La novia más afortunada
Capítulo 700

Capítulo 700:

Janet estaba asustada. Se aferró desesperadamente al marco de la ventana francesa, esperando que Charis no pudiera empujarla.

En ese momento crítico, la puerta del despacho se abrió de repente.

Entró Brandon. Había algo que no cuadraba. Estaba mirando un documento en su mano mientras entraba en el despacho de Charis.

De repente, oyó un grito espeluznante. Levantó la vista bruscamente y vio a las dos mujeres junto a la ventana francesa.

«¡Charis! ¿Qué demonios estás haciendo?» Brandon se quedó helado.

Vio claramente que Charis sostenía la cabeza de Janet por la ventana rota. Un movimiento en falso y Janet podría caer en picado y morir.

Todo el color se drenó de la cara de Brandon. Ni en sus mejores sueños habría esperado ver una escena así cuando Charis le pidió que fuera a su despacho para hablar de trabajo.

Al ver que estaba a punto de dar un paso hacia ellos, los ojos de Charis se abrieron de par en par y le gritó: «¡No te acerques! Si das un paso más, la empujaré». Estaba tan alterada que las venas de su frente se hincharon.

Brandon se detuvo en seco y levantó las manos en señal de rendición.

«Vale, no me moveré Por favor, Charis, no lo hagas».

«Brandon, ¿Ya te sientes herido? Te pedí que vinieras aquí para ver morir a Janet con tus propios ojos». Charis levantó la cabeza y se rió histéricamente.

En ese momento, junto a ella, su rostro desfigurado, parecía un verdadero monstruo brutal.

Brandon estaba abrumado por la sorpresa y la confusión.

«¿Por qué haces esto? El psicólogo te dijo que te habías recuperado»

«¿Recuperado?» Charis volvió a reírse. «Brandon, ¿Crees que la vida es tan sencilla? ¡Yo nunca me curare! Sí. ¡Ese fuego me convirtió en un monstruo por dentro y por fuera! ¡Mi vida está arruinada! ¡Y sin embargo sigues siendo tan feliz con Janet! ¡Me estoy volviendo loca!» Rugió como una bestia herida.

Las cicatrices del incendio habían quedado impresas en su cara y en su corazón. Nunca se había sentido tan fea en su vida.

Al ver la mirada enloquecida de sus ojos, Brandon comprendió al instante.

Charis nunca se había recuperado. Había engañado a todos, incluido su médico, haciéndoles creer que se había recuperado. En secreto, su locura sólo se enconaba y crecía hasta cotas sin precedentes.

«¿Has vuelto sólo para hacer daño a Janet?» Los ojos de Brandon se oscurecieron.

«Exactamente. Esperé deliberadamente a que bajaras la guardia para que me dejaras volver al Grupo Larson. Lo planeé todo para que pudieras ver morir a Janet delante de ti».

Con los ojos inyectados en sangre y abiertos como platos, Charis estalló en una carcajada loca.

¡Parecía una loca!

Brandon no se atrevió a actuar precipitadamente. Janet estaba de pie al borde mismo de la ventana, y sólo Charis la sujetaba. Mientras Charis la soltara, Janet caería más de veinte pisos abajo.

No se atrevió a llamar a la policía ni a pedir ayuda, lo que sólo provocaría aún más a la loca de Charis. Estaba entre la espada y la pared.

¿Qué debía hacer?

Por primera vez en su vida, sintió mucho pesar. Fue él quien pidió a Charis que volviera al trabajo. Fue él quien puso a Janet en peligro.

Apretó los dientes, deseando ser él a quien Charis quisiera matar.

Brandon trató de mantener la calma. Cubrió sutilmente su teléfono con el documento que tenía en la mano y marcó el número de Garrett mientras Charis no miraba.

Para ganar más tiempo, Brandon intentó negociar. «Si la dejas ir ilesa, fingiré que no ha pasado nada. Te prometo que lo dejaré pasar, ¿Vale?».

Charis echó la cabeza hacia atrás y se rió aún más fuerte, histéricamente.

«Brandon, ¿En serio estás intentando negociar conmigo ahora mismo? ¿Crees que quiero vivir después de esto? ¡Estoy dispuesta a caer con ella! ¡Me llevaré a la mujer que amas y me aseguraré de que vivas el resto de tu vida con dolor y arrepentimiento!»

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Nota de Tac-K: Pasen un lindo lindo día, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (=◡=) /

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