Madrastra de cinco grandes villanos
Capítulo 314 - Te daré un millón de yuanes

Capítulo 314: Te daré un millón de yuanes

Los ojos de Shao Qiyun se iluminaron. «¿De verdad? ¿Realmente puedo casarme con la Familia Ji? ¿Están dispuestos a aceptarme?» ¡¿Realmente tuvo la suerte de experimentar algo así?!

El Viejo Maestro Ji ignoró la mirada de Ji Buwang y asintió. «Sí, siempre y cuando aceptes una condición».

«¿Qué condición?» Shao Qiyun estaba encantado de escuchar que había una sola condición. «Dime, voy a estar de acuerdo con ella. No sólo una condición. Incluso tres o cuatro estarán bien». Todo podría ser negociado después de casarse.

«No es necesario. Una condición es suficiente, ya que será imposible que aceptes cualquier otra condición después de aceptar esta.»

«¿Qué clase de condición es esa?» ¿Por qué no podía aceptar otra cosa sólo porque ya había aceptado ésta?

«¿Ni siquiera puedes adivinar?» El Viejo Maestro Ji estaba divertido.

«Apresúrate y dilo. Definitivamente estaré de acuerdo». Shao Qiyun estaba ansioso.

El Viejo Maestro Ji sonrió y dijo sus últimas palabras. «La única condición es que mueras. Siempre y cuando mueras».

«¿Qué?» La expresión de Shao Qiyun cambió drásticamente. «¿Qué quiere decir con tal de que muera? ¡Qué clase de condición es esta!»

«Yo tampoco tengo elección. ¿Quién le pidió al Pequeño Wu que perdiera a su padre biológico? Sólo tengo dos nietos. Buwang no puede casarse contigo. Si insistes en casarte con alguien, sólo puedes casarte con su hermano mayor. Soy un padre de mente abierta. Incluso después de que esté muerto, no quieres dejarlo ir e insistes en casarte con la Familia Ji. Entonces sólo podrás tener un matrimonio fantasma».

El Viejo Maestro Ji dijo por adelantado: «Un matrimonio fantasma es un evento supersticioso feudal. No puedo garantizar que funcione, pero viendo que eres tan sincera, aún puedo ayudarte».

¿Cómo podía Shao Qiyun no darse cuenta de que el Viejo Maestro Ji estaba jugando con ella? Básicamente le estaba diciendo que, si quería casarse con la Familia Ji, tendría que morir.

¿Pero cómo iba a soportar morir? ¿Cómo iba a morir?

Shao Qiyun miró al tranquilo y aparentemente fácil Profesor Ji y se sintió inexplicablemente aterrado. Con una persona así en la Familia Ji, probablemente no sería fácil para ella casarse con la familia. Desafortunadamente, el Pequeño Wu tampoco la reconocería.

La cara de Shao Qiyun se puso verde, y se vio obligada a poner en práctica el segundo plan.

«¡Eres despiadado!» Respiró profundamente. «Sé que me desprecias, así que está bien si no me caso con la Familia Ji, pero no puedes descartarme así. Di a luz al Pequeño Wu, y es cierto que tu buen nieto se llevó mi inocencia. Arriesgué mi vida para dar a luz al Pequeño Wu y dejarle descendencia. Aunque no haya realizado actos meritorios, he trabajado duro. Tienes que darme una suma de dinero».

«¿Dinero?» El Viejo Maestro Ji levantó las cejas. «¿Aún quieres dinero?» Era ciertamente una atrevida, eh.

«Por supuesto que quiero dinero. ¿Por qué no habría de quererlo? Trabajé muy duro para darlo a luz».

Shao Qiyun pensó durante un rato y finalmente apretó los dientes y dijo: «No quiero demasiado. Sólo dame un millón de yuanes. Creo que, con su valor neto, no tendrá problemas para pagar esta cantidad. Creo que la última línea de sangre de la Familia Ji vale un millón de yuanes. Mientras me des el dinero, me iré inmediatamente».

Un millón de yuanes sería suficiente para ella para derrochar durante algún tiempo.

Shao Qiyun realmente se atrevió a abrir la boca y hablar. Un millón de yuanes ya era una suma muy grande en la era moderna, por no hablar de una época en la que las cosas sólo costaban unos céntimos.

Un hogar de 10.000 yuanes ya era un hogar honorable. Era una hazaña increíble tener un millón de yuanes. Sólo Shao Qiyun se atrevería a pedir tanto.

Mu Jingzhe miró a Shao Qiyun, que tenía la misma expresión de piquete que la última vez, y se quedó sin palabras. La última vez, había exigido que le dieran dinero, y esta vez, se lo había pedido a Ji Buwang y a su abuelo. Su apetito era cada vez mayor. ¿Qué le daba esa confianza?

El puño de Mu Jingzhe se cerró mientras miraba a Shao Qiyun. Estaba a punto de decirle al Viejo Maestro Ji que no se enfadara y que le dejara a ella la tarea de darle una lección a Shao Qiyun, cuando el Viejo Maestro Ji de repente le sonrió a Shao Qiyun.

