Mamá correcta, papá equivocado
Capítulo 81

Capítulo 81:

La mujer se carcajeó burlesca.

“¿Crees que puedes amenazarme? No sabes con quién te estás metiendo, Xavier. Tengo información que podría hacer tambalear tu perfecta vida y la de tu familia ¿Quieres saberlo?”. Expresó Laurent con malicia.

Xavier apretó el puño con rabia, pero se mantuvo calmado.

“No me interesa lo que tengas que decir. Has lo que te dé la gana, pero a mi hija no te le acercas más. Ya no tienes ningún poder sobre ella. Ahora que sé que es parte de nuestra familia, no permitiré que la lastimes de nuevo.

Laurent soltó una risa cínica.

“Oh, Xavier, eres tan ingenuo. Crees que puedes protegerla de todo, pero hay secretos que podrían hacer mucho daño si salen a la luz. Tú mismo podrías perderla a ella”.

Xavier se mantuvo firme, negándose a dejarse intimidar.

“No sé qué crees que sabes, pero no me importa. Lo único que me importa es el bienestar de mi hija… y lo mío no es una amenaza Laurent, sino una advertencia. Sé lo que hiciste y haré todo lo posible para asegurarme de que pagues por tus acciones”.

Laurent dejó escapar una risa siniestra, antes de que Xavier cortara la llamada. Xavier se quedó pensativo, sin embargo, sabía que debía ser cauteloso y estar preparado para cualquier situación que pudiera presentarse, porque esa mujer era malvada, debía desenmascararla por completo.

No fue hasta al día siguiente, que Ángela asistió a su primera sesión con el psicólogo. A medida que compartía sus miedos y preocupaciones, el profesional la escuchaba atentamente, brindándole un espacio seguro para expresarse y comprender sus emociones.

Mientras esperaba a Ángela que estaba siendo atendida, recibió una llamada de Emir.

“¿Qué ocurre?”.

“¿Recuerda que nos entregaron el informe final y el vídeo de lo ocurrido en Los Áng$les con el accidente? Bueno, los autos que emplearon para trasladarse los responsables fueron guardados en unos galpones propiedad de las empresas Travis Geter”.

Aunque Xavier lo escuchaba, ese nombre no le decía nada.

“¿Y? No entiendo Emir”.

“Es simple señor, Travis Geter es el padre adoptivo de su hija Ángela, y eso no es todo. Desde hace seis meses el hombre colocó todos sus bienes a nombre de la niña, pero con un administrador hasta que la niña cumpla veinticinco años o hasta que se case, lo que ocurra primero, y ¿Adivine quien figura como administrador de todo?”. Interrogó Emir.

“¿Laurent?”. Interrogó con curiosidad, sin la menor sospecha de lo que le iba a decir Emir, porque después de todo él no conocía a Travis.

“No señor, usted es el administrador desde hace seis meses, pero lo más extraño es que hay un poder que usted le firmó a Laurent en su penúltimo viaje, en donde le daba potestad para administrar los bienes”.

Xavier se quedó atónito, incapaz de asimilar completamente la información que acababa de recibir.

“¿Qué diablos es eso? Yo no conocí a ese Travis, ni siquiera sabía que Ángela era mi hija para estar dándole un poder a Laurent para administrarle los bienes”. Dijo Xavier con incredulidad.

“No lo sé, señor, pedí al abogado que solicitara una prueba pericial caligráfica del libro para comprobar que usted no fue quien lo firmó y del resultado nuestros abogados iniciarán una demanda. Debemos comprobar que falsificó todo para tener el control sobre los activos de Ángela y utilizarlos en su beneficio”. Explicó Emir.

Xavier sintió una mezcla de rabia y preocupación. Se dio cuenta de que Laurent estaba dispuesta a hacer cualquier cosa para obtener dinero y poder, incluso manipular situaciones y documentos legales.

“Ponte en eso, y que se anulen todas las ventas que hizo esa mujer. Ofrézcanle lo que sea a los hombres que intervinieron en el sabotaje de la empresa, que digan quienes lo contrataron, si es posible negocien para que hablen. No voy a permitir que Laurent se aproveche de mi hija de ninguna manera”.

