No te pertenece
Capítulo 906

Capítulo 906:

Punto de vista de Helen:

Tenía la sensación de haberlo visto antes, pero no recordaba cuándo ni dónde.

¿Nos habíamos visto antes cuando llevábamos casos?

“Esta es Helen Dewar, la que me ayuda con el conflicto de la decoración. Cobra más que tú, pero no pasa nada porque ella es mejor. No me importa pagarle más”

Le dijo Platt al hombre con un deje de culpabilidad en la voz.

Luego, se giró para mirarme y continuó:

“Helen, éste es Westley Duffy, el abogado de corazón negro del que te he hablado antes”.

Al oír el nombre del otro, todo encajó.

“¡Eres tú!”

Dijimos al mismo tiempo.

Westley y yo habíamos ido a la misma universidad y estábamos en la misma clase, pero hacía muchos años que no nos veíamos.

No me extrañó tener la sensación de haberlo visto antes.

“¿Cómo se conocieron?”

Preguntó Platt con la confusión dibujada en el rostro.

“Éramos compañeros de clase. Helen era la belleza del campus. Pero perdimos el contacto después de la graduación. No esperaba volver a verla por aquí”.

Platt me miró de pies a cabeza y preguntó incrédulo:

“¿La belleza del campus? ¿Ella? ¿Tan guapa era?”.

Ignorando su mirada, saqué mi teléfono y añadí a Westley a mis contactos.

Mi vida social cuando estaba en la universidad no era nada especial.

Después de clase, me iba a trabajar para ganar dinero, así que no tenía tiempo para hacer amigos.

Por eso, apenas conocía a mis compañeros de clase.

Y cuando por fin me gradué, tampoco volví a acercarme a ellos.

Westley seguía parloteando como si fuéramos íntimos.

“Helen, ¿No te dedicabas antes a casos de fusiones y adquisiciones?”.

La comunidad de abogados era pequeña.

Westley debía de haber oído hablar de mí antes, ya que muchos de mis compañeros de universidad estaban en el mismo campo.

No quería hablar del pasado, así que descarté el tema.

“Ahora me dedico a otras cosas”.

A diferencia de mí, Westley era conversador.

Por supuesto, mis habilidades sociales mejoraron con los años.

Ya no me escondía durante los actos sociales.

Y aunque socializar no era mi fuerte, podía arreglármelas.

Podía responder a casi todos los temas que me planteaba.

Platt, que estaba apoyado en la cama y nos observaba atentamente, nos miraba con expresión molesta.

A mi modo de ver, esperaba que me peleara con Westley.

Sin embargo, no había previsto que los dos nos conociéramos.

Insatisfecho, Platt gruñía de vez en cuando para llamar nuestra atención.

Westley y yo teníamos un acuerdo tácito.

No prestamos atención a Platt y continuamos poniéndonos al día.

Al parecer, la mayoría de mis compañeros se distanciaron después de la graduación.

Westley formaba parte del equipo de debate cuando estábamos en la universidad.

Tras años de experiencia, se había vuelto muy hábil hablando y utilizaba esa habilidad para que le fuera bien en el sector.

Unos instantes después, empezamos a hablar de nuestros otros amigos.

“Si no recuerdo mal, tu mejor amiga en la universidad era Lucy, ¿Verdad? En ese entonces eran inseparables. ¿Sabes que se casa el mes que viene?”

Preguntó Westley con una sonrisa intrigante.

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