Nuestro primer encuentro -
Capítulo 258
Capítulo 258:
«¿Podrías abrazarme un rato?»
Las palabras aparecieron en la pantalla del teléfono de Molly.
Brian entornó los ojos mirando la pantalla.
Sus ojos negros estaban fijos en las palabras de Molly. No reaccionó. Se quedó allí, mirando la pantalla. Cuando por fin se apagó la pantalla, levantó la cabeza y miró a Molly.
Molly parecía una niña enfurruñada, buscando el cariño de su negligente progenitor. Se dio cuenta de que Brian no hacía ningún movimiento. Vacilante, volvió a coger el móvil y bajó los ojos, ocultando deliberadamente su frustración y decepción. Luego se dio la vuelta y se encaminó hacia la villa.
Pero una mano fuerte tiró de su brazo y la abrazó por detrás.
Brian abrazó a Molly en silencio. La agarró por los hombros, como si quisiera impedir que se escapara. «¿Has vuelto a casa?» la voz profunda de él llegó desde detrás de ella. Brian ya sabía la respuesta a su pregunta.
Molly no contestó. Cerró los ojos y se volvió hacia él. Acercó la mejilla al pecho de Brian y escuchó los latidos de su corazón, sintiendo su aroma único. Le rodeó la cintura con los brazos y disfrutó de la sensación de seguridad que sólo sentía cuando estaba con Brian.
Tony se quedó de pie junto al coche y observó a los dos amantes abrazados bajo la luz del sol poniente. La visión era agradable, aunque triste. Admiraba el amor entre Molly y Brian, y odiaba aquella aura triste que emanaban.
Se preguntó cómo sería cuando él estuviera enamorado de una chica.
La joven pareja permaneció abrazada. Brian permaneció en silencio y con la mirada perdida.
La mente de Tony se desvió hacia una conversación que había presenciado entre Brian y Vincent ese mismo día. Su mente pronto se vio nublada por la oscuridad.
«Señor Brian Long, parece que la situación se ha complicado». El rostro impasible de Vincent apareció en el monitor durante la videollamada. «Algunos incidentes del pasado podrían estar implicados en los conflictos políticos entre la Isla del Dragón y Ciudad Cuatro-Nueve».
Hubo un breve silencio antes de que Brian hablara: «Justin pasó una vez sus vacaciones en el territorio de su hermano gemelo. Como comandante en jefe del Grupo de Ejércitos C, participaba en una misión secreta. La Isla del Dragón estaba en el límite de su poder político, por lo que nadie reparó en él allí. Sin embargo, por desgracia, fue desenmascarado y le tendió una trampa un agente de inteligencia del País X. Su misión fracasó y además le dr%garon con un potente filtrador. Se decía que las personas afectadas por esa dr%ga no tenían control sobre sus pensamientos, ni sobre su cuerpo. Era fácil engañarle y manipularle».
El rostro de Vincent se ensombreció tras oír lo que Brian había dicho. Sintió náuseas en el estómago.
Brian se recostó lentamente en la silla y cerró los ojos, ensimismado.
Momentos después, añadió: «Bajo la influencia del filtrador, violó a Sharon, que era hija de la criada de Rory. En consecuencia, se filtraron secretos de alto nivel que se enviaron al agente de inteligencia del País X. Para encubrir este escándalo, intentó inculpar a su hermano gemelo y convertirlo en chivo expiatorio. A nadie le importaba que Rory, el director general de Grupo Sunny, hubiera vi%lado a la hija de su ama de llaves, y nadie se atrevía tampoco a acusarle de vi%lación. Sin embargo, era un buen hombre y acogió a la pobre chica como su amante. Rory lo hizo para ayudar a su hermano a salir de cualquier posible problema, o lo hizo para agradecer a los padres de Sharon que le salvaran la vida».
Vincent continuó después de Brian: «Tras la marcha de Justin, el País X inició una operación militar que tuvo éxito. Más tarde se confirmó que había sido el enlace de Justin quien había filtrado información confidencial».
Después de que Vincent le diera el informe completo sobre Justin, los labios de Brian se inclinaron ligeramente hacia arriba en las comisuras. Dijo: «No era más que un juego político. Eso es todo. Detrás de Justin estaba la facción reformista de Ciudad Cuatro-Nueve. En aquel momento, tanto la facción conservadora como la reformista estaban enfrentadas. Si algo malo le ocurría a Justin, la facción reformista se vería seguramente socavada. Para encubrir su escándalo, tuvieron que mover algunos hilos y asegurarse de que sus intereses permanecieran indemnes».
Tras oír la explicación de Brian, Vincent le miró atónito. Había escarbado mucho para averiguar qué había ocurrido en el pasado, pero el señor Brian Long parecía saberlo ya todo. Vincent se dio cuenta de que había pasado los últimos días trabajando duro para nada. Brian adivinó en qué estaba pensando Vincent y sonrió.
Le dijo: «Has hecho un trabajo excelente. Sólo sé estas cosas porque estaba investigando a un otorrinolaringólogo y accidentalmente me topé con esta información que debería haber sido destruida hace siglos. Además, tus informes de investigación me habían inspirado para encontrar más. Tu expresión me dice que he acertado, ¿Verdad?».
«¡Sí! Tienes razón. Eres la persona más inteligente que he conocido en mi línea de investigación». Vincent añadió: «Tony trajo algunas muestras la última vez que estuvo aquí, e hicimos algunas pruebas de ADN. El resultado indica que Molly es efectivamente hija de Justin. Así que, tras una minuciosa investigación, parece claro que Steven está estrechamente implicado en los conflictos entre las facciones conservadora y reformista.»
Brian escuchó atentamente y se quedó pensativo un rato. Bajó los ojos e intentó disimular el creciente pesimismo que persistía en su mente. Sonrió peligrosamente y no había ni una pizca de humor en ello. No había logrado comprender ciertas cosas del pasado. De repente se le ocurrió que todo lo que estaba ocurriendo ahora estaba relacionado de un modo u otro.
No quería admitirlo, pero era lo bastante tonto como para dejarse manipular y utilizar.
Brian se estremeció de risa, lo cual era espeluznante porque el ambiente de la casa se había vuelto tenso. Vincent se sentía sofocado aunque estuviera al otro lado de la pantalla. Arrugó el ceño.
«La misión de asesinato de la fuerza especial es para impedir que sigas investigando este asunto, o…» Vincent se detuvo. Miró el rostro adusto de Brian y tragó saliva. Estaba nervioso y no sabía qué decir a continuación.
Brian levantó la cabeza y continuó: «O bien, esos tontos de la facción conservadora se aprovecharán del rencor de Steven por lo ocurrido en el pasado y provocarán problemas. Como resultado, Justin se verá obligado a actuar contra mí. Mientras tanto, también es una prueba de mi poder y mi fuerza. Esperan que suframos pérdidas por ambas partes».
Vincent torció la boca con ansiedad. Podía sentir que Brian estaba cabreado. Desde que era joven, Brian lo controlaba todo. Nunca le habían tendido una trampa ni le habían utilizado.
Molly no era más que un juguete para el Señor Brian Long. No era más que una de sus innumerables mujeres, a las que abandonaría cuando se aburriera de ellas. Sin embargo, Steven vio su oportunidad y encontró el punto débil del Señor Brian Long.
«¿Qué hacemos ahora?» preguntó Vincent con cuidado, temiendo que Brian se enfadara más.
«Dile a los nuestros que se retiren».
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