertenecerle a nadie y mucho menos a un lobo posesivo y bruto, no estaba en mi naturaleza el ser sometida.

Cerré mis ojos e inhalé ese aroma nuevamente y fue cuando me di cuenta de mi mayor temor.

‘Es mi mate, mi alma gemela’  pensé sorprendida, negando lo que mi ser y mi lobo gritaban.

Sali del agua rápidamente y me vestí, cuando sentí una mirada que penetraba mi piel, mi cuerpo temblaba y no quería voltearme y verlo, pero no pude resistirme Kayla gritaba en mi cabeza:

¡Mate!

¡Mate ve con mate!

Y saltaba de felicidad.

Mire hacia el agua hasta que mi vista llego al otro extremo del lago y vi una sombra cerca de la orilla y fue cuando lo vi.

Mi alma gemela, mi Mate era un lobo negro, de pelaje hermoso que brillaba con los rayos del sol y de una altura intimidante, jamás había visto uno de ese tamaño, era el más grande que había visto en mi vida.

Un alfa.

Pensé y el pánico de apodero de mí de nuevo, me transformé en mi loba y corrí con todas mis fuerzas alejándome de ese lugar, Kayla me decía que debíamos regresar y conocer a ese lobo negro, pero me resistía a escuchar sus suplicas.

Mis patas volaban con gran velocidad huyendo de mi destino, huyendo del lobo que me haría conocer mis debilidades y me sometería ante él, podía sentir la tierra entre mis patas.

Elena.

Tengo que hablar con Elena solo ella podrá ayudarme.

Al llegar a mi cuarto, tome mi celular y marque el número de Elena.

“Hola” contesto ella.

“Elena necesito tu ayuda” le dije desesperada.

“¿Aly que pasa?” me contesto preocupada.

“No tengo tiempo de explicarte todo, pero encontré a mi mate y sabes lo que eso significa para mí” le dije.

“No te preocupes, recuerdas el regalo que te di, antes de irte” dijo Elena.

“Si la recuerdo” dije confundida.

“Es un regalo que sabía que necesitarías desesperadamente en momentos como este, en él encontraras un brazalete y un spray, ambos son para enmascarar tu olor, para que tu mate no pueda encontrarte” dijo Elena.

“Elena te amo gracias, ¿Por qué no me lo dijiste?” le pregunté más tranquila.

“Porque solo quería que lo usaras en el momento justo y creo este ha llegado, no debes quitarte el brazalete y eso ocultara el efecto que ocasiona en tu mate, cuando lo tocas o estas cerca de él”

“¿Cuánto tiempo durará?” le pregunté.

“No es magia permanente lamento decírtelo, cuando tú te enamores de alguien sea tu mate o no, la magia del brazalete dejara de funcionar” dijo Elena.

“Eso no pasará, no te preocupes, gracias, Elena te debo una” le dije y termine la llamada, agarre la caja que me regalo, saque el brazalete, lo mire viendo cada detalle era muy hermoso, me lo puse y empecé a rociar el spray en mi cuarto y todo el segundo piso antes de que alguien pudiera encontrarme.

Una hora más tarde…

Después de un largo viaje por fin llegué a nuestro Pack House, al entrar a mi oficina me encontré con mi mejor amigo mi beta Iván.

“Estaba impaciente porque llegarás Hansen, como te fue en el viaje” dijo Iván.

“Todo bien tenemos una alianza nueva y todo listo para la próxima reunión de Alfas, que será organizada aquí en nuestra casa” le dije emocionado.

Iván y yo hemos sido amigos desde la infancia, cuando cumplí 17 años mi padre me envió a la universidad de alfas, para prepararme y ser un buen Alfa para la manada, cuando regresé me encontré con la novedad de que habian enviado a Alania la hermana de Iván a vivir con su tío Iker a otra manada.

Mi padre no mencionó el motivo, al parecer era un asunto familiar nada importante, pero siempre me pareció extraño que la enviaran de esa manera, como si quisieran ocultarla de alguien.

Mi relación con ella no era muy buena, la verdad la ignoraba era una niña muy prodigiosa en el arte de pelear, me sorprendió saber de sus habilidades a tan corta edad, pero no le di mayor importancia, ella era una niña y yo 5 años mayor que ella, tenía  otras expectativas.

“Mi hermana ya está instalada en su cuarto, gracias por permitirle que se quede aquí, necesita estar rodeada de gente y hoy iniciara su entrenamiento” dijo Iván.

“No hay problema tú eres mi beta, casi mi hermano sabes lo mucho que te aprecio y a tu familia, aunque la verdad ya ni siquiera recuerdo como es Alania, creo que la voy a conocer por primera vez en los entrenamientos” le dije sin darle importancia.

“Pero antes mi lobo Marcel necesita correr, ha estado muy inquieto desde que llegamos”.

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