Capítulo 1264:

Melissa no pudo tolerarlo más.

Sonrojada, exclamó: «No escuches sus tonterías. Entonces era muy tacaño. No me dejaba en paz, aunque sabía que no tenía mucho en la cartera».

Marcus se rió entre dientes, contraatacando: «Entonces, si fuera otra persona, ¿abrirías la cartera de tan buena gana?».

Por supuesto que no lo haría.

Melissa comprendió la intención de Marcus al sacar el tema, pero no pudo rebatirlo.

Hojeando una revista, Marcus comentó despreocupado: «Parecía que siempre habías sentido algo por mí y que sólo intentabas seducirme intencionadamente».

Elva se quedó atónita ante sus palabras y se dirigió en silencio hacia la puerta sin pronunciar palabra.

Al despedirse, Marcus volvió al salón. Haciendo un mohín, Melissa se lamentó: «He engordado últimamente».

Marcus la abrazó y asintió. «¡Es verdad! Pero lo encuentro atractivo».

Percibiendo la coquetería de Marcus, Melissa le rodeó el cuello con los brazos y expresó su preocupación. «Me preocupa no caber en el vestido de novia. ¿Y si mi cintura es demasiado gruesa? ¿Qué te parece?»

Marcus la besó suavemente y la tranquilizó: «No te preocupes. El vestido no te quedará demasiado ajustado. Confías en el criterio de mi madre, ¿verdad?».

Melissa le respondió con un beso y sintió una sensación de alivio.

Al día siguiente, Marcus se dirigió a la empresa mientras Melissa se quedaba en casa. Marcus planeaba recogerla más tarde, y juntos visitarían la tienda de novias para comprobar si el vestido de novia le quedaba bien.

Con el comienzo del otoño trayendo consigo un tiempo más fresco, Melissa encontró su sitio habitual en el sofá y se entregó a un rato de lectura.

A las dos de la tarde, Marcus seguía sin aparecer.

Melissa se preocupó, ya que Marcus había prometido volver a la una.

Al cabo de un rato, no fue Marcus quien cogió el teléfono, sino Sylvia.

Sonaba notablemente ansiosa mientras hablaba. Para no alarmar a Melissa, Sylvia se serenó y habló con calma.

«El señor Fowler ha ido antes a una comida de negocios. Cuando volvía, el coche dio un volantazo para esquivar a unos peatones y chocó contra un poste de la luz. No es nada demasiado grave, pero el médico ha dicho que tiene un coágulo de sangre cerca de los nervios del ojo. Por lo tanto, el Sr. Fowler tiene que permanecer en el hospital para más observación».

A Melissa le dio un vuelco el corazón, alarmada.

Apresuradamente, preguntó: «¿En qué hospital está?».

Sylvia no tardó en dar la dirección y añadió: «Los padres del señor Fowler también están presentes. No queremos asustarla, pero el señor Fowler quiere verla».

Melissa sintió que la invadía una oleada de ansiedad, pero luchó por contener sus emociones y evitar romper a llorar.

Llevaba en su vientre al hijo tan esperado de Marcus y no podía permitir que nada pusiera en peligro el bienestar del bebé.

Melissa no condujo ella misma, sino que llamó a un chófer.

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Nota de Tac-K: Estos últimos días me he sentido un poco mal del corazón, disculpen la demora, tengan una linda noche queridas personitas, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (─‿‿O)

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