Madrastra de cinco grandes villanos
Capítulo 332 - La pequeña hada reparte caramelos

Capítulo 332: La pequeña hada reparte caramelos

Normalmente, en cuanto la gente oía un nombre como Zhaodi, sabía que la familia favorecía a los niños sobre las niñas. La Pequeña Zhaodi no había sido una excepción. Su familia siempre había querido un niño. Como hija mayor, la llamaron Zhaodi. Más tarde, sus hermanas menores recibieron los nombres de Yindi, Daidi, Sidi, Niandi y Pandi. Como su familia vivía en la montaña y no tenía un registro familiar, su madre había dado a luz a un niño cada año con la esperanza de tener un hijo.

Cuando finalmente dio a luz a un hijo ese año, ya no necesitó usar nombres como «Xiangdi» y «Laidi».

Como no podían permitirse criar a tantos niños, las siguientes niñas fueron regaladas después de ser nombradas.

Sin embargo, esto no era suficiente. Ahora que tenían un hijo, tenían que cuidarlo bien. Las únicas hijas que quedaban en casa para ayudar en las tareas, Zhaodi y Yindi, también tuvieron que ser ‘enviadas’ lejos.

Al ser la mayor, Zhaodi había ayudado a sus padres en el trabajo durante mucho tiempo. Era especialmente diligente e incluso había dicho que podía ayudar a cuidar a su hermano menor. En un principio había pensado que así no la mandarían fuera, pero al final, la habían mandado fuera de todos modos.

Zhaodi era muy delgada y morena. Tampoco hablaba mucho. Se pasaba el día acobardada y sólo trabajaba duro.

Era tan joven que no podía cuidar de Zhao Lan en absoluto. Sin embargo, no se atrevió a desobedecer a la Cuñada Mayor Shao, así que hizo lo que le dijeron.

La Cuñada Mayor Shao estaba muy satisfecha con lo que veía. Le gritaba a Zhaodi que se pusiera rápidamente a trabajar, pues le daba la impresión de estar dando órdenes a Li Zhaodi.

Estaba especialmente descontenta con Li Zhaodi. En el pasado, todos los habitantes de la aldea habían despreciado a Li Zhaodi. La Cuñada Mayor Shao también había despreciado a Li Zhaodi. Pero ahora, Li Zhaodi había entrado en la ciudad condado para hacer negocios, y era ella la que era despreciada y desdeñada en la aldea.

La Cuñada Mayor Shao se sintió agraviada. Ordenar a Zhaodi que trabajara satisfizo parte de su imaginación y se sintió bien.

Estaba de buen humor y se sentía satisfecha, pero Fu, Lu y Shou estaban muy descontentos. «Ella es tan oscura. No quiero que sea mi esposa».

«Yo tampoco quiero eso. Es tan pequeña».

«Mamá, ninguno de nosotros la quiere».

«¿No la quieren? ¡Si pueden, búsquense una esposa ustedes mismos!» La Cuñada Mayor Shao estaba insatisfecha.

«De todos modos, no la queremos. Quien quiera una chica tan oscura puede tenerla. Todos se reirán de nosotros. Ninguna familia tiene una novia infantil. Sólo nuestra familia tiene una».

«Entonces ayúdame a cuidar de tu abuela. ¿No necesito una ayudante también?»

«Eso no servirá. Está muy apestosa y sucia».

Hubo una conmoción en el patio. Al oír esto, la Pequeña Zhaodi se sintió aterrorizada. Tenía miedo de que la echaran también de este lugar. Apretó los dientes y, sin importarle la suciedad, hizo uso de todas sus fuerzas para dar la vuelta a Zhao Lan.

Al oír la conmoción de fuera, Zhao Lan no pudo dejar de llorar. «¡Qué pecado! Esto es un castigo del cielo».

Su hijo y nietos a los que antes había adorado tanto ahora la despreciaban. Sus promesas de comprarle zapatos de cuero y un coche en el pasado sólo habían sido para complacerla.

Después de llorar un rato, miró a la tímida Pequeña Zhaodi. Era raro que la compasión de Zhao Lan se agitara. «Eres muy joven. Deja de atormentarte. Deja que se ensucie. No puedo seguir pecando».

Zhao Lan pidió a la Pequeña Zhaodi que saliera. Tan pronto como la Pequeña Zhaodi salió, Shao Fu dio un gran paso atrás. «Apestas».

«Vete. No vuelvas a venir a nuestra casa. ¡No te queremos!»

Shao Lu dio un paso adelante y empujó a la Pequeña Zhaodi. La Cuñada Mayor Shao frunció el ceño. «¿Qué estás haciendo?»

«¡Mamá, échala!»

«Así es. No la queremos. Si Shao Dong y sus hermanos se casan con chicas de la ciudad en el futuro, será tan embarazoso para nosotros traerla. Nosotros también queremos casarnos con chicas de la ciudad». Sólo entonces vivirían una buena vida como gorrones.

Shao Lu cogió la escoba y echó a la Pequeña Zhaodi. Ni siquiera le permitió quedarse en la puerta. La Cuñada Mayor Shao se sintió impotente, pero no regañó a sus hijos. Al fin y al cabo, en su corazón sabía que, si no se hubiera visto obligada por la realidad, tampoco se habría conformado con una novia infantil como la Pequeña Zhaodi.

