Madrastra de cinco grandes villanos
Capítulo 375 - Ella no quería contraer una enfermedad terminal

Capítulo 375: Ella no quería contraer una enfermedad terminal

Cuando Mu Jingzhe pensó en los niños, pensó en el Pequeño Wu. Ella miró el cielo fuera de la ventana y rápidamente dijo: «Tenemos que recoger al Pequeño Wu. Ya debería haber terminado de practicar».

«Ah, cierto. Casi me olvido de recoger al Pequeño Wu. Haré que alguien lo recoja».

«Sólo ve a recogerlo tú mismo. Habla con el Pequeño Wu correctamente, o lo asustarás».

Ji Buwang estaba preocupado por Mu Jingzhe y no quería dejarla atrás de nuevo, pero Mu Jingzhe estaba aún más preocupado por el Pequeño Wu. «Ahora estoy en el hospital. Puedes irte».

Ji Buwang sólo podía ir a recoger al Pequeño Wu primero. Al final, no encontró al Pequeño Wu en el lugar de ensayo y le dijeron que el Pequeño Wu había regresado temprano. Ji Buwang rastreó la ruta de vuelta a casa y vio a la abatidal Pequeño Wu justo cuando estaba a punto de llegar a su casa.

«¡Pequeño Wu!» Ji Buwang soltó un suspiro de alivio cuando lo vio. «¿Por qué no dijiste nada antes de volver?»

«Tío, ¿dónde está mamá?» el Pequeño Wu preguntó inmediatamente al ver a Ji Buwang.

«Tu madre está en el hospital…»

Ji Buwang acababa de terminar de hablar cuando el Pequeño Wu impotente dio un paso atrás. «¿Mamá está realmente enferma?»

«¿Sabías que tu madre está enferma? ¿Quién te lo ha dicho?»

«Nadie me lo dijo. Lo adiviné porque estaba preocupada». El Pequeño Wu agarró la mano de Ji Buwang. «¿Mamá está muy enferma?»

Ji Buwang no dijo si estaba gravemente enferma. Sólo dijo: «Ya está despierta. Vamos al hospital a verla primero».

«De acuerdo». Cuando el Pequeño Wu vio que Ji Buwang no había respondido directamente, las lágrimas brotaron de sus ojos. «Tío, mamá no va a morir, ¿verdad?»

«Por supuesto que no. Sólo está enferma. Se curará pronto», respondió inmediatamente Ji Buwang con seguridad.

«Eso es bueno». Los ojos del Pequeño Wu estaban rojos. «A mamá no le puede pasar nada».

«No llores. Tu madre definitivamente estará bien. ¿Por qué estás llorando tanto hoy?»

El Pequeño Wu se secó las lágrimas. «Es que estoy muy preocupado y asustado. Mamá nunca había estado enferma».

Cuando llegó al hospital, vio a Mu Jingzhe sonriéndole desde la cama del hospital. El Pequeño Wu corrió hacia ella. «¡Mamá!»

el Pequeño Wu abrazó entonces a Mu Jingzhe. Había querido contenerse, pero al ver su rostro pálido, no pudo evitar romper a llorar. «Mami, no puede pasarte nada».

«No me pasará nada. Sólo estoy enferma. Todo el mundo se pone enfermo de vez en cuando».

«Pero tú estás muy enferma…»

«Quizá porque nunca he estado enferma antes, se acumula y ocurre de golpe. No pasa nada».

Después de engatusar por fin al Pequeño Wu de cara llorosa, Mu Jingzhe se sintió un poco impotente al ver que se aferraba a ella. «De acuerdo, no tengas miedo. Estoy muy bien. Ya no me siento mal».

Ji Buwang fue a preparar la comida, pero Mu Jingzhe no tenía mucho apetito. La razón principal era que parecía sentirse fatal cada vez que comía algo. Ya estaba traumatizada.

Shao Qihai probablemente había sido notificado por Jiang Feng, ya que seguía contactando con ella, haciendo que su localizador siguiera sonando. Mu Jingzhe tomó prestado el teléfono del hospital para llamar a Shao Qihai.

«Shao Qihai, soy yo».

Shao Qihai dejo escapar un suspiro de alivio cuando escuchó la voz de Mu Jingzhe. «¿Estás bien? Jiang Feng de repente se puso en contacto conmigo y dijo…»

Shao Qihai no pudo continuar. Las palabras de Jiang Feng habían sido duras, y había descrito lo que había visto en detalle. Shao Qihai se había preparado mentalmente para descubrir que Ji Buwang hablaba en serio. Había estado esperando a Mu Jingzhe durante mucho tiempo.

Sin embargo, ahora que había escuchado que ya eran pareja, era como si pudiera ver el día en que Mu Jingzhe realmente se divorciaría de él.

