La novia más afortunada
Capítulo 382

Capítulo 382: 

A Janet nunca se le ocurrió que Brandon tuviera las mismas miradas que su propio marido, Ethan, que rara vez se arreglaba y era muy descuidado en su aspecto.

Deseó poder apresurarse y saltar para abrir la puerta y poder mirar más de cerca. Incluso quería irrumpir en el despacho del presidente y hacer girar a Brandon para que se pusiera frente a ella y así poder ver exactamente su aspecto.

Después de todo, Brandon era el presidente del Grupo Larson y el jefe de su jefa. Ella no se atrevía a ofenderlo en lo más mínimo.

No había logrado ver su rostro completo. Sólo había echado un vistazo fugaz a su perfil lateral

Pero estaba convencida de que sus ojos no la habían engañado. El perfil lateral de Brandon se parecía mucho al de Ethan, y además estaban casi a la misma altura.

¿Existían realmente dos personas que se parecieran tanto en este mundo?

Justo entonces, Janet recibió un mensaje de Brandon en su teléfono. «Janet, ¿Por qué tienes la impresión de que yo tengo todo que ver con lo que pasa en tu vida? El Grupo Larson no es responsable de tu vida. En cuanto a Emani, me acabo de enterar de lo que le ha pasado esta mañana por mi asistente». –

A juzgar por su tono frígido, Janet supo que había dejado claro que no tenía nada que ver con lo que había ocurrido con Emani

Pero esto ya no era un gran problema. Lo que consumía su mente era el hecho de que Brandon y Ethan parecían la viva imagen del otro.

Y ahora mismo, ya se había dado cuenta de que Brandon evitaba deliberadamente encontrarse con ella. Acababa de salir del ascensor. ¿Por qué se dio la vuelta de repente y volvió a entrar en el instante en que sus ojos se posaron en ella?

Era bastante peculiar, sin duda. Sin embargo, no era apropiado que ella le hiciera esa pregunta. Si lo negaba, la haría parecer una narcisista, ¿no?

Janet no tuvo más remedio que contestarle amablemente.

«Lo siento, Señor Larson. Tal vez he pensado demasiado en todo este asunto. Casualmente estaba en la empresa hace un momento y lo vi subiendo las escaleras. ¿Podría invitarle a cenar conmigo? Usted me ha ayudado tantas veces antes. Quiero agradecértelo debidamente en persona».

Tras enviar el mensaje, Janet se sintió abrumada por los nervios. De alguna manera, volvió a pensar en el rostro de Ethan. Brandon era exactamente igual a él.

Esta vez Brandon respondió inmediatamente: «Acabo de recibir una invitación urgente para una reunión. Tengo que salir pronto del país y estaré muy ocupado durante los próximos días».

Eso explicaba por qué se había dado la vuelta de repente y había vuelto a entrar en el ascensor hacía unos instantes.

Contemplando el mensaje de Brandon, Janet frunció el ceño, pensativa, no creía que pudiera existir tal coincidencia. Lo había visto claramente ahora mismo con sus propios ojos. En cuanto Brandon la vio, entró en el ascensor sin mirar atrás, pero estaba demasiado lejos, así que no había podido verle la cara con claridad hasta que se precipitó y la puerta del ascensor casi se cerró.

Sin embargo, al ver tal respuesta, no había nada más que Janet pudiera decir. Después de todo, Brandon era su jefe. No podía exigirle que cenara con ella.

«De acuerdo. Se lo agradeceré en persona cuando esté libre algún día». Apretó los labios. Realmente no tenía más remedio que ir a su escritorio y coger las llaves.

Mirando la puerta cerrada del ascensor, se sintió arrepentida, pero tenía las manos atadas. Sacó su teléfono y llamó a Ethan Ya que no podía preguntarle a Brandon, al menos podía preguntarle a Ethan.

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