Madrastra de cinco grandes villanos -
Capítulo 222 - ¿Quién es exactamente la madre del Pequeño Wu?
Capítulo 222: ¿Quién es exactamente la madre del Pequeño Wu?
Mu Xue estaba aturdida. «No les he asustado. Tampoco dije que quería casarme contigo. Ellos lo malinterpretaron…»
Shao Qihai frunció el ceño. «Entonces, ¿por qué buscaste a los niños y les dijiste esas cosas? Son niños y lo malinterpretaran».
«¡No quería!» Los ojos de Mu Xue estaban rojos. «Sólo escuché a los aldeanos cotillear que vivías de una mujer y que eras un inútil. Ese Ji Buwang llamó a tu puerta, pero no te atreviste a decir nada y hasta lavabas la ropa todos los días. Esas palabras fueron realmente horribles. Me sentí indignada y preocupada por ti. Por eso les dije una o dos palabras a los niños».
Cuando Shao Qihai escuchó las palabras de Mu Xue, su expresión cambió ligeramente. Respiró profundamente y aguantó la respiración. «A mí no me importa, así que a ti tampoco te tiene que importar, Mu Xue. No vuelvas a decir nada a los niños. No fue fácil para nosotros arreglar nuestra relación. No quiero que se arruine».
Las lágrimas cayeron de los ojos de Mu Xue al escuchar esto. «Nunca quise destruir su relación. Sólo… me duele el corazón por ti».
Después de decir eso, se cubrió la cara y salió corriendo.
Shao Qihai frunció el ceño mientras la veía marcharse. Estaba a punto de decir algo cuando hizo una pausa, y luego se giro para irse con el ceño fruncido. De repente, se topó con Li Fang, que estaba de pie detrás de la casa.
Cuando Li Fang vio a Shao Qihai, se dio la vuelta inmediatamente y se marchó. Shao Qihai reaccionó y rápidamente la persiguió. «Li Fang, espera. No te equivoques. No le digas nada a Jingzhe…»
Sin embargo, antes de que pudiera alcanzarla, Li Fang desapareció en un abrir y cerrar de ojos.
Li Fang era ya un vendedor ambulante maduro. De vez en cuando, iba a lugares que no permitían poner un puesto. Cuando la gente la perseguía, llevaba una gran bolsa con cosas y salía corriendo. Llevaba mucho tiempo practicando cómo esconderse de la gente y cómo mejorar su velocidad. De hecho, había ahorrado suficiente dinero y se estaba preparando para abrir una tienda. Por lo tanto, incluso Shao Qihai no podía seguir su ritmo.
Shao Qihai sabía que las cosas no se verían bien para él si no la alcanzaba. Rápidamente fue a buscar a Mu Jingzhe, queriendo explicarle las cosas claramente para que ella no malinterpretara y su ya mala relación no empeorara.
Sin embargo, Shao Qihai no pudo encontrarla por ningún lado. Cuando volvió a casa y vio a Mu Jingzhe, supo que había llegado demasiado tarde.
Tenía razón. Mu Jingzhe ya se había enterado por Li Fang de que Shao Qihai y Mu Xue habían concertado una cita secreta. Además, Mu Xue incluso sintió «su dolor de corazón» por Shao Qihai. Citando a Li Fang:
«Ese dúo desvergonzado. Incluso siente dolor de corazón por él. Pfft. Realmente he oído eso. ¡Jingzhe, tienes que saberlo!»
Gracias a las palabras de Li Fang, unidas a que los cinco niños le contaron lo que Mu Xue les había dicho, supo lo que estaba pasando.
Había estado observando durante este periodo de tiempo y no había encontrado ninguna señal de que Mu Xue y Shao Qihai se reconciliaran. Había pensado que su plan había fracasado prematuramente, pero para su sorpresa, había un resquicio de esperanza. Mu Jingzhe lo aceptó rápidamente y ni siquiera estaba tan enfadada como Li Fang.
Al ver que Shao Qihai regresaba y decía que quería explicarse, Mu Jingzhe asintió. «De acuerdo, yo también tengo algo que decirte».
Cuando los dos se quedaron solos, Mu Jingzhe fue directamente al grano. «Shao Qihai, mi actitud no ha cambiado. Ya dije que deberíamos divorciarnos. Ahora que la situación se ha desarrollado hasta este punto, ¿por qué no te divorcias de mí primero? Esto será bueno para ti y para Mu Xue, ya que no dejarás que Mu Xue sufra o sienta pena por ti y venga a buscar a los niños. No te preocupes. Amo a la Pequeña Bei y el resto de los niños. Puedo cuidar de ellos después del divorcio. No estoy tratando de arrebatarte a tus hijos. Seguirán siendo tus hijos. Sólo me ocuparé de ellos».
Mu Jingzhe se acarició el pecho. Por fin había encontrado una oportunidad para revelar su objetivo final. Era imposible paralla arrebatar realmente los hijos de Shao Qihai, pero al menos podía cuidar de ellos, ¿verdad?