Quiso preguntar si Mu Jingzhe había aceptado el amor de Ji Buwang, pero escuchó a Mu Jingzhe decir: «Sé lo que te dijo. No le dijiste a Jiang Feng que ya habíamos firmado un acuerdo de divorcio. Estaba furioso. Le dije que ya habíamos discutido el divorcio y le expliqué que me sentía mal, pero no me escuchó».

«¿Te sientes mal? ¿Estás enferma?» Shao Qihai se sorprendió cuando escuchó eso. «¿Es grave? Jiang Feng estaba tan agitado cuando habló que no mencionó que estabas enferma».

«Sí, lo estoy. Ahora mismo estoy en el hospital. Todavía no han descubierto lo que es. No sé si es grave. No se lo digas a los niños por el momento. Puede que sólo sea un pequeño problema. Tal vez esté bien en un par de días. Se los diré cuando me recupere».

Mu Jingzhe no quería que Shao Dong y los demás estuvieran ansiosos. Por supuesto, ella no planeaba ocultarlo para siempre. Estaría bien si fuera una enfermedad menor. Si era una enfermedad mayor, tendría que contárselo a Shao Dong y a los demás.

Shao Qihai sabía que Mu Jingzhe había gozado de buena salud todo el tiempo y se preocupó mucho cuando se enteró de que estaba enferma. «Lo entiendo. No se lo diré por el momento, pero ¿Estás realmente bien? ¿Por qué no voy directamente?»

«Por ahora no pasa nada. Ya veremos cuando salgan los resultados. Todavía tienes que cuidar de Shao Dong y los demás. No vengas. Te diré los resultados cuando salgan.

Estoy bien aquí… Bien, eso es todo por ahora. Voy a colgar.»

No era conveniente hablar del procedimiento de divorcio por teléfono. Además, todavía estaba en el hospital. Mu Jingzhe planeaba decírselo a Shao Qihai en persona cuando le dieran el alta y entonces resolver el asunto inmediatamente.

Sólo que no sabía cuándo le darían el alta, ni sabía de qué enfermedad se trataba. Esta era también la razón por la que Mu Jingzhe no había presumido como ayer y sólo se había atrevido a decir que estaba bien por el momento. Esto se debía a que no sabía si su cuerpo iba a doler de repente como ayer.

De hecho, tenía mucho miedo. Todo el mundo tendría miedo en su lugar. El dolor era simplemente demasiado aterrador. Lo más importante es que había vomitado sangre. ¿Una persona normal vomitaría sangre? Eso sólo ocurría en los dramas de televisión y en las novelas, ¿de acuerdo?

Mu Jingzhe llegó a sospechar que sufría una enfermedad terminal. Después de todo, ¡había vomitado sangre!

Al pensar que tenía una enfermedad terminal, Mu Jingzhe tuvo miedo. No había muerto antes de transmigrar. Esta vez, moriría de verdad. Cuanto más pensaba en ello, más miedo sentía. No podía calmarse en absoluto.

Estaba muy preocupada por su salud y estaba bajo demasiada presión, así que Mu Jingzhe no podía dormirse. El Pequeño Wu y Ji Buwang no se retiraron e insistieron en vigilarla.

Después de dar vueltas en la cama durante toda la noche, finalmente se quedó dormida y se despertó de nuevo. Cuando se despertó, oyó al Pequeño Wu hablar en sueños.

«Mami, no te mueras. No quiero que te mueras…»

Mu Jingzhe estaba a punto de llorar cuando escuchó eso. Mordió la manta para no llorar a gritos.

Sollozando, sollozando… Ella tampoco quería morir. No era fácil para ella vivir finalmente una buena vida. Ahora que había comprado una pequeña villa, viviría una buena vida en el futuro. Con el Pequeño Wu y el resto a su lado, tenía una familia, dinero y apariencia. Uno no podría tener suficiente con una vida así, sin importar lo que pasara. ¿Cómo podría soportar la muerte?

Antes, estaba orgullosa de tener buena salud y de no enfermar fácilmente. En los últimos dos años, ni siquiera había cogido un pequeño resfriado. Sin embargo, todo el mundo decía que era bueno resfriarse una o dos veces al año. La gente que no se resfriaba ni enfermaba podía contraer una enfermedad grave en el futuro.

Por lo que parece, esto podría ser bastante acertado. Ella nunca había estado enferma, y por eso las cosas habían salido así ahora que había caído enferma de repente.

Al pensar en una enfermedad grave o en la muerte, Mu Jingzhe sintió miedo. Se había convertido en un personaje de novela, pero no podía ser tan intrépida como uno. Le aterrorizaba la muerte. El miedo a la muerte era una característica suya, y no podía soportar dejar atrás una vida tan buena.

Además, ni siquiera había esperado a que los cinco niños crecieran. Los había criado durante los últimos años y había desarrollado sentimientos por ellos. Ella tampoco había estado nunca en una relación apasionada.. Realmente no podía aceptar pasar por esto durante dos vidas.

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