Mi nueva oportunidad
Capítulo 6

Capítulo 6:

P.O.V. de Sapphire

Caminé sin parar. Sudando por el calor demencial que quemaba mi pálida piel.

Después de horas caminando, el sol comenzó a ocultarse y el aire se hizo más fresco, facilitando la marcha. La luna se elevó en el cielo, brillando sobre mí. Último territorio, Diosa de la Luna.

Por favor, ayúdame con esta última zona, recé a la diosa de la luna. Me quité la mochila y rebusqué en mi última botella de agua. Este es el tercer día que me convertí en pícaro. Al tercer día, dejé a mis amigos.

Me sentí increíblemente libre siendo un pícaro. Sin Alfa, sin reglas, sin matones, sin drama.

Era libre, finalmente libre.

Me quedé mirando la frontera del último territorio que tenía que cruzar. La Manada de la Luna Oscura. La manada más feroz y cruel. Esta manada era temida por todos. Escuché muchas historias de terror sobre esta manada. Las historias me daban mucho miedo. Tragué muy fuerte. Me llevará al menos medio día cruzar este territorio, ya que es bastante grande. Medio día para llegar al pueblo.

Había cruzado un total de 7 territorios de manada. Fui notado y perseguido por 2 manadas.

Tuve suerte de pasar a través de 5 manadas sin ser notado. Esta, eché un vistazo a la línea fronteriza, puede que ni siquiera sea capaz de cruzarla sin que me maten. Pensamientos positivos, dijo Drew. Respiré hondo. La última. La última manada hacia la libertad.

Justo entonces mi lobo empezó a inquietarse. Gwen, ¿qué pasa? pregunté preocupada. No sé… Estoy nerviosa de repente. Quizá sea porque estamos tan cerca de la libertad… o quizá sea porque vamos a colarnos en la manada más grande, dijo Gwen nerviosa. Deja de moverte, espetó Drew.

Oye, sé más amable -le regañé-. Soy un demonio… no puedes culparme por ser mala… Drew se encogió de hombros. Negué con la cabeza. En serio, no tenía remedio.

“Vale… ya está”. Dije, cubriendo mi olor a demonio y a hombre lobo para evitar llamar la atención.

Pasé por encima de la línea. Casi instantáneamente, la energía recorrió mi cuerpo, haciéndome estremecer. Este es el territorio de Luna Oscura.

Sentí que me recorría energía extra cuando Drew liberó algo de poder. Aumentó mis sentidos. Encontré una forma genial de conseguir mis habilidades demoníacas sin transformarme. La última vez que me transformé sola, digamos que incendié un bosque entero. Y sólo tenía 5 años.

Sentí mi corazón apretarse ante un mal recuerdo. Drew afirma que ni siquiera puede controlarse cuando toma el control total de mi cuerpo. El lado malvado de mí sale un poco en la luna roja. Mis dos mejores amigos siempre me han ayudado a no destruir nada cada año.

Justo entonces oí un pequeño crujido. Hmm, Drew… ¿Qué ha sido eso? pregunté nerviosa. Mierda… Un hombre lobo. Bueno… No te asustes Sapphire…

Pueden oler tu miedo. gruñó Drew. Gwen seguía inquieta, esta vez feliz. Gwen, ¿por qué estás contenta? le pregunté. No tengo ni idea…

contestó Gwen, que seguía dando saltitos. Puse los ojos en blanco.

Vale… Sapph, que no cunda el pánico, pero… Ahora puede sentirnos… Cada vez está más cerca, dijo Drew. Vale entonces, supongo que tendremos que luchar para salir de aquí, dije apretando los dientes. Ten cuidado, Sapph. Tu cuerpo ya está débil. Mis poderes no ayudarán mucho, me recordó Drew.

Vale, ahora puedo sentirlo en las sombras. Observando cada uno de mis movimientos. Entonces la figura salió de la oscuridad.

Salió un tipo guapísimo con el pelo rubio sucio. La camiseta ajustada que llevaba le marcaba los abdominales. Llevaba el pelo revuelto. Me gruñó. Inmediatamente, sus caninos y garras se extendieron. Pronto se puso a cuatro patas. Le gruñí, presintiendo peligro.

Me dedicó una sonrisa lobuna. Vale, no creo que pueda vencerle en una pelea con mi cuerpo en este estado. Vale, Gwen. Te toca, le dije. Inmediatamente sentí que mis caninos se alargaban y mis garras crecían. Brotó pelaje de mi cuello mientras mis huesos crujían. Pronto el pelaje castaño me cubrió y me puse a cuatro patas. Un fuerte gruñido sacudió mi pecho.

El lobo gris miró asombrado mi pelaje de color único y mi repentina fuerza. Le sonreí. Se recuperó rápidamente y gruñó más fuerte. Dimos vueltas en círculo, esperando a que nuestro oponente hiciera su primer movimiento. Se abalanzó sobre mí y le devolví el ataque. Conseguí clavarle los dientes en una pequeña parte de la espalda. Un líquido metálico llenó mi boca. Me sacudió de su cuerpo con facilidad debido a mi cuerpo ya débil.

Estoy demasiado cansada, me quejé de mi cuerpo dolorido. Contrólate, Sapph… gruñó Drew mientras enviaba otra oleada de poder demoníaco a mis venas. Inmediatamente me sentí más fuerte. Me levanté rápidamente y salté hacia él. Él se agachó rápidamente. Aterricé perfectamente a cuatro patas. Jadeé. Estaba débil… Demasiado débil.

Se abalanzó sobre mí y me derribó. Rodamos de un lado a otro, mordiéndonos de vez en cuando. Cometí el primer error al dar el primer mordisco. Él aprovechó la oportunidad y empujó mi cabeza hacia una gran piedra. Mi cabeza chocó contra ella. Drew envió un poco más de energía para aliviar el dolor.

Después de eso, me desmayé mientras un cálido líquido metálico resbalaba por mi cabeza.

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