Madrastra de cinco grandes villanos
Capítulo 95 - Muerto

Capítulo 95: Muerto

Si Ji Buwang pudiera ver el rostrode Shao Xi, probablemente adivinaría lo que tenía en mente.

Sin embargo, aunque no podía ver la expresión de Shao Xi, podía sentir que Shao Xi no estaba de buen humor. Mirando a Shao Xi, se animó y sonrió.

Los niños aún necesitaban un poco de persuasión. Cuando Ji Buwang vio que había alguien vendiendo paletas no muy lejos, le dijo rápidamente a Mu Jingzhe: «Iré a comprar una paleta. Espérame aquí».

Las paletas eran realmente raras en esta época. Comer una en un caluroso día de verano hacía que uno se sintiera fresco por todas partes. Casualmente, era mediodía y el tiempo era caluroso.

Shao Xi salivó un poco cuando escuchó eso. ¡Luego, se sintió aún más confiado al recordar que hoy había recibido 100 yuanes como premio! Ahora podría comprar un montón de paletas. Sólo quería ahorrar para comprar un coche.

Después de pagar, Ji Buwang miró las paletas envueltas en una manta de algodón dentro de la caja de madera del jefe y eligió rápidamente tres.

Cuando se dio la vuelta y vio la densa multitud, su rostro se puso rígido.

¿Dónde estaba Mu Jingzhe? ¿Dónde estaba ella?

A Ji Buwang no le gustaba salir a la calle porque estaba demasiado llena de gente. Todo lo que podía ver era un mar de rostros borrosos.

En un momento así, era muy difícil para él utilizar su propio método de memoria. Una vez que se separaba de alguien, eso era todo para él.

Cuando era joven, los padres de Ji Buwang lo habían llevado de compras una vez. Como se había soltado accidentalmente de la mano de su madre, no había podido encontrarla cuando volvió a mirar hacia arriba.

Aunque su madre le había encontrado rápidamente, el incidente había dejado un trauma en su joven corazón y le había hecho sentir aversión a las multitudes.

Tenía miedo de que las personas con las que salía se ahogaran por completo en la multitud. Ese sentimiento de impotencia le dejaba una abrumadora sensación de desesperación.

Ji Buwang miró a la multitud que tenía delante y su respiración se aceleró un poco. En ese momento, vio de repente a Mu Jingzhe.

Resultó que Mu Jingzhe había girado temporalmente la cabeza de espaldas a él para decirle algo a Shao Xi. Entonces, se dio la vuelta rápidamente.

Entre el mar de miles de personas, Ji Buwang la vio a primera vista.

En medio de la borrosidad, apareció un rostro claro y brillante.

Mu Jingzhe, que también vio a Ji Buwang, levantó la mano y saludó. Recordó que Ji Buwang tenía ceguera facial y por eso lo saludó.

Esa sonrisa y el gesto de su mano quedaron grabados para siempre en la memoria de Ji Buwang.

Después de buscarla cientos y miles de veces entre la multitud, se giro de repente, y allí estaba ella junto a la tenue luz.

Ji Buwang pensó de repente en un extracto de un poema de la dinastía Song del Sur. Sonrió y se dirigió hacia Mu Jingzhe.

A partir de ahora, ya no tenía que temer a las multitudes. No importaba cuánta gente hubiera, siempre podría verla de un vistazo.

Ji Buwang les entregó las paletas. «Cómanlos».

«Gracias». Mu Jingzhe le dio las gracias mientras cogía la paleta, que desprendía aire frío.

«De nada». Ji Buwang sonrió.

Su corazón latía con fuerza y sentía una paz sin precedentes.

De pie en el centro, Shao Xi miró a Ji Buwang y luego a Mu Jingzhe, entonces no pudo evitar fruncir el ceño.

Por alguna razón, sintió que los ojos del Profesor Ji Buwang parecían bombillas, y parecían haberse vuelto aún más brillantes.

A Shao Xi no le gustaba la mirada del Profesor Ji. Era como si fuera a arrebatarle a su madre en cualquier momento.

Shao Xi tiró de la mano de Mu Jingzhe para distraerla. «Mami, ese edificio es muy alto».

«Ese edificio es el más alto de la ciudad. Incluso hay una torre allí arriba», añadió Ji Buwang. «Vamos a echar un vistazo».

Mu Jingzhe y Shao Xi dieron un mordisco a las paletas y dejaron que se derritieran lentamente en sus bocas mientras caminaban.

Mientras caminaban lentamente hacia el alto edificio, Ji Buwang estaba a punto de hablar cuando, de repente, escuchó un pequeño chillido.

Un segundo después, algo cayó desde lo alto y aterrizó con un fuerte golpe a menos de dos metros delante de ellos.