En primer lugar, la madre de la Pequeña Zhaodi sólo había dado a luz a un hijo después de haber tenido varias niñas. Las hijas tienden a parecerse a su madre. ¿Y si la Pequeña Zhaodi seguía dando a luz a hijas también?

En segundo lugar, la Pequeña Zhaodi procedía de la montaña, que era aún más remota que la Aldea del Oriente. Además, tenía la piel muy oscura y no se podía confiar en su familia materna. De ser posible, a la Cuñada Mayor Shao le hubiera gustado buscar una chica de la ciudad. Después de todo, Shao Dong, Shao Nan, Shao Xi, Shao Bei y Shao Zhong se casarían definitivamente con alguien de la ciudad y vivirían una buena vida. ¿Cómo iba a aceptar que sus hijos se quedaran atrás?

«De acuerdo, no digan nada más. Sé lo que estoy haciendo. Aunque sea una novia infantil, si realmente no les gusta y consiguen encontrar una buena pareja, no tendrán que casarse con ella».

Sólo quería estar segura y encontrar a alguien que trabajara para ella. Alguien a quien pudiera exprimir.

Estaban hablando en el patio. Después de que la despreciada Pequeña Zhaodi fuera expulsada, no se atrevió a acercarse a la casa del Hermano Mayor Shao ni a moverse. Bajó la cabeza, queriendo llorar, pero sin atreverse.

Su familia siempre le había prohibido llorar. Decían que ahuyentaría la buena fortuna si lloraba demasiado y que no conseguirían un hijo por culpa de su llanto.

La Pequeña Zhaodi estaba conteniendo las lágrimas cuando, de repente, escuchó unas risas tintineantes frente a ella. «¡Tercer hermano, no empezarás a correr primero!»

Cuando la Pequeña Zhaodi levantó la vista, se quedó atónita. Esta persona era tan bella y atractiva. El vestido que llevaba, su cabello y el adorno que llevaba en la cabeza eran muy bonitos. Al rebotar, parecía brillar bajo la luz del sol.

La Pequeña Zhaodi pensó: «Debe ser una pequeña hada, ¿verdad?».

La pequeña hada de sus sueños tenía este aspecto.

«¿Eh?» La persona que ella pensó como Hada Pequeña era en realidad la Pequeña Bei. Inicialmente estaba compitiendo con Shao Nan para ver quién llegaba primero a casa, cuando inesperadamente vio a la Pequeña Zhaodi en la puerta.

«¿Quién eres tú? ¿Por qué estás ahí?»

Mientras miraba la bella apariencia de la Pequeña Bei, la Pequeña Zhaodi escondió cuidadosamente su oscura y pequeña mano detrás de ella. Sin embargo, tenía miedo de que la Pequeña Hada la encontrara maloliente, así que dio un paso atrás antes de decir: «Soy Zhaodi».

«¿Zhaodi? ¿No es el nombre de la abuela?» La Pequeña Bei miró a la Pequeña Zhaodi. «Realmente tienes el mismo nombre que la abuela».

Shao Nan estaba a su lado. «Vamos a casa. Debe ser la novia infantil que trajeron».

Shao Nan era muy frío y no quería prestar atención a estas cosas. Miró a la Pequeña Zhaodi y tiró de la Pequeña Bei hacia su casa.

La Pequeña Zhaodi miró en secreto a Shao Nan, que se parecía a la Pequeña Bei, y pensó aturdida: «Este es un niño hada, ¿verdad?».

Sin embargo, al pequeño hada no parecía gustarle mucho…

La Pequeña Bei fue arrastrada a casa por Shao Nan, pero sus ojos estaban aturdidos. «Hermano, si no me hubiera salvado mamá entonces, ¿Habría sido como ella?»

Cuando había sido enviada por Zhao Lan, esa familia había querido enviarla a ser una novia infantil. Lo recordaba muy claramente.

Shao Nan lo negó inmediatamente. «No, no lo harías. Te habríamos encontrado».

«Entonces, ¿Podría algún miembro de la familia estar buscando a Zhaodi, que tiene el mismo nombre que la abuela?»

Shao Nan hizo una pausa. A diferencia del Pequeña Bei, cuando había ido al baño durante el descanso, ya había escuchado la historia de la novia infantil.

Ninguna familia vendría a buscarla porque era su familia la que la había vendido.

Después de que Shao Nan había oído eso, no había dicho nada a nadie y no se había tomado este asunto en serio. Sólo prestaba atención a las personas que le importaban.

Pero la Pequeña Bei no parecía ser así. Esa niña tenía la misma edad que ella, así que esto la hizo pensar en sí misma.

Justo cuando Shao Nan iba a decir algo, salió Mu Jingzhe. «¿Por qué están de pie en el patio? ¿Por qué no entran?»

«Mamá, hay alguien fuera con el mismo nombre que la abuela».

«¿También se llama Zhaodi?» Mu Jingzhe no había esperado que la novia infantil que había encontrado la Cuñada Mayor Shao tuviera el mismo nombre que su madre.

«Así es, mamá. ¿Qué edad tiene? Parece más joven que yo. ¿Por qué se llama también Zhaodi?»

«Creo que tiene la misma edad que tú. En cuanto a por qué se llama Zhaodi… mucha gente tiene este nombre».

Aunque no era un buen nombre, había muchas chicas que se llamaban Zhaodi en esa época.

.

.

.