Omnipotente Señora Finn -
Capítulo 310
Capítulo 310:
Haider estaba atónito.
Ruby lo ignoró, su figura delgada y alta estaba de pie frente a la puerta de la sala de duelo.
«Mi abuela sólo me ha contado que hay una Familia Hussain en la capital que la molesta como una mosca, que descaradamente, perturbaba su vida. Mi abuela tenía buen carácter y no quería crear problemas, pero yo soy diferente, no me gusta que me molesten. Si no te vas hoy e insistes en buscar problemas aquí, entonces no me culpes por no ser educada».
Lo dijo en un tono pausado y uniforme, pero, por alguna razón, los pocos miembros de la Familia Hussain sintieron una invisible sensación de opresión al oírlo.
Haider apretó los dientes y sus ojos se cubrieron de melancolía.
«¡Bien, ya que no nos escuchan, no me culpen por no mostrarles piedad! Si quieres que nos vayamos, bien, mientras nos entregues las artes secretas que dejó tu abuela, ¡Nos iremos inmediatamente y nunca te molestaremos!».
Cuando oyó la palabra ‘arte secreto’, una mirada severa brilló en los ojos de Ruby, y la temperatura alrededor de su cuerpo bajó de repente hasta el punto de congelación.
Esta gente, por fin, mostraba su verdadero rostro.
En ese momento, ella no dijo nada, y su expresión cambió ligeramente.
«¿Artes secretas? ¿Qué artes secretas? ¿Sufres de demencia? Cuando la gente envejece, su cerebro se confunde inevitablemente, así que será mejor que te des prisa en ir al hospital antes de que te dé Alzheimer».
El rostro de Haider se ensombreció al instante, su rostro se alargó.
Al otro lado, Dexter no podía seguir escuchando, señalando la nariz de Ruby y regañándole.
«¡No te hagas la tonta! ¡Esa vieja tiene en sus manos los antiguos secretos médicos de la Familia Henderson! Ahora que está muerta, ¿¡Cómo no iba a transmitírtelos!? ¿Intentas engañarnos? ¡No puede ser! Te lo advierto, entréganoslo mientras seguimos hablando contigo como es debido, ¡O de lo contrario no me importará hacerte sufrir!».
En el momento en que estas palabras salieron, Ruby no tuvo tiempo de reaccionar, pero Levi estaba un paso por delante de ella y se puso al frente, apartando la mano de Dexter de un manotazo, sus profundos ojos estaban llenos de una frialdad infinita.
Hizo una mueca de desprecio y se llevó la lengua al paladar: «¿Sufrir? Que interesante. ¡Me pregunto cómo podrás hacerlo estando yo aquí! «.
Su fuerza no era poca, y Dexter no estaba preparado para ello, así que tropezó y estuvo a punto de caerse.
Betty, que lo había estado observando fríamente, lo sostuvo de inmediato y no pudo evitar agarrotarse en ese momento.
«¿Qué estás haciendo? Hemos venido a reclamar lo que pertenece a nuestra Familia Hussain. ¿No nos lo entregarás porque quieren quedárselo para ustedes?»
Al oír estas palabras, Ruby soltó una carcajada instantánea.
«Acabas de decir que el arte secreto se ha transmitido de generación en generación en la Familia Henderson, así que ¿Cómo ha pasado a ser propiedad de tu Familia Hussain? ¿Quién quiere quedárselo para sí? ¿Qué, trajiste a tanta gente aquí sólo para tomarlo por la fuerza? ¿No tienes miedo de que se rían de ti?».
Haider actuó como si lo diera por hecho.
«¿Y qué si la Familia Henderson ha pasado de generación en generación? Ya que Cara desertó a nuestra Familia Hussain en primer lugar y cambió su apellido a Hussain, ¡Entonces lo que ella trajo pertenecía legítimamente a nuestra Familia Hussain!»
Al ver lo desvergonzados que eran, Ruby se mostró completamente fría: «¡Entonces déjenme recordarles una vez más que todo lo que posee mi abuela no tiene nada que ver con su Familia Hussain! No creas que no sé lo que le hiciste a mi abuela en aquel entonces, ¡Y la razón por la que la dejaste entrar en la Familia Hussain fue para conseguir las técnicas secretas de su libro! ¡Y como ella no se los dio, la expulsaron! ¡Por eso ella rompió su relación con tu Familia Hussain! También podría decirte que yo tengo el arte secreto, pero mi abuela no me lo dio, ¡Es aún menos probable que te lo entregue hoy! ¡Fuera de mi vista ahora mismo!»
La muerte de su abuela ya la había puesto de muy mal humor, y ahora después de medio día de tratar con la Familia Hussain, su paciencia estaba completamente agotada. Ya ni siquiera tenía una mueca de desprecio, su rostro era recto y frío.
Originalmente, ella no quería causar ningún problema en el día del funeral de su abuela, mucho menos delante de su sala, por lo que pensó que se desharía de estas personas tan pronto como fuera posible.
Pero ahora, después de haber visto el grado de desvergüenza de esta gente, sabía en el fondo que no se irían hasta que tuvieran el arte secreto, así que simplemente enloqueció.
Cuando los tres miembros de la Familia Hussain vieron esto, sus rostros se tornaron sobrios.
«¡Bien, ya que es así, no me culpen por destruir la sala de duelo de tu abuela!»
Mientras sus palabras caían, Haider pisoteó su bastón y ordenó en voz alta: «¡Busquen! ¡Encuentren ese libro de artes secretas! Si no lo encuentran, ¡Rompan todo! Noqueen a estos dos y llévenselos».
Los hombres fornidos que estaban detrás de ellos oyeron el sonido e inmediatamente se adelantaron, haciendo un movimiento para irrumpir.
Al ver esto, las pupilas de Ruby se tensaron de repente y su ira envolvió todo su cuerpo.
A un lado, Levi, deteniéndola detrás de él, dijo con voz grave: «Déjamelo a mí».
Ruby frunció el ceño, pensando en la operación que le habían hecho hacía un rato, tiró de él detrás de ella: «No te metas, yo me encargo».
Mientras decía eso, estiró las comisuras de sus labios con frialdad, y un toque de hostilidad recorrió sus ojos, «Todavía puedo manejar a esta gente».
Justo cuando estaba a punto de dar un paso adelante, una voz desconocida intervino.
«¡Un momento!»
La voz llegó de repente, interrumpiendo los movimientos de varias personas.
La gente miró hacia atrás y vio un Lincoln negro aparcado no muy lejos detrás de ellos, luego vieron a un hombre de mediana edad saliendo del coche.
El sonido que acababa de salir parecía provenir de él.
Y no fue el único que bajó al mismo tiempo. Detrás del Lincoln había varios coches más, cada uno con cuatro hombres de negro.
Ruby miró fijamente al hombre que encabezaba el grupo y le resultó vagamente familiar, pero no recordaba dónde lo había visto antes.
En cuanto a los tres miembros de la Familia Hussain, en el momento en que lo vieron, sus ojos se abrieron al unísono y sus rostros cambiaron drásticamente de repente.
Dexter apretó los dientes, las palabras parecían salirse de sus dientes mientras decía palabra por palabra: «¡Eden Mccarthy! ¿Como es que eres tú?».
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Nota de Tac-K: Tengan un muy lindo inicio de semana queridas personitas, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. ٩(^◡^ )
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