Shao Qihai se cubrió la cara con impotencia. Él había querido explicar, pero ella ya había determinado lo que estaba pasando e incluso dijo algo así.
«Mu Jingzhe, es la tercera vez que veo a Mu Xue desde que regresé. Fui a buscarla sólo para evitar que se inmiscuyera en los asuntos de nuestra familia y buscara a Pequeña Bei y al resto. No puedes tomar en serio las palabras de Li Fang porque no lo ha oído todo.
«Realmente no tengo ningún plan. No vuelvas a mencionar el divorcio». Se asustó mucho al oír lo del divorcio.
«Pero no tiene sentido que no nos divorciemos y perdamos el tiempo así». Mu Jingzhe se sintió muy impotente. «Mira, ha pasado un tiempo desde que volviste. ¿Crees que somos compatibles? No creo que lo seamos».
«¿Cómo sabes que no somos compatibles si ni siquiera lo has intentado? Mu Jingzhe, haz las cuentas tú mismo. ¿He hablado contigo en privado más de diez veces en las últimas dos semanas?»
«Entonces… eso sólo significa que no tenemos nada en común». Además, los dos no estamos destinados a estar juntos.
«Porque me desprecias desde el fondo de tu corazón y me has marcado como el hombre de Mu Xue. En tu corazón, soy de Mu Xue. Me desprecias y sólo piensas en divorciarte, pero ¿es esto justo para mí?»
La expresión de Shao Qihai se oscureció. «Admito que me casé contigo por las circunstancias, pero no olvides que tú y tu madre me obligaron a casarme contigo. Ustedes fueron las que me obligaron a casarme entonces. Ahora que me he casado contigo, has decidido que ya no quieres esto y me obligas a divorciarme sin darme ninguna oportunidad. Esto tampoco es justo para mí, ¿verdad? Ji Buwang dijo que no puedes abandonarlo después de jugar con él, así que ¿cómo puedes abandonarme después de jugar conmigo?»
Los párpados de Mu Jingzhe se movieron cuando escuchó esto. Ella no había esperado que Shao Qihai usara este término también.
Sin embargo, ella no podía replicar porque esto era, de hecho, lo que la Mu Jingzhe original había hecho.
«Me disculpo. Hice algo mal entonces, así que ahora que me he dado cuenta de mi error, quiero liberarte…»
«Pero no quiero mi libertad. Sólo quiero vivir contigo». Shao Qihai se agachó y miró a Mu Jingzhe. «Jingzhe, Mu Xue y yo realmente terminamos las cosas hace mucho tiempo. Se acabó cuando traje al Pequeño Wu de vuelta. Ella se dio por vencida conmigo entonces. Ha sido imposible para nosotros estar juntos desde entonces. De lo contrario, no habríamos dejado que esto se prolongara durante tanto tiempo. el Pequeño Wu ya es muy grande ahora».
Mu Jingzhe, que había leído el libro, naturalmente sabía que todo se debía al Pequeño Wu. La relación entre Shao Qihai y Mu Xue se había prolongado durante mucho tiempo antes de terminar.
Ella estaba muy preocupada. Justo cuando estaba a punto de decir algo, Shao Qihai la detuvo con las palabras «No puedes abandonarme después de jugar conmigo».
Mu Jingzhe se detuvo un momento. «Ah, sí. Tengo una pregunta por la que siento mucha curiosidad».
«¿Qué?»
«¿Quién es la madre del Pequeño Wu?» el Pequeño Wu había tenido curiosidad por saber sobre su madre antes. Mu Jingzhe también tenía bastante curiosidad. En el pasado, ella había pensado que no tenía a quien preguntar, pero ahora que Shao Qihai había regresado con vida, no pudo evitar preguntarle.
Shao Qihai hizo una pausa por un momento. «¿Por qué de repente quieres saber esto?»
«Porque tengo curiosidad. el Pequeño Wu también ha sido curioso antes. ¿Por qué no te casaste con la madre del Pequeño Wu? ¿Quién es ella? ¿Engañaste a Mu Xue cuando salías con ella?»
Shao Qihai: «No…»
Miró la expresión curiosa de Mu Jingzhe y dijo con impotencia: «La madre del Pequeño Wu está muerta, así que no preguntes».
«Aunque esté muerta, el Pequeño Wu puede ir a presentar sus respetos. Será injusto para el Pequeño Wu si no se lo dices. Ni siquiera sabe quién es su madre biológica».
«Está bien. Es la persona más afortunada porque te ha conocido».
Mu Jingzhe: «¿Así que estás decidido a no decirlo?»
«Mm…»
Mu Jingzhe estaba preparada mentalmente y había sabido que podría no decírselo. Después de todo, incluso después de que Mu Xue hubiera montado un gran alboroto, él no había dicho nada en ese momento. Por lo tanto, aunque estaba decepcionada, sólo podía aceptarlo con impotencia.
Después de que Mu Jingzhe se fuera, el fondo de los ojos de Shao Qihai se llenó de complicadas emociones.
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