Loco por ella
Capítulo 442

Capítulo 442: 

«Estoy usando zapatos. No importa».

Alice se dirigió a la maqueta que estaba en el suelo y luego le dijo a Yanis después de pensar un momento: «No entres, tráeme un juego de guantes».

Yanis en un principio quería entrar, pero al escuchar eso, tuvo que ir a buscar los guantes para ella.

Así que sólo quedaron Winnie y Alice en la escena.

Winnie finalmente dejó de llorar, se limpió las lágrimas del rostro y dijo mirando a Alice: «¿Quieres recoger el vestido? Pero el vestido está tan dañado que no servirá de nada ni siquiera para recogerlo». Alice le echó un vistazo.

«Todavía es útil».

Al oír eso, Winnie se quedó atónita: «¿Qué quieres decir?».

«No es momento de desesperarse». Alice miró tranquilamente a su alrededor, y luego dijo en voz baja: «Dime cómo encontraste que esto pasó».

«Yo…» Winnie presionó los labios y se retorció por un momento. «Ayer estaba muy contenta, así que invité a todos a tomar una copa y… fue mi primera obra expuesta en la sala de exposiciones. Aunque no vino nadie a visitarla, seguía estando contenta. Así que volví a dar un vistazo al vestido. Estaba bien cuando estaba aquí, pero cuando volví esta mañana, se veía así. Creo que Yanis tiene razón. Es un robo, por lo que se llegó a esto».

«¿Robo?» Alice dio una sonrisa baja, «¿Crees que un ladrón haría tanto ruido?»

Winnie se quedó atónita, «¿Qué quieres decir?»

«Si fuera un robo, habría un ladrón, tratando de robar algo valioso. Pero ya que quería robar algo valioso, ¿Por qué tenía que destruirlo?»

Winnie parpadeó: «¿Tal vez porque no había nada de valor, se enfadó por vergüenza?»

«Si tú fueras un ladrón y robaras en esta empresa, ¿Te enfadarías y romperías todos los cristales, incluido el contenido del interior por la noche para llamar la atención de los residentes cercanos?»

«No, no seré tan estúpida. Estas cosas hacen un fuerte sonido cuando caen al suelo. Son muy llamativas».

En ese momento, Winnie dio un respingo y pensó en algo.

«No fue un robo, pero…» Ensanchó los ojos, dando un vistazo a Alice.

Alice no respondió. En ese momento Yanis volvió con los guantes. Alice se los puso y se inclinó para apartar gentilmente los fragmentos de vidrio, salvando el vestido del desorden.

Cuando sacó el vestido, Yanis y Winnie quisieron cogerlo, pero Alice dijo frunciendo el ceño: «No lo toquen, puede haber cristales rotos dentro, no se hagan daño en las manos».

Así que Yanis y Winnie tuvieron que retirarse a un lado y esperar.

Alice sacó el vestido sobre un espacio y luego se quitó los guantes.

«Alice, te has hecho daño en la pierna». Yanis notó que sus tobillos tenían algunas manchas de sangre, pero Alice no sintió dolor, así que las ignoró.

«No importa, puede haber muchos cristales escondidos dentro, tenemos que encontrarlos». Winnie se agachó junto a ella, con un aspecto abatido.

«¿Pero qué pasará después de que los encontremos? El vestido está estropeado y se acerca la rueda de prensa a la que tiene que asistir Lexi. No tenemos tiempo de hacer uno nuevo».

Yanis también se puso en cuclillas. Al dar un vistazo al vestido destruido, frunció el ceño, «Alice, ¿Qué debemos hacer? El vestido está muy dañado y el tiempo apremia. ¿Tenemos alguna posibilidad de repararlo?»

Alice estaba deprimida, mirando el vestido destruido, pero pronto se animó y habló después de un momento de silencio: «Saquemos primero los cristales y hablaremos de ello».

Estaba tranquila y serena, pero era anormal. El vestido había sido destruido, Yanis y Winnie estaban preocupadas. Yanis había estado con ella durante mucho tiempo, por lo que era aceptable para ella, pero para Winnie no. Ella conocía a Alice desde hacía poco tiempo.

Al ver que Alice estaba tranquila, Winnie se enfadó y dijo: «¿Cómo que hablaremos de ello? ¿De qué vamos a hablar? ¿Por qué no te preocupas si el vestido ha sido destruido? Este es el vestido de Lexi para la rueda de prensa, ¿Tienes alguna contramedida?»

«No». Alice dijo la verdad.

¿Cómo podría pensar en una contramedida justo después del accidente?

Pero la situación actual debe ser tratada en una emergencia, y entonces las contramedidas se aplicarán más tarde.

«Entonces, ¿Por qué no entras en pánico?» Winnie resopló.

«¿El pánico va a resolver el problema? ¿Puede hacer que el vidrio del vestido desaparezca? Deja de decir tonterías y ocúpate de ello rápidamente».

Yanis susurró a Winnie: «Haz lo que dijo Alice. Ella no te hará daño. Aunque es tu trabajo, la responsable de la empresa es Alice. Si hay un accidente, ella tiene que asumir la responsabilidad».

Al oír lo que dijo Yanis, Winnie entró en razón y asintió. Entonces sacó con cuidado los vidrios.

Después, Alice dijo con voz fría: «Cuando vuelvas, finge que no sabes nada».

«¿Qué?» Winnie abrió los ojos con incredulidad. Pero al ver que Alice estaba tranquila, sintió que debía creerla, así que asintió, se estiró y se limpió las lágrimas, «Lo sé, por cierto, no lloré, sólo estaba preocupada al ver que mi trabajo se destruía así».

Alice, «Está bien, vuelve».

Alice sola se llevó el vestido a su despacho, se sentó en la silla mirándolo aturdida.

La persona que destruyó este vestido lo hizo de forma intencional, ya que era de seda y no sería capaz de aguantar algo afilado, por lo que estaba muy dañado.

Sintiendo dolor de cabeza, Alice se frotó el entrecejo.

De repente, se escuchó un mensaje.

Alice echó un vistazo sólo para ver el mensaje de Lexi.

Lexi: [He oído que mi vestido está terminado…]

Al dar un vistazo a su nombre, Alice estaba en trance. Le había pedido a Lexi que se probara el vestido, pero Lexi no vino. Pero el vestido estaba destrozado. Era muy doloroso.

Alice pensó un momento y luego se relamió.

[Sí, está en la sala de exposiciones del sexto piso.]

Después de pensar, sus ojos se oscurecieron. Y luego añadió.

[Sin embargo, hubo un pequeño accidente.]

Lexi: [¿Qué accidente? No me asustes.]

Hubo un emoji de terror, que hizo dudar a Alice. Se preguntó si se lo debía decir directamente o le debería enviar una foto.

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