“Entendido, señor. Me encargaré de contactar a nuestro abogado para que tome las medidas legales necesarias y proteger los intereses de Ángela”. Expuso Emir con firmeza.

“Hay algo más, necesito que contactes a una empresa de investigación en los Estados Unidos, necesito que se investigue la causa de la muerte de Travis Geter, al parecer Laurent puede estar involucrada”. Dijo Xavier decidido.

“Así mismo lo haré, tengo algo más que decirle. Hubo otro intento de paralización de la construcción de los hoteles, pero esta vez en Tur!n, como me parecía mucha coincidencia que tuviera elementos similares a la vez anterior, mandé a investigar más. Pudieron descubrir que ha sido un saboteo de la empresa de Joel Prato… yo había parado la adquisición hostil porque usted me lo ordenó, aunque si me dice que lo reactivé en más tardar veinticuatro horas tendrá las acciones necesarias”. Aseguró Emir.

“¡Hazlo! Como me pareció que había dejado tranquila a Tamara, no quise continuar, pero creo que es la hora de ponerle las cosas en claro. Gracias por tu trabajo Emir, eres el mejor asistente de todos”.

“Siempre será un placer servirle”.

Xavier colgó la llamada. Ahora tenía una nueva preocupación en mente, pero también un impulso aún mayor para proteger a su hija y desenmascarar a Laurent de una vez por todas.

Mientras tanto, en la sesión de Ángela con el psicólogo, la niña se sentía cada vez más cómoda compartiendo sus sentimientos y miedos. El profesional le brindó herramientas para lidiar con sus temores y le aseguró que siempre tendría el apoyo de su familia.

“Recuerda, Ángela, tú no estás sola. Tu papá y Tamara están aquí para protegerte y amarte. Ahora qué sabes que eres parte de esta familia, puedes confiar en ellos, puedes hablarles de tus miedos y decirle todo lo que me has dicho a mí”. Le dijo el psicólogo con amabilidad.

Ángela asintió, sintiendo un poco de alivio en su corazón. Saber que tenía a su lado a personas que la amaban incondicionalmente, le daba fuerzas para enfrentar sus miedos y seguir adelante.

De vuelta en casa, Xavier se sentó junto a Ángela y Tamara, decidido a contarles sobre el descubrimiento del poder otorgado a Laurent.

“Ángela, Tamara, necesito hablarles sobre algo importante. Descubrimos que Laurent ha estado teniendo el control de los bienes de Travis Geter, tu padre adoptivo. Al parecer desde hace seis meses pasó los bienes a tu nombre y me dejó a mí la administración, pero Laurent ha estado usando un poder que aparentemente yo le habría firmado para usar el dinero. Cosa que no es cierta”. Explicó Xavier con determinación.

Ángela miró a su papá con confianza y le tomó la mano.

“Confío en ti, papá. Sé qué harás todo lo posible para mantenernos seguros y protegernos de Laurent”. Dijo con seguridad en su voz.

Tamara asintió y también tomó la mano de Xavier.

“Estamos juntos en esto, Xavier. No permitiremos que Laurent se salga con la suya. Haremos lo que sea necesario para mantener a salvo a Ángela y a nuestra familia”. Afirmó Tamara con determinación.

Xavier sonrió, sintiendo el apoyo y el amor de su familia. Sabía que mientras la tuviera a ellas, todo saldría bien.

Ese mismo día Laurent cumplió con la amenaza que le hizo a Xavier y filtro una información. Según ella, él mismo, usando la empresa de Travis Geter, había provocado el accidente en el que perdieron la vida tres trabajadores y unas decenas de heridos.

La noticia se propagó rápidamente, causando conmoción e indignación en la comunidad. Los medios de comunicación se hicieron eco de la tragedia y la implicación de la empresa de Travis Geter en el accidente.

Xavier, Tamara y Ángela se encontraban en casa viendo las noticias cuando se reveló la información. La tristeza y la ira llenaron el corazón de Xavier al ver las consecuencias de los actos de Laurent. Sabía que debía actuar de inmediato para desenmascararla y llevarla ante la justicia, no tenía nada que temer, pero eso causó una ola de rumores que perjudicó un poco a las empresas Sebastini y a los Ferreri.

