La mejor venganza
Capítulo 642

Capítulo 642:

Liam localizó entonces una caja de madera para meter el cuerpo de Yusuf. Lo aseguró a una lancha motora que encontró en el barco.

En cuanto a Cannon, Liam lo sujetó con una cuerda antes de conducir la lancha de regreso a la base de la Organización Noche Oscura.

Al llegar, Liam, con el corazón encogido, buscó a Mehdi.

Liam había informado a Mehdi sobre la misión, y ahora, al ver a Liam manchado de sangre pero sin la compañía de Yusuf, Mehdi sintió que una tensión inexplicable aumentaba en su interior.

Con cautela, Mehdi preguntó: «Señor Hoffman, ¿ha capturado a Cannon?».

Liam permaneció en silencio, con un rostro sombrío. Sacó la cruz que Yusuf le había dado antes de su muerte.

Cuando Mehdi percibió la gravedad en la expresión de Liam y reconoció la cruz de Yusuf, su mente se quedó momentáneamente en blanco antes de preguntar nerviosamente: «¿Qué ha pasado?».

Con un susurro dolorido, Liam dijo: «Yusuf se ha ido…».

Al oír esto, Mehdi sintió como si le hubieran electrocutado. Su energía se agotó al instante. Se hundió en el suelo, balbuceando: «¿Quién… quién lo hizo?».

Liam relató los trágicos acontecimientos y entregó lentamente a Mehdi la cruz que había pertenecido a Yusuf.

«En sus últimos momentos, quiso que tuvieras esto. Dijo que era para mantenerte a salvo», afirmó Liam con gravedad.

Las manos de Mehdi temblaron cuando aceptó la cruz. Perdió su control emocional. La cruz resbaló de sus dedos temblorosos.

¡Crack!

La cruz de cristal se hizo añicos contra el duro suelo.

En ese momento, Mehdi se tambaleó al borde del colapso emocional, entre lágrimas y risas frenéticas.

La noticia de la muerte de Yusuf era insoportable para él, que había visto a Yusuf como a su propio hijo.

Tras una larga pausa, Mehdi recogió con cuidado la cruz destrozada y le dijo a Liam: «Señor Hoffman, cuando vaya a rescatar a su prometida, permítame que le acompañe. Deseo acabar con la Araña Negra junto a usted».

Liam asintió lentamente. Su corazón pesaba tanto como el de Mehdi. Una pila de tragedias residía allí, inquebrantable durante lo que parecía una eternidad.

Una vez de vuelta en el calabozo donde Cannon estaba confinado, Liam lo encontró inconsciente. Sin dudarlo, despertó a Cannon con una fuerte bofetada.

«¿Dónde está Julie?

Al volver en sí, Cannon observó su entorno y comprendió rápidamente sus terribles circunstancias.

Liam todavía llevaba la máscara de Javen, por lo que Cannon tenía la impresión de que era un representante de la Organización de la Noche Oscura, enviado para preguntar por Julie.

Aunque parecía trastornado, Cannon era en realidad muy perspicaz. Prefirió la honestidad a la evasión.

«Fue Timothy, de la familia Hewitt de Invone, quien me hizo el encargo.

Julie está ahora confinada en el cuartel general de la Araña Negra en Mosaico. Yo ya no tengo nada que ver en esto».

Este comportamiento complaciente estaba totalmente en desacuerdo con lo que Liam había previsto. Cannon no intentó aprovechar ninguna amenaza basada en su identidad.

«¿La secuestraste y luego afirmas que no tienes nada que ver?». replicó Liam con frialdad.

«Exacto, ya no tengo nada que ver. Mi hermano me la quitó de las manos en cuanto llegó a Mosaico. Parece que…» Cannon se interrumpió. ¿Parece qué? insistió Liam, frunciendo el ceño.

«Mi hermano me envió un mensaje de texto hace dos días diciendo que piensa casarse con ella. Se parece a mi cuñada», explicó Cannon, haciendo una pausa para recuperar el aliento.

Liam frunció el ceño. Esto no estaba sucediendo como él había previsto.

Al percibir el silencio de Liam, Cannon se apresuró a añadir: «Ya te he dicho todo lo que sé. No estoy involucrado, ¡en serio! Si quieres más mujeres, ¡puedo encontrarte más!».

Liam estudió a Cannon con ojo perspicaz. Era evidente que la información previa sobre él era incompleta. La supuesta locura de Cannon no era más que una fachada, se trataba de un hombre que valoraba su vida y adaptaba su comportamiento a las distintas situaciones.

Su comportamiento errático ocultaba una mente aguda.

Las palabras de Cannon no hicieron más que irritar a Liam.

Una oleada de rabia se apoderó de Liam en ese momento, y necesitaba descargarla. Por suerte, tenía ante sí el instrumento perfecto. Levantó la mano y golpeó de nuevo a Cannon.

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