Me perteneces Omega
Capítulo 86

Capítulo 86:

Ryan le arrebató la mano del agarre.

«Tú también has venido a darme lecciones. Vete y ya está. No, espera. ¿Sabes qué? Me voy». Se dirigió hacia la puerta.

Allison aceleró para alcanzarlo y lo detuvo cuando se paró frente a la puerta. La furiosa mirada de Ryan hizo que su corazón se acelerara, pero consiguió no moverse.

Respiró hondo y levantó lentamente la mano. Lo agarró del brazo y tiró de él hacia atrás.

«Por favor, escúchame y cálmate», le dijo cuando estuvo de pie junto a la cama.

Le dio un empujoncito en dirección a la cama. Él apartó la mirada de ella y se sentó en la cama. Ella fue a buscar el botiquín.

«En el armario». murmuró él, ya que era consciente de lo que ella intentaba encontrar.

Fue al gran armario y lo abrió. Había un montón de ropa blanca y negra ordenada allí. Le recordó que aún no le había devuelto su chaqueta negra.

Rebuscó en algunos cajones antes de encontrar el botiquín. Lo sacó antes de cerrar la puerta del armario. Lo vio sentado en la cama, apoyando los codos en los muslos. Tenía la cabeza gacha. Miraba al suelo.

Inspiró profundamente antes de dar un paso hacia él. Se sentó a su lado. Le echó un vistazo rápido a los nudillos. Aún sangraban. Le cogió la mano y se la puso en el regazo después de sujetársela.

Él la miró girando la cabeza hacia ella. Ella evitó mirarle a los ojos y le limpió la sangre de la mano. Le sopló varias veces mientras siseaba. Sus ojos estaban fijos en ella. Su mirada recorrió suavemente su rostro. Pudo ver cómo le vendaba la mano. Parecía que era ella la herida.

Ella frotó su pulgar sobre el vendaje y dijo: «¿Por qué estás tan enfadado con todo el mundo? Son tu familia». No obtuvo respuesta.

Se quedó en silencio. Entonces, ella inclinó la cabeza hacia él. Él la miraba muy fijamente. Sus ojos eran desconocidos para ella. La sensación de no conocer bien a ese hombre persistía cada vez que se cruzaba con él.

«¿Ryan? Te he preguntado algo». Volvió a preguntar.

«¿Cuándo vas a romper con Ethan?»

«¿Qué?» Ella estaba estupefacta.

En esta situación, en la que tenía un conflicto con su padre, estaba pensando en su relación con Ethan.

«¿Cuándo piensas terminar tu relación con Ethan?» Inquirió una vez más.

Ella desvió rápidamente la mirada y susurró una respuesta: «Pronto».

«¿Por qué no hoy? ¿Por qué no ahora?» Su voz sonaba exigente.

«No puedo hablar con él esta noche. No es el momento perfecto».

«Entonces, ¿estás de acuerdo en romper con él? Bien.» En cuanto le oyó, se volvió hacia él.

Tenía una sonrisa de satisfacción en la cara. Ella se quedó boquiabierta.

«Estabas de mal humor hace unos minutos».

«¿Y? ¿Quieres que vuelva a estar de ese humor?». Ella negó inmediatamente con la cabeza.

«Pensaba que estabas de un humor muy serio». Alargó la mano y se la pasó por el pelo.

«Si vuelvo a mi estado de ánimo serio, no dejaré escapar a nadie».

«¿Por qué hablas así? Son tu familia».

«No, no lo son.

«Pero…»

«Allison, no quiero discutir contigo por ellos». Después de decir esto, él retiró su mano de la cabeza de ella. Ella le puso la mano en el hombro y le dijo: «Escúchame. Sé que Alpha Neil a veces habla con rudeza, pero tú no eres ningún santo».

«¿Otra vez?»

«¿Vas a escuchar lo que tengo que decir, o quieres que me vaya?»

«Tú eliges». Su respuesta la sorprendió. Suspiró e intentó convencerle de nuevo.

«Primero tienes que calmarte. ¿Por qué no te relajas y les cuentas lo que te pasa por la cabeza?».

«No me gustan». Contestó él simplemente.

Ella le miró a los ojos. Eran claros. Ella no podía decir que él estaba mintiendo.

«No digas eso». Ella murmuró por lo bajo: «Siempre digo la verdad».

«No, no lo haces. Porque vi lo mucho que te preocupabas por Ethan cuando viniste a visitarlo al hospital». Él la miró con desaprobación.

«Quería preguntarte. ¿Por qué lo aceptaste? ¿O todavía le quieres?». Ella negó con la cabeza, pero se detuvo al darse cuenta de lo que acababa de hacer. Pensó que él se burlaría de ella o sonreiría, pero en lugar de eso, se tomó la situación muy en serio.

«Bien. Como debe ser». Ella le miró fijamente.

Su contacto visual se rompió al oír la voz de Ethan.

«Allison, ¿dónde estás?» Ella se puso de pie inmediatamente y miró hacia la puerta.

«Ethan está aquí».

«¿Tienes miedo de ese perdedor?»

«¡Tsk! Ryan, por favor.» Caminó hacia la puerta y la abrió.

En ese momento, Ethan se volvió hacia ella. Estaba a punto de dirigirse a la escalera. Las cejas de Ethan se fruncieron.

«¿Qué haces en esta habitación?». Allison lanzó una rápida mirada en dirección a Ryan antes de volver su atención a Ethan.

«La mano de Ryan se lastimó, así que vine a vendarle la mano».

«No tienes que hacer nada por él. Sólo ven conmigo. Tus padres te llaman. Se van». El dijo y agarro su mano y la drogo escaleras abajo.

Allison no pudo mirar a Ryan mientras Ethan tiraba de ella hacia delante. Bajaron las escaleras, Allison vio que el ambiente no era bueno. Todos estaban en silencio.

Su padre parecía enfadado. Alpha Neil no estaba. Luna Ella tampoco estaba. Supuso que se habían ido a su habitación.

«Allison, ¿dónde estabas?» Su padre, Glen, preguntó.

Allison no pudo responder a su padre. Sabía que si su padre se enteraba de que había ido a ver a Ryan. Se enojaría con ella. No le gustaba Ryan en absoluto.

«Ella estaba en la habitación de invitados.» Ethan mintió a Beta Glen.

Allison giró la cabeza hacia él. Él le indicó con un movimiento de cabeza que se ocuparía de todo. Empezó a sentirse tranquila y preguntó: «¿Nos vamos?».

Su madre, Joey, asintió con la cabeza.

«Vámonos». Allison echó un rápido vistazo al segundo piso antes de dirigirse a la puerta principal.

Ella era consciente de que ahora no era el momento adecuado para hablar con Ethan, por lo que optó por no hacerlo. Salió de la manada. Estaba a punto de entrar en el coche cuando Ethan la detuvo cogiéndola de la mano.

Se dio la vuelta y le oyó: «Aléjate de Ryan». Ella levantó las cejas.

«¿Por qué?»

«¿Qué por qué? Como tu novio, quiero que te mantengas lejos de él».

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