Loco por ella -
Capítulo 358
Capítulo 358: Arrogancia
«De acuerdo, ven conmigo». Yanis llevó a Alice a la entrada.
Había mucha gente en el plató. Debido a que se estaba filmando un drama de disfraces, Alice vio a muchos actores y actrices en trajes de disfraces cuando entró en el set. Hacía mucho calor allí.
Prepararon pequeños ventiladores para refrescarse, y algunos incluso se quitaron los trajes y los dejaron a un lado, llevando sólo un chaleco y unos pantalones cortos. Pero llevaban pesados adornos en el cabello, se veían muy graciosos.
Alice siguió a Yanis hasta el plató.
Cuando el ayudante del director las vio, las detuvo y les dijo: «¿Qué están haciendo? Estamos rodando aquí. Los fans no pueden estar aquí. ¿Por qué las han dejado entrar el guardia?».
El guardia vino rápidamente. Cuando vio a Yanis, dijo: «Señor, no son fans, están aquí para buscar a Kate».
«¿Kate? ¿Por qué la buscan?» Les preguntó confundido. Cuando vio a Alice, la miró fijamente.
Sus ojos se iluminaron inmediatamente.
Alice se bajó las gafas de sol para cubrirse el rostro.
Parecía una superestrella.
«¿Tú eres…?» El guardia miró a Alice y le preguntó.
Yanis dijo: «Encantada de conocerle, señor. Estamos aquí para ver a la Señorita James. Tenemos un trabajo que hacer y nos iremos de aquí cuando terminemos nuestro trabajo».
«Entonces…»
El asistente de director miró con desconfianza a Yanis y luego miró a Alice.
En ese momento, la asistente de Kate vio a Alice. Entonces dijo: «Señor, es invitada de la Señorita James».
Luego le susurró al asistente del director unas palabras. Sus ojos seguían mirando a Alice. Después de un rato, asintió y se fue.
El agente de Kate se acercó a Alice y le dijo: «Señorita Nelson, por favor, acompáñeme».
Alice asintió y le siguió. Yanis murmuró: «Está actuando como un snob. Su actitud hacia mí hace un momento fue peor».
Alice sonrió y dijo en voz baja: «No importa».
«Tú no eres yo. Tú no podrías entender mis sentimientos. ¿Por qué no puedo ser una persona con talento? Si yo fuera tú, no tendría que tolerar a esta gente”.
«¿Tú?» Alice sonrió y dijo: «Creo que puedes ser una excelente chef».
«No te burles de mí. No quiero ser chef. Porque voy a terminar gorda. Tú sabes que no puedo controlarme cuando veo comida».
El agente no tardó en llevarles a una habitación del plató. Tras abrir la puerta, sintieron una brisa fresca. Alice comprobó que el aire acondicionado estaba encendido y que sólo había unas pocas personas en él.
Volvió a dar un vistazo a los que sudaban en el plató.
Ese era el caso en este mundo. Había una gran diferencia entre estas personas.
No era de extrañar que todos quisieran ser famosos.
Alice siguió al agente a la sala.
«Kate, la Señorita Nelson está aquí». El agente se dirigió a una hermosa chica y le susurró.
Tenía un maquillaje perfecto en el rostro. Cuando escuchó las palabras del agente, se giró para darle un vistazo a Alice.
Kate era una mujer muy hermosa.
Atraía a muchos fans por su bonito rostro. Pero no era buena para actuar.
Sin embargo, Kate odiaba a otras mujeres hermosas.
No le gustaban las mujeres que eran más bonitas que ella.
Kate pensó que la diseñadora debía ser una mujer mayor. Aunque no fuera vieja, no debería ser hermosa.
No esperaba que Alice fuera tan joven y hermosa. Y es que daba un aspecto muy agraciado.
Iba vestida con sencillez y llevaba unas gafas de sol. Pero era muy atractiva.
«¿Es la famosa diseñadora, Shelly? Pareces una persona corriente». dijo Kate con desdén y se rió.
El agente se sintió avergonzado. Dio un vistazo a Alice y dijo: «El verdadero nombre de Shelly es Alice Nelson».
«¿Alice? No he oído su nombre. ¿Es realmente una diseñadora conocida?»
«¿De qué estás hablando?» Antes de que Alice pudiera decir nada, Yanis fulminó con la mirada a Kate y dijo con rabia: «Es una diseñadora famosa. Sólo llegué tarde un minuto. ¿Cómo has podido tratarnos así?».
«Bueno, en tu opinión, no llegaste tarde, ¿verdad? Y no deberías ser castigada. Señorita, ¿Sabe lo valioso que es mi tiempo? Si te esperaba un minuto más, perdería mucho dinero».
«Yo…» Yanis se quedó sin palabras.
Alice se adelantó y dijo: «Señorita James, cuando firmamos el contrato, dejamos claro que debía cooperar con nuestro personal. Pero ahora parece que usted no quiere cooperar con nosotros. Mi asistente llegó tarde, lo cual fue su error. Pero ella se disculpó con usted. Tú la has dejado esperando bajo el sol durante más de dos horas. Ella ha pagado el precio de su error. Las dos horas fueron su compensación».
«¡Tú!» Kate no esperaba que fuera tan agresiva. Parecía muy enfadada y dijo, «¿Qué has dicho? ¿Cómo te atreves a compararla conmigo?».
Alice sonrió y dijo: «Las dos son seres humanos. ¿O es usted una extraterrestre?».
«¡Maldita sea!» Kate perdió los nervios y dijo en voz alta: «Soy una superestrella internacional. Ella sólo es una asistente. Tú no puedes compararte conmigo».
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