La novia más afortunada
Capítulo 400

Capítulo 400: 

«Aquí hay algo de información sobre este proyecto Lind, puedes echarle un vistazo por ti misma primero. Nos reuniremos con el cliente por la tarde y discutiremos estos asuntos juntos entonces». Patty entregó los documentos en su mano a Janet y luego le guiñó un ojo a Tiffany antes de salir de la habitación.

Tiffany no dijo una palabra como si no hubiera visto nada.

Janet vio la interacción entre las dos, decidió apartarla de su mente, y en su lugar bajó la cabeza y empezó a leer los documentos.

El cliente de este proyecto resultó ser Yoyo Fashion, una empresa de marcas de moda a gran escala ubicada en Seacisco. Esta marca era muy popular entre los nacionales y extranjeros, desde adolescentes hasta personas de mediana edad. Así que era obvio que tenía una gama muy amplia de consumidores.

Dentro de la sala de reuniones, Ronald Williams, director de proyectos de Yoyo Fashion, comenzó a exponer sus opiniones. «Queremos que el diseño sea de moda, de ocio y cómodo al mismo tiempo. Nuestros clientes tienen básicamente entre 16 y 40 años, así que espero que su diseño pueda satisfacer sus normas y preferencias».

Tras decir esto, Ronald se giró para mirar a Janet y Patty y les dijo: «Señoras Lind y Jenkins, si tienen alguna sugerencia, pueden exponerla en cualquier momento de nuestra reunión.»

Mientras escuchaba a Ronald, Janet ya había hecho rápidamente dos bocetos. Cuando estaba a punto de levantarse y entregarle los borradores, Patty ya se había acercado con un iPad en la mano.

«Aquí tienes algunos de mis diseños anteriores que puedes dar un vistazo. ¿Te gusta este estilo?» Patty dijo esto con un tono seguro y mostró sus bocetos a la gente de Yoyo Fashion.

Ronald asintió mientras ojeaba. «Bueno, está muy bien. Pero el estilo es un poco simple y no hay nada que llame la atención». Luego se giró para mirar a Janet y le preguntó: «¿Qué opina la otra diseñadora?».

Patty dio un vistazo en dirección a donde estaba sentada Janet y luego sonrió amablemente a Ronald. «La señorita Lind resulta ser la diseñadora preliminar de nuestra empresa. Sólo está aquí para ayudarme». Después de decir eso, pasó a explicar cuidadosamente sus ideas con más detalle. Ni siquiera le dio a Janet la oportunidad de hablar.

Al mismo tiempo, Janet no podía hacer nada al respecto. Simplemente se quedó sentada, obligándose a sonreír.

Después de eso, Janet se reunió varias veces más con Patty y el cliente. Descubrió que Patty era muy dominante en todas estas reuniones. Esta mujer siempre se esforzaba por controlar toda la situación y tomaba las decisiones por sí sola, sin dar a Janet ni siquiera la oportunidad de hacer saber sus opiniones.

Debido al hecho de que Patty tenía un rango superior al de ella y contaba con una gran experiencia en la empresa. Janet decidió simplemente aguantarse. No se molestó en quejarse y se limitó a hacer su trabajo de ayudar a Patty.

En un principio, Janet había pensado que la colaboración sería bastante fluida. Patty era realmente una diseñadora perspicaz, pero su terquedad se interpuso en el camino.

Debido a su arrogancia y a su mal temperamento, nunca se comprometía cuando trataba con el cliente. Por eso no se pudieron evitar los roces y la cooperación entre ambas partes resultó poco fluida. Durante el proyecto, los conflictos y desacuerdos entre las dos partes eran cada vez más graves.

Por lo tanto, Ronald, el director del proyecto Yoyo Fashion, invitó especialmente a Janet y Patty a cenar con él, diciendo que la razón por la que las invitaba era porque quería aprovechar esta oportunidad para suavizar las cosas entre las dos partes. El restaurante que eligió resultó estar en un hotel de cinco estrellas.

En la cena, Ronald y varios de sus colegas masculinos bebieron mucho y sus rostros estaban rojos.

Durante la comida, esos hombres salieron a fumar, dejando sólo a tres personas. Ronald, Patty y Janet eran los únicos que quedaban en el salón privado. Ronald seguía charlando animadamente con Patty y empezó a ponerse fresco con ella.

Un atisbo de impaciencia se reflejó en el hermoso rostro de Patty en ese momento. «Señor Williams, por favor, compórtese. Si estás muy borracho, pediré a alguien que te lleve a casa. Podemos discutir el proyecto en profundidad mañana en la empresa». Tras decir lo que tenía que decir, Patty apartó la mano de Ronald de sus piernas con total disgusto.

Ronald sólo siguió sonriendo descaradamente. Volvió a acariciar los muslos de Patty con la palma de sus manos y le susurró al oído: «Señorita Jenkins, es usted demasiado testaruda y no puedo dejar que las cosas sigan así. ¿Qué le parece esto, si usted me acompaña durante una noche, llegaré a un acuerdo y tendré en cuenta sus opiniones. Te prometo que este proyecto se completará sin problemas y perfectamente a partir de ahora».

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Nota de Tac-K: Capítulos extra, espero les gusten, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho (=◡=) /

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