Mu Jingzhe y Shao Xi, sobresaltados, miraron instintivamente hacia allí.

Él se limitó a echar un vistazo y la paleta que tenía en la mano cayó al suelo. Debido al calor, después de que la paleta cayera al suelo, se derritió un poco al instante.

La paleta blanca creaba un fuerte contraste con el color rojo que tenía al lado. Mu Jingzhe vio el rostro que acababa de ver hace poco.

Redondo, regordete, blanco…

Sin embargo, en ese momento, su aspecto había cambiado. Su rostro se había vuelto grotesco y deforme, como si se hubiera teñido de agravios persistentes.

Mu Jingzhe y Shao Xi sabían que no debían mirar, pero no podían reaccionar en absoluto en ese momento. Sus mentes estaban en blanco.

Entonces, un par de manos bloquearon sus ojos.

«Dejen de mirar».

«No tengan miedo».

Ji Buwang les cubrió los ojos y los atrajo hacia sus brazos.

Ji Buwang naturalmente había visto todo. También era la primera vez que se encontraba con algo así.

Sin embargo, no era tan malo para él porque no podía ver el rostro de la persona. Sólo vio el miedo en el rostro de Mu Jingzhe.

Ji Buwang cubrió los ojos de Mu Jingzhe y Shao Xi sin pensarlo mucho.

La visión de Mu Jingzhe se oscureció y finalmente recuperó la capacidad de pensar.

Sintió que la mano de Shao Xi temblaba y escucho su voz temblorosa. «Mami…»

Cuando Mu Jingzhe escucho la voz de Shao Xi, tuvo la certeza de que se trataba del niño regordete, el niño que había insultado a Shao Xi llamándole ‘pueblerino’.

Tal vez porque el sol era demasiado intenso, Mu Jingzhe se sintió mareada.

Se esforzó por calmarse y sujeto con fuerza la mano de Shao Xi. «No tengas miedo, Pequeño Xi. No tengas miedo».

Intentó consolar a Shao Xi, pero le temblaba la voz y no podía controlar sus manos. «Tenemos que llamar a una ambulancia…»

Mu Jingzhe olvidó momentáneamente que no estaban en la era moderna. Aturdida, empezó a buscar su teléfono, queriendo usarlo para llamar a una ambulancia.

Ji Buwang no sabía qué buscaba Mu Jingzhe, así que la tomo de la mano. «Jingzhe, ¿Qué estás buscando?»

Sólo entonces Mu Jingzhe recordó que no tenía teléfono.

Todo lo que Shao Xi podía sentir en su corazón era frío. Le llevó mucho tiempo encontrar la fuerza para tomar la mano de Mu Jingzhe con fuerza.

«Profesor Ji… ¿Puede salvarlo?»

Ji Buwang frunció las cejas y miró el charco de sangre frente a él, sintiendo que era demasiado tarde para eso.

Cuando todos se enteraron del accidente, se reunieron alrededor. Un hombre se adelantó con valentía y sacudió la cabeza. «No respira».

Él… había muerto.

El corazón de Shao Xi se hundió cuando escuchó esto.

Acababa de ganar la competición y se había sentido feliz por haber ganado el premio, pero esa misma tarde, había visto a su competidor saltar a la muerte justo delante de él.

Debido a que habían discutido anteriormente y a que el niño regordete había dicho cosas malas sobre él y lo había despreciado, Shao Xi lo había encontrado realmente molesto. Incluso se había alegrado de haberle vencido, pero un segundo después, había muerto delante de él.

¿Por qué? ¿Por qué había muerto? ¿Había saltado porque había perdido?

¿Fue porque Shao Xi había ganado?

Shao Xi no pudo evitar preguntarse si esto no hubiera ocurrido si él no hubiera acudido a la competición y hubiera ganado.

Shao Xi inconscientemente ejerció fuerza con su mano, y Mu Jingzhe, cuya mente aún era un desastre, fue repentinamente despertada por el contundente agarre de Shao Xi.

Este no era el momento de tener miedo. La persona más importante ahora era Shao Xi. Shao Xi era el que había sufrido el mayor golpe.

Mu Jingzhe se mordió la punta de la lengua para calmarse y abrazó a Shao Xi.

«Está bien, Pequeño Xi. No tengas miedo».

Shao Xi dejó escapar un duro suspiro cuando Mu Jingzhe le abrazó. «Mami, ¿Es por mi culpa…?».

«No, definitivamente no. No tiene nada que ver contigo», respondió inmediatamente Mu Jingzhe con firmeza. «Acabamos de conocerlo hoy. No tiene nada que ver con nosotros».

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Este capítulo se tradujo lo más antes posible gracias a RafaVentu95!

Quien uso sus beneficios para traducir los capítulos lo más antes posible!

El capítulo 95

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