«Jaja… Hace mucho tiempo que no me encuentro con algo así. Buwang, ¿Cuánto tiempo ha pasado desde que conocí a una persona así? Me está pidiendo un millón, eh. Es bastante refrescante, ¿no?»

Ji Buwang: «¿Quién se atrevería a decir tal cosa frente a ti?»

¿No sería eso como cortejar a la muerte?

«Estoy un poco enfadado, pero creo que es muy mágico». El Viejo Maestro Ji miró a Shao Qiyun como si fuera un objeto raro.

Shao Qiyun se sintió incómodo bajo su mirada. «¿Qué estás mirando? Sólo dime si me lo vas a dar o no. No importa lo que digas, no me siento culpable por pedir esta suma de dinero. Si no fuera por mí, ¿tendrías un nieto tan destacado? El Pequeño Wu incluso está empezando a ganar dinero ahora».

Ella pensó por un momento y de repente miró al Pequeño Wu. “Pequeño Wu, cuánto vales a los ojos de la Familia Ji ahora depende de cuánto estén dispuestos a darme».

Cuando hacía cosas malas, la mente de Shao Qiyun era siempre especialmente ágil e inteligente.

Ella era la que quería dinero, pero se había convertido en una prueba de la importancia del Pequeño Wu para la Familia Ji.

El Pequeño Wu la fulminó con la mirada. «¿Qué tiene que ver esto conmigo?»

Shao Qiyun no respondió pero miró al Viejo Maestro Ji. El Viejo Maestro Ji miró a Shao Qiyun y de repente se rió a carcajadas. «Esto es realmente interesante».

Ji Buwang dijo impotente: «Sí, es muy interesante».

El Viejo Maestro Ji evaluó a Shao Qiyun. «Realmente tienes bastante talento a la hora de pedir dinero. Aunque lo que has dicho es retorcido, tiene sentido ahora que lo pienso».

El Viejo Maestro Ji lo meditó por un momento. «Ahora que lo mencionas, sí deberíamos darte esa suma de dinero. Después de todo, el Pequeño Wu es muy importante para nosotros».

Los ojos de Shao Qiyun se iluminaron. «¿Estás de acuerdo?»

El Viejo Maestro Ji tarareó despreocupadamente. «Ya que ha dicho eso, no será bueno si no damos el dinero. En realidad, no es que no pueda dar esta suma de dinero. Un buen nieto como el Pequeño Wu vale incluso diez millones de yuanes, por no hablar de uno o dos. Mientras lo tenga, daré el dinero sin dudarlo».

Los ojos de Shao Qiyun se iluminaron, y de repente se puso de pie. La forma en que miraba al Pequeño Wu era como si estuviera mirando una montaña de oro. Oh, cielos, ella sólo había tratado de declarar todo el dinero que había pensado que podría conseguir. ¡Ella no había esperado que él estuviera realmente de acuerdo!

Además, no era sólo un millón de yuanes. Incluso había ofrecido directamente diez millones de yuanes. ¡Diez millones de yuanes era un concepto impensable!

Shao Qiyun estaba extasiada. Inconscientemente extendió su mano frente al Viejo Maestro Ji, esperando que le dieral dinero lo antes posible. Ya estaba pensando en cómo gastar esa enorme suma de dinero.

Había pensado que los cielos no podían permitirle ser desafortunada todo el tiempo. Ahora, las tornas habían cambiado.

«¿Diez millones? ¿De verdad le estás dando diez millones de yuanes? ¿O sólo le estás dando un millón de yuanes?»

La expresión del Pequeño Wu cambió. Quiso dar un paso adelante para detenerlo, pero Ji Buwang lo contuvo. Ji Buwang le hizo callar y le pidió que siguiera observando.

En medio de la ansiedad del Pequeño Wu y el éxtasis de Shao Qiyun, el Viejo Maestro Ji dejó de repente de hablar apasionadamente y cambió de tema. «En realidad, podría darte un millón o diez millones. Como dijiste, eres la madre biológica del Pequeño Wu. Así que mientras trates bien al Pequeño Wu, podría darte cualquier cosa».

Shao Qiyun, que estaba exultante, no pudo reaccionar por un momento. «Lo haré. Definitivamente trataré bien al Pequeño Wu en el futuro».

«Pero no estamos hablando del futuro. Estamos hablando del pasado. Después de todo, estamos ajustando una cuenta pasada». El Viejo Maestro Ji la miró con lástima. «Shao Qiyun, ser buena con el Pequeño Wu es mi única petición para darte dinero. Pero tú… ¿Por qué no lo hiciste?»

Shao Qiyun se congeló y no pudo reaccionar por un momento. «¿Qué? ¿Qué quieres decir?»

El Viejo Maestro Ji suspiró. «¿Qué más podría significar esto? Significa que, si hubieras tratado mejor al Pequeño Wu en el pasado, habría estado de acuerdo con lo que dijeras».

«¿Y ahora? ¿No me vas a dar el dinero?»

«Así es». El Viejo Maestro Ji asintió con toda naturalidad. «No trataste bien al Pequeño Wu anteriormente, así que ¿Por qué debería dártelo? ¿Crees que soy un tonto?»

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