Madrastra de cinco grandes villanos
Capítulo 165 - ¿Qué te dio la confianza para causarme problemas?

Capítulo 165: ¿Qué te dio la confianza para causarme problemas?

«Tú… Tú…» La Hermana Lan miró la puerta rota y luego a Mu Jingzhe, sintiéndose completamente aturdida.

«¿Qué pasa conmigo? Te dije que podía abrirla». Mu Jingzhe evaluó a la Hermana Lan. «Es todo tuyo. Me preguntaba quién eras. Eres una camarera, ¿cómo pudiste hacer algo así?»

El pánico apareció en los ojos de la Hermana Lan. «Tú… eres un monstruo».

«¿Qué te dio la confianza para causarme problemas?» Mu Jingzhe agarró el cuello de la Hermana Lan por detrás. «Vamos. Nos reuniremos con tu jefe juntos. No me importa que hables con dureza delante de mí, pero sí que seas poco profesional y utilices tu posición para vengarte.»

Una persona normal estaría en desventaja.

«Suéltame». La Hermana Lan finalmente tuvo miedo, pero ¿cómo podía escapar de la mano de Mu Jingzhe? Fue rápidamente empujada hacia afuera.

Ji Buwang, Mu Han y Shao Nan habían notado que no había regresado y habían venido a buscarla. La vieron inmediatamente. «Hermana, ¿qué pasa?»

«Esta chica me encerró en el baño y no me dejó salir. Tiré la puerta abajo, pero no voy a pagar por ello. Pienso hacerla responsable de esto. Estaba a punto de buscar al responsable de este restaurante».

Los ojos de Ji Buwang se oscurecieron mientras miraba a la Hermana Lan. «¿Qué te dio las agallas para hacer eso?»

La Hermana Lan se derrumbó al ver la fría expresión de Ji Buwang. «Ji Buwang, ¿cómo pudiste hacerme esto? Te he esperado durante cuatro años. Te esperé aquí durante cuatro años».

Ji Buwang: «???»

Al instante sintió muchas miradas sobre él, especialmente las de Mu Han y Shao Nan, que estaban llenas de infinita frialdad.

Ji Buwang se apresuró a explicar: «No, no te equivoques. No es lo que piensas. Tú… yo te recuerdo. No hay nada entre nosotros. No digas tonterías».

Al escuchar las palabras de la Hermana Lan, Ji Buwang finalmente recordó a esta persona.

Originalmente había pensado que sería más seguro comer en su propio restaurante, pero ahora, le habían dado una bofetada en la cara. Quiso explicar, pero Mu Han ya había alejado a Mu Jingzhe.

«Señor Ji, ocúpese usted mismo de estos asuntos. Mi hermana y yo nos iremos primero. No se preocupe; los llevaré de vuelta».

Mu Han no había esperado que ocurriera algo así. Su actitud hacia Ji Buwang cambió instantáneamente.

Su hermana ya se había casado una vez y había terminado siendo viuda. Para empezar, ya era fácil que la gente la criticara. Además, ahora era un carroñero. No creía que hubiera nada malo en trabajar en este sector, pero había mucha gente que le despreciaba por recoger basura.

En el futuro, sólo quería trabajar duro para ganar dinero y mantener a su hermana. Dado que su hermana también era capaz, ¿por qué tenía que encontrar un marido rico? Los hombres eran demasiado problemáticos, así que sería mejor para ella ser libre.

Ji Buwang observó impotente cómo Mu Han se llevaba a Mu Jingzhe. Cuando volvió a mirar a la Hermana Lan, su mirada había cambiado y se había vuelto extremadamente gélida.

Mientras tanto, Shao Qihai esperó y esperó hasta que las flores se marchitaron. Justo cuando empezaba a sospechar que Mu Jingzhe y Shao Nan no volverían, finalmente regresaron.

Cuando salieron del coche, tanto la madre como el hijo llevaban algo en las manos. Ji Buwang también sostenía algo. La mirada dichosa de la familia de tres hirió profundamente a Shao Qihai, que se asomaba a la ventana.

No sólo eso, sino que Ji Buwang les siguió.

Shao Qihai se sintió desgraciado. ¿Por qué les seguía arriba? ¿Acaso quería quedarse a dormir con ellos? Muchas escenas sangrientas y violentas pasaron por la mente de Shao Qihai mientras se apoyaba en la puerta para escuchar cualquier movimiento.

«Hermana, si hay algo más, puedes buscarme de nuevo. Hoy volveré primero».

«De acuerdo, cuídate».

Shao Qihai se congeló sorprendido. ¿Sis?

Pensando detenidamente en la figura que acababa de ver, Shao Qihai finalmente se dio cuenta de que la persona que les había seguido de vuelta no era Ji Buwang, sino Mu Han.

Shao Qihai también había oído hablar de Mu Han. Sin embargo, Mu Han había cambiado demasiado en el último año, y estaba un poco oscuro abajo. Había estado demasiado agitado y había juzgado mal la situación.

Shao Qihai lanzó un suspiro de alivio y alabó en silencio a su cuñado en su corazón mientras le escuchaba marcharse.

Al escuchar a hurtadillas, Shao Qihai se dio cuenta de que lo que Mu Jingzhe y los demás llevaban en la mano era espino confitado.

Shao Qihai escuchó mientras la madre y el hijo entraban en la habitación, luego se apoyó en la ventana y volvió a escuchar por un momento. Al final, no pudo contenerse y bajó a comprar él mismo una barrita de espino confitado.

