La Novia Fugitiva y el Magnate Misterioso
Capítulo 267

Capítulo 267:

Brea leyó los artículos uno por uno. Muchos de ellos decían que Wayne y Keira llevaban mucho tiempo juntos, y que ella seguía eligiendo ser la otra. También decían que ayer quiso ser la verdadera novia de Wayne, pero que fracasó y se peleó con él en la calle y, para probar la autenticidad de sus afirmaciones, adjuntaron varias pruebas en cada una de las notas.

Leyó más de una docena de publicaciones de diferentes plataformas de medios, y todas tenían el mismo contenido. Era obvio que fueron escritas por la misma persona. Alguien escribió el artículo, y luego hizo arreglos para que muchas plataformas lo publicaran a fin de perjudicarla.

Eso la puso tan furiosa, que arrojó el celular a la cama, porque no esperaba que las cosas resultaran así.

Recordaba que las noticias de la noche anterior eran diferentes, porque los medios dijeron que ella era la novia secreta de Wayne; sin embargo, hoy era Keira la verdadera novia, dejándola como no más que una burda amante.

El cambio en el contenido era brusco y los reporteros eran unos malditos sinvergüenzas.

Conteniendo la ira, Brea volvió a tomar el celular y continuó leyendo. No le extrañó que casi toda la gente la llamara la otra mujer, y sus comentarios eran agudos y desagradables.

Debió ser su rival, Keira, quien compró a los medios para manchar su nombre. De seguro quería que los internautas creyeran que ella era la otra mujer, y así arruinar su reputación; entonces, ya no obtendría más trabajo y eso la sacaría de la farándula de tajo.

Mientras Brea más leía, más se molestaba, en especial cuando vio la foto de Keira y Wayne cenando juntos.

¿Wayne y Keira de verdad estaban saliendo?

Pensar en esta posibilidad la enfureció aún más, y recordó que ese hombre siempre decía que no le gustaba su apariencia y personalidad y que tenía buen gusto; sin embargo, no esperaba que él se enamorara de alguien como Keira.

Lo pensó con detenimiento, pero no podía entender por qué a Wayne le gustaba Keira.

El rostro, los senos, las nalgas y las piernas de Keira no podían compararse con los suyos, y tenía la cara pálida… no era fea, pero no destacaba entre la multitud, y mucho menos en la industria del entretenimiento, que estaba llena de muchas mujeres hermosas.

¿Cómo pudo Wayne enamorarse de ella? Debía estar ciego.

Brea ardía de rabia. Estaba a punto de volver a tirar el teléfono, cuando vio otro mensaje del Señor Griffin preguntando por la situación.

Además, algunas marcas que habían trabajado con ella antes también le enviaron mensajes, cuestionándole al respecto.

Se abrumó tanto por los mensajes, que no quiso abrirlos más; pero, cuando pensó que el respaldo más importante para ella en este momento era The One Jewelry, se contuvo y respondió al mensaje del Señor Griffin.

«Lo siento, Señor Griffin, acabo de ver las noticias, pero todavía no sé qué sucede. Sin embargo, yo no soy la otra mujer, solo me están malinterpretando. Aclararé este asunto lo antes posible».

El Señor Griffin se apresuró a responder: «Señorita Duffy, creo que puede manejar bien este asunto. Esperaré sus buenas noticias. Y también la fecha de la boda de usted y el Señor Evans».

Después de leer la última frase, Brea se quedó sin palabras.

Ella ni siquiera era novia de Wayne, ¿Cómo podría casarse con él?

Comparada con ella, Keira tenía más posibilidades de casarse con ese hombre… cuando pensó que ellos dos podrían estar en una relación, volvió a enfadarse.

Era difícil para ella aceptar que la mujer que le gustaba a Wayne fuera su rival, porque él era tan guapo, que era una pena que se enamorara de Keira… no eran nada compatibles.

Al no poder deshacerse de esos pensamientos, sentía que estaba a punto de explotar por la furia. No quería hacerlo, pero no podía dejar de pensar en ellos, así que decidió tomar una ducha fría para calmarse; pero, cuando estaba a punto de ir al baño, de repente llamaron a la puerta.

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