Capítulo 443:

El scooter avanzó lentamente por la calle peatonal, recorriéndola en toda su longitud antes de incorporarse a la carretera principal.

Antes de llegar a la carretera principal, Roderick se detuvo, sacó su teléfono y se tomó un momento para comprobarlo.

Un fuerte ruido resonó cuando Roderick se bajó del scooter y su rostro se iluminó con una alegría incontenible.

«¡Han ingresado el dinero!»

exclamó Roderick, sentándose en el suelo y agitando enérgicamente su teléfono.

Los curiosos giraron la cabeza para ver qué había pasado.

Eileen estalló en carcajadas y le ayudó a ponerse en pie. «Levántate. Este dinero puede cubrir todo lo necesario para tu restaurante: el alquiler, las reformas y los gastos de puesta en marcha. Cuando abras, avísame, que seguro que estaré allí».

Roderick permaneció en el suelo, inmóvil, a pesar de los intentos de Eileen por ayudarle.

Una gota de líquido apareció de repente en el suelo, seguida de dos o tres más, emitiendo un débil sonido crepitante.

Eileen se detuvo por completo.

«Eileen, no puedo agradecértelo lo suficiente». Roderick se aferró a la pierna de Eileen, con la cara llena de lágrimas.

Por fin lo había entendido todo.

«¿Por qué me das las gracias?» preguntó Eileen, fingiendo no entender. «Pienso comer en tu restaurante con frecuencia, y eso te va a costar una fortuna».

Roderick se secó las lágrimas y la miró con decisión. «No te preocupes. Este gesto me acompañará toda la vida. Tus hijos y nietos siempre cenarán gratis».

Con los ojos aún enrojecidos, Roderick se levantó e hizo una solemne promesa. «No le defraudaré. El restaurante tendrá éxito y te lo pagaré».

«Continúa», Eileen le dio una palmada en el hombro a Roderick. «Necesito volver al trabajo. Tú deberías centrarte en tus tareas».

Los hermanos se quedaron un rato en la calle antes de tomar caminos separados.

En cuanto Roderick vio salir a Eileen, llamó inmediatamente a Judie.

«Cariño, renuncia a tu trabajo. Vamos a montar un restaurante… Sí, tengo los fondos. Vino… ¡de ganar la lotería!»

En el edificio del Grupo Freguson, Eileen acababa de entrar cuando Raymond corrió hacia ella.

«Esa astuta pareja Dawson es increíblemente lista», le dijo, entregándole una invitación.

.

.

.

Consejo: Puedes usar las teclas de flecha izquierda y derecha del teclado para navegar entre capítulos.Toca el centro de la pantalla para mostrar las opciones de lectura.

Si encuentras algún error (contenido no estándar, redirecciones de anuncios, enlaces rotos, etc.), por favor avísanos para que podamos solucionarlo lo antes posible.

Reportar