Quería fingir que estaban comiendo espino confitado juntos.

Shao Qihai dio un mordisco. El primer bocado fue dulce, pero al masticar, su expresión se congeló.

El espino estaba tan agrio que sintió que se le iban a caer los dientes.

Mientras tanto, Ji Buwang fue rápido y decisivo. Despidió a la Hermana Lan sin dudarlo. «Ahora que he visto que tratas a un cliente de esa manera, creo que no podemos permitirnos tener una gerente como tú».

La Hermana Lan estaba desconsolada. «¿Me vas a tratar así sólo por ella? Te he esperado durante cuatro años…»

Ji Buwang se quedó sin palabras. Recordó un poco a la Hermana Lan. Antes del incidente, había podido notar que ella parecía tener ese tipo de intenciones, por lo que había querido mantenerse alejado de ella. No había esperado que algo sucediera después.

No había esperado que ella creara semejante lío. Después de volver a casa, no pudo evitar preguntar al Viejo Maestro Ji si alguien había querido casarse con él mientras estaba inconsciente.

El Viejo Maestro Ji asintió. «Sí, pero no dejé a ninguno de ellos».

Quizás algunas personas podrían pensar que su abuelo debería estar muy agradecido de que una chica hubiera estado dispuesta a casarse con Ji Buwang mientras él estaba inconsciente. Sin embargo, ese no era el caso.

Él no había actuado tontamente. Independientemente de si las chicas eran sinceras o no, las había rechazado a todas. En primer lugar, Ji Buwang podría no estar necesariamente dispuesto. ¿Y si se despertaba con una esposa que no le gustara? En segundo lugar, para decirlo sin rodeos, considerando los beneficios que uno podía obtener al casarse con la Familia Ji, algunas personas nunca podrían ganar esa cantidad de dinero en toda su vida.

Él no era viejo ni tenía la cabeza embrollada.

Ji Buwang no había esperado que fuera cierto y lo encontró ridículo.

Al día siguiente, Ji Buwang quiso buscar a Mu Jingzhe y Shao Nan, pero fue detenido por alguien en el momento en que salió. Era nada menos que la Hermana Lan.

Después de que Mu Jingzhe y Shao Nan se levantaran, fueron de compras.

«Mami, te voy a comprar un jersey de lana y un abrigo. Cuando te lo pongas, serás como las chicas de la capital».

La última vez que habían ido a Ocean City, el la Pequeña Bei le había comprado un vestido para vestirla como una dama de Ocean City. Ahora, Shao Nan había dicho que quería ayudarla a transformarse en una dama de la capital.

Mu Jingzhe no pudo evitar reflexionar sobre sí misma. ¿Acaso estaba esponjando a sus hijos? Este niño era todavía muy joven, y sin embargo ya le estaba comprando cosas.

«Pequeña Nan, guarda el dinero para ti. Yo compraré por mi cuenta». Mu Jingzhe, que estaba reflexionando profundamente sobre sí misma, lo discutió con Shao Nan.

Shao Nan se negó. «¿Por qué no quieres que te compre cosas? La Pequeña Bei y mis hermanos mayores pueden comprarte cosas, ¿pero yo no puedo? Mami, ¿crees que no soy capaz de ganar mucho dinero? Ganaré mucho dinero en el futuro».

«No, no me refería a eso. Es que creo que todavía sois jóvenes. Como adulto, no es buena idea que siga aceptando regalos tuyos».

«¿Qué hay de malo en eso? En cualquier caso, tienes que aceptarlo. Si no, me enfadaré». Shao Nan no estaba bromeando. La razón por la que trabajaba duro para ganar dinero era porque no quería ser una carga. Además, quería comprar cosas para su madre, sus abuelos maternos y sus hermanos.

Si no le dejaba comprar estas cosas, se enfadaría mucho.

«De acuerdo entonces, pero sólo puedes comprar dos cosas. Más que eso y no las aceptaré».

«De acuerdo entonces. Mami, puedes elegir lo que quieras».

«Mm.»

Esta gran ciudad era realmente diferente. Según un viejo y sabio dicho, las tendencias de la moda se repetían cada poca década. Cuando miró estos abrigos y camisas de lana, sintió que eran bastante vintage y de moda.

Cuando Mu Jingzhe se puso el abrigo de lana, se sintió un poco como si hubiera vuelto a la edad moderna.

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Nota de Tac-K: Pasen una muy muy buena noche, duerman muy muy bien. Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (ɔO‿=)ɔ ♥

Nota 2 de Tac-K: Pueees deseo aprovechar esta nota para dar gracias, siempre le doy gracias a papa Dios por todo lo bueno, porque todo lo bueno viene de él y además de ello en esta ocasión quiero resaltar a Magali Suarez, Yaritza Castro, Maria Sanchez y Eimy Granados, gracias por suscribirse a mi patreon, me es de mucha ayuda para que pueda seguir traduciendo, mi sincero agradecimiento.

Nota 3 de Tac-K (E aquí un mensaje repetido hoy en varias novelas):

E aquí un dato para las personas que quizás tengan está duda, ¿Cómo tener el acceso anticipado a capítulos?, suscribiéndote a patreon tienes ese beneficio, luego de suscribirte verás que tienes un chat directo conmigo así que solo tendrás que decirme tu nombre de usuario en la página para darte el acceso, ello gracias a todos por el apoyo tanto si se suscriben como si no, de ambas formas lo aprecio, gracias.

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