“No se preocupen, Emir ya está recolectando las pruebas en contra de Laurent, ella no se quedará impune por esto. Debemos reunir todas las pruebas necesarias para probar su culpabilidad”. Dijo Xavier con determinación.

Tamara asintió, apoyando la decisión de Xavier.

“Tienes razón, Xavier. Debemos hacer justicia por las vidas perdidas y asegurarnos de que Laurent pague por sus acciones”.

Ángela miraba la televisión con lágrimas en los ojos. Sentía una mezcla de tristeza y miedo por lo que estaba sucediendo. Pero también sentía el amor y la protección de su familia a su alrededor, dándole fuerzas para enfrentar esta situación.

“Estoy asustada, papá. Yo sabía que ella les haría daño por mi causa, tengo miedo de que por mi culpa los hunda, será mejor que te deshagas de mí, déjale esos bienes y entrégame a ella… no quiero que les haga daño”. Sollozó.

Xavier abrazó a su hija con ternura.

“No, mi niña, no eres culpable de nada y jamás nos vamos a separar de ti. Debemos luchar contra la maldad de Laurent y buscar la verdad para que se haga justicia, esta no es la primera vez que estoy en una situación así… escúchame bien Ángela, cuando los Ferreri caemos lo hacemos de pie, nadie nos tumba, nadie nos doblega, nunca olvides esto”.

Freya había visto la noticia, y se dirigió a la casa de ellos. Apenas le abrieron, abrazó a Tamara, besó a Ángela y saludó a Xavier.

“¿Qué es todo esto, chicos? Si necesitan mi ayuda, saben que la tienen”. Dijo la mujer con sinceridad.

“Lo sé, siempre has sido la mejor amiga”. Declaró Tamara conmovida.

“Yo los dejo solos para que hablen”. Indicó la niña con una expresión de tristeza, luego se despidió de todos y subió la escalera.

Tamara suspiró con pesar.

“Todo lo que está sucediendo es difícil, pero a quien más le afecta es a Ángela, me preocupa su estado emocional”. Murmuró Tamara sintiendo su corazón arrugado.

“A mí también, pero hablaré con el psicólogo para que la ayude… y a ti Freya, de verdad gracias por venir a apoyarnos”. Señaló Xavier y enseguida comenzó a contarle todo lo ocurrido.

Al terminar, Freya hizo un gesto de indignación.

“Esa mujer es el diablo, ¿Cómo es posible que pueda tratar de esa forma a su propia hija? Eso es inconcebible. Sé que hay madres malvadas, pero esta mujer no tiene nada de empatía por Ángela, es como si fuera ajena a ella, como si la niña no le doliera, como si no la hubiera tenido en su vientre, ni cuidado, ella no creo ningún vínculo”.

Esas palabras pusieron a pensar a Xavier.

“Esperen un momento”.

De inmediato, Xavier llamó a Emir.

“Emir, necesito urgente que me busques toda la información con pruebas del lugar, fecha y clínica donde dio a luz Laurent ¡Es urgente!”.

“Listo señor, me pongo en eso”.

Cuando cortó la llamada, la mirada de las mujeres se posaron en él.

“¿Qué sospechas?”. Expresó Tamara entrecerrando los ojos, porque tenía una leve idea de lo que pasaba.

“Las palabras de Freya me pusieron a pensar ¿Qué tal si Laurent subrogo un vientre para tener a Ángela, y por eso ella no creó ningún vínculo y se comporta de esa manera con ella?”. Empezó a decir Xavier: “Es que su embarazo es sospechoso, ¿Por qué no se quedó con mis padres? Yo estaba convaleciente, mis padres le habrían dado todo el apoyo del mundo si hubiesen sabido que estaba embarazada y con la ambiciosa que es ¿Por qué no se quedó? ¿Por qué no se presentó apenas se enteró? Sabemos que Ángela es mi hija, pero sospecho de la forma en que Laurent se embarazó, debemos llegar a la verdad de todo esto”.

.

.

.