La Novia Fugitiva y el Magnate Misterioso
Capítulo 207

Capítulo 207:

Celia no sabía que Tyson tenía un oído muy fino; obviamente él escuchó toda la conversación entre Flavia y su esposa, pero fingió que no sabía nada.

Solo después de que terminaron de hablar, el hombre caminó hacia Celia con una expresión serena y dijo: «Oye, ¿Qué tanto le susurras a Flavia?».

La chica se aclaró la garganta y alzó la cabeza para mirarlo: «Nada importante. Por si no lo sabías, no es apropiado que un hombre pregunte sobre los secretos que comparten dos damas».

Tyson obedeció y esbozó una sonrisa cariñosa: «Cariño, tienes razón. Todo lo que salga de tu boca es verdad».

El rostro de Celia se ruborizó ante las palabras de su esposo y se volvió hacia otro lado.

Al ver esto, Flavia sonrió con alivio: «Tu marido es muy agradable y te llena de mimos. No sabes lo feliz que estoy por ti».

«Bueno, yo también la envidio», la voz de Wayne sonó de repente.

Él se acercó y siguió bromeando: «Conozco a Tyson desde hace muchos años, pero ni una sola vez me ha elogiado. Sin embargo, desde que conoció a Cece, todo el tiempo se la pasa hablando bien de ella, como si tuviera una máquina en la boca. Además, él siempre hace lo que le dice y la alaba con bastante frecuencia. ¡Cece, tienes a mi amigo completamente bajo tu control!».

Tyson miró al hombre con indiferencia y preguntó: «¿Acaso quieres que también te elogie a ti?».

A pesar de que se trató de una réplica bastante simple, fue suficiente para enviar un escalofrío que recorrió toda la columna vertebral de Wayne. Él agitó las manos y se justificó con una sonrisa falsa: «No hace falta. Hay mucha gente a mi alrededor que me alaba. No me importa si tú no lo haces».

Temeroso de que Tyson pudiera causarle más problemas, Wayne decidió cambiar de tema: «Cece, eres genial. Ahora que alguien está dispuesto a pagar cien mil dólares por un diseño tuyo, ¡Es solo cuestión de tiempo antes de que te conviertas en una diseñadora famosa y muy exitosa! Tengo muchas ganas de darte un abrazo para felicitarte. ¡En el futuro, cuando hagas una fortuna, asegúrate de no olvidarte de mí y seguramente me pondré en contacto contigo todos los días!».

Tyson fulminó a su amigo con la mirada y le advirtió con un tono frío: «Más vale que no intentes contactar con Cece, o de lo contrario, vete despidiendo de tus preciadas manos».

Celia no pudo evitar reírse y dijo provocativamente: «Bueno, puedes hacerlo, no me importa».

Wayne se quedó sin palabras. ¡La pareja no tenía reparos en molestarlo!

«Perdona, solo estoy bromeando. Tyson, ¿Por qué eres así? Cece, ¿Podrías pedirle a tu marido que se comporte? Él se vuelve demasiado celoso cuando se trata de ti.

Mira, yo tan solo estaba bromeando, pero él se molestó y ahora no me deja en paz.

¡Incluso amenazó con agredirme!».

La actitud de Wayne le dio tanta gracia a Flavia que no pudo evitar echarse a reír.

Fue hasta ese momento que la anciana notó los arañazos en el rostro del hombre.

Frunciendo el ceño, ella le preguntó: «Wayne, ¿Qué te pasó a tu cara?».

Al escuchar este cuestionamiento, el hombre volvió a recordar la pelea que tuvo con

Brea, pero logró mantener la compostura y dijo: «Tuve un accidente, pero son heridas superficiales. No te preocupes por eso. Es solo que me siento muy incómodo cada vez que pienso en esa tipa llamada Brea, una mujer excesivamente feroz».

Tyson sonrió y preguntó: «¿Acaso estás enamorado?».

«¿Por qué dices que estoy enamorado? ¿De quién demonios me voy a enamorar?», al recordar la expresión feroz que Brea portaba cuando peleó contra él, Wayne se estremeció y rápidamente añadió: «No digas tonterías. ¡Jamás me enamoraré de esa mujer, ni aunque nos dejaran solos en una isla desierta!».

Celia le echó un vistazo y le dijo con una sonrisa: «No puedes estar seguro de eso.

Es demasiado pronto para que saques esas conclusiones».

«Olvidemos ese asunto. ¡No vuelvan a mencionar a Brea en mi presencia nunca más!», exclamó Wayne con desesperación mientras se tapaba los oídos con las palmas de las manos.

Celia estaba a punto de seguir burlándose de él cuando Tyson se le acercó y dijo: «Parece que alguien se siente avergonzado. ¿Quién hubiera imaginado que el poderoso Señor Evans algún día se convertiría en un pobre chico enamorado?».

«Yo jamás lo hubiera esperado», Celia se unió a su marido para burlarse del hombre.

“Cuando lo conocí, me dio la impresión de que era un mujeriego empedernido que disfrutaba la compañía de diversas damas. Me sorprende descubrir que es un tipo con un corazón puro».

Estos comentarios ofendieron tanto a Wayne que no pudo evitar rugir: «Aunque estuviera ciego, nunca me fijaría en alguien como Brea, ¿Les quedó claro? ¡Dejen de hacer suposiciones sin fundamentos!».

Flavia no tenía idea de qué estaban hablando las personas a su alrededor.

Sorprendida al ver la nueva faceta de Wayne, ella le preguntó a Celia: «¿Qué le pasa a Wayne?».

La chica se echó a reír antes de responder: «Nada serio. Es solo que acaba de conocer a una buena chica».

Flavia quedó atónita. Impulsada por su sabiduría de anciana, ella animó al hombre:

«¡¿Entonces qué esperas?! No hay tiempo para detenerse ante la incertidumbre. Wayne, ¿Cuántos años tienes? Seguramente eres mayor que Cece, ¿Verdad? De donde yo vengo, los caballeros de tu edad ya están casados e incluso son padres», riendo entre dientes, ella agregó: «Si estás enamorado de una chica, debes actuar con valentía. No seas tímido. Seguramente la dama que te gusta es muy bonita y virtuosa, por lo que debe tener muchos pretendientes intentando conquistarla. Si ese es el caso, sería una pena que la perdieras por culpa de tu timidez».

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