Capítulo 1435:

Cuando descolgó, la dulce voz de Evelyn le saludó. «Papi, no puedo dormir. Me puedes contar un cuento?».

Al escuchar la voz de su pequeña, la tensión de Leonel se alivió y su corazón se derritió.

Se acomodó en la cama con un libro de cuentos y preguntó suavemente: «¿Por qué sigues levantada, cariño? Es tarde».

Evelyn insistió, diciendo que no podía dormir sin un cuento.

Mientras Leonel leía, su voz era suave y profunda. De vez en cuando, le robaba miradas a Alexis, casi coqueteando.

Ignorándolo, Alexis se dirigió al baño. Como los criados no estaban de servicio, se ocupó de las tareas domésticas. La ropa de Leonel estaba esparcida por el suelo. La recogió para lavarla y vio una mancha de carmín en el cuello de su camisa.

No era de ella.

Era como si otra mujer hubiera dejado su marca…

Agarrando la ropa, Alexis reflexionó sobre lo que estaba pasando.

Ya no sentía amor por Leonel, pero no esperaba que él estuviera con otra justo después de su intimidad.

Con el corazón encogido, Alexis miró hacia el dormitorio.

Quizás Leonel había llegado por fin a su límite… y quería poner fin a las cosas…

Guardando la ropa sucia, Alexis se enjuagó las manos. Cuando volvió al dormitorio, Leonel había dormido a Evelyn. Volviéndose hacia ella, murmuró: «Le prometí a Evelyn que la dejaría en el colegio por la mañana. Luego, te llevaré al trabajo».

Alexis se limitó a asentir.

Se metió en la cama, tumbándose junto a Leonel. Él estaba a punto de hacer un movimiento, seducido por su aroma…

Mirándolo, Alexis le preguntó en voz baja: «¿James te ha preparado compañía para esta noche?».

Sus palabras pillaron desprevenido a Leonel.

Alexis no era de las que se andan con rodeos. «Encontré la marca de Lipstick en tu camisa cuando la metí en la lavadora. No parece accidental ni una broma», dijo sin rodeos.

Después de todo, nadie podía acercarse a Leonel sin su consentimiento.

En esencia, había estado con otra mujer.

Leonel conocía demasiado bien a Alexis.

Si descubría a Anika y lo sucedido en el apartamento, le pediría el divorcio sin dudarlo.

Así que optó por mentir.

Ante la pregunta de Alexis, apagó la luz, se tumbó y respondió con indiferencia: «No, James no preparó nada. Probablemente sólo era una broma. Ya conoces a esos tipos. Ya me encargaré la próxima vez».

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