Capítulo 2198:

Al cabo de un rato, Samuel emitió dos breves sonidos de llanto.

Luego miró a su padre con los ojos muy abiertos y agitó la botella.

Luis estaba confundido por este comportamiento.

No tenía ni idea de lo que quería decir el niño.

«Probablemente aún no está lleno», dijo Elva.

«Le haré otra cosa más tarde».

Luis asintió al oír esto.

Luego cogió la botella y la dejó a un lado.

Estaba jugando con el niño cuando vio por el rabillo del ojo que Elva se levantaba.

Desde que se reencontraron, él la observaba constantemente y la miraba fijamente durante mucho tiempo sin decir nada.

Ella, en cambio, siempre le ignoraba.

Parecía haber olvidado que antes estaba encaprichada de él.

Por aquel entonces, bastaba una llamada o un simple mensaje suyo para hacerla feliz durante horas.

El breve reencuentro hizo que Luis tuviera una sensación de pertenencia a su matrimonio.

Amaba tanto a Samuel como a Elva.

Su relación con ella no era tan buena como antes, pero seguía queriéndola.

Luis quería pasar más tiempo con ellos, pero tenía que irse a una reunión importante en la empresa.

Se volvió hacia Elva.

«Hoy saldré temprano del trabajo. Podemos llevar a Samuel a dar un paseo cuando vuelva».

«No creo que pueda hacerlo», declinó Elva.

La sonrisa de Luis disminuyó ligeramente.

La miró en silencio, esperando a que continuara.

Elva dejó escapar un suave suspiro.

«No me niego por ‘nosotros’, Luis; es que tengo otras cosas que hacer… Esa película se estrenará en Heron dentro de unos días».

El guión de la película había cambiado, y el papel que se suponía que ella iba a desempeñar había cobrado importancia en la trama.

Si Elva no hubiera estado embarazada en ese momento, habría interpretado el papel y habría hecho un gran trabajo.

Habría sido un gran acontecimiento y podría haber atraído la atención de todo el mundo, pero no se arrepentía.

Quería a Samuel más que a nada; él era más importante que nada ni nadie, incluido Luis.

Luis comprendió y pudo saber en qué pensaba observándola.

Su rostro se suavizó.

«Iré contigo».

Había aprendido de sus errores pasados y no iba a tomar las mismas decisiones estúpidas.

Pero en el fondo, temía que ya fuera demasiado tarde.

Los ojos de Elva se abrieron de par en par, ligeramente sorprendida.

.

.

.

Consejo: Puedes usar las teclas de flecha izquierda y derecha del teclado para navegar entre capítulos.Toca el centro de la pantalla para mostrar las opciones de lectura.

Si encuentras algún error (contenido no estándar, redirecciones de anuncios, enlaces rotos, etc.), por favor avísanos para que podamos solucionarlo lo antes posible.

Reportar