La mejor venganza -
Capítulo 64
Capítulo 64:
Liam se molestó cuando escuchó el nombre de Yolanda.
Qué hacía ella aquí a estas horas? ¿Andrew ya le había dicho quién era en realidad?
Al pensar en esto, se dirigió inmediatamente a la sala de recepción. En ese momento se sentía perturbado.
Cuando llegó a la sala de recepción, no entró inmediatamente. Se quedó unos segundos delante de la puerta para tranquilizarse antes de abrirla de un empujón.
En cuanto oyó abrirse la puerta, Yolanda levantó la cabeza y miró hacia ella. Pero se sintió decepcionada cuando vio que era Liam.
«¿Qué haces aquí? ¿Te ha pedido Julie que vengas otra vez? Olvídalo. Es lo mismo, de todos modos. Sólo dales esto al Sr. Hoffman y a la Srta. Fiber».
Liam cogió las cosas que le entregaba Yolanda con el ceño fruncido. Cuando las miró, descubrió que eran dos exquisitas tarjetas de invitación de boda.
La fecha de la boda no era el tercer día del mes siguiente, según Andrew. En su lugar, se había trasladado al noveno.
Era la misma fecha en la que él y Yolanda se habían casado hacía tres años.
¿Se estaba burlando deliberadamente de él? Al pensar en esto, Liam se puso furioso.
Si Andrew no le hubiera informado de la fecha que habían fijado por primera vez, podría haber pensado que no era nada.
Pero desde que lo supo, no pudo evitar sentirse disgustado. Estaba claro que intentaban fastidiarle cambiando la fecha.
Yolanda vio que el rostro de Liam se ensombrecía y se sintió un poco avergonzada. Sabía por qué su expresión había cambiado de repente, así que se apresuró a explicarle: «La fecha de la boda la fijó Dennis. No tiene nada que ver conmigo».
Liam resopló con frialdad y dio media vuelta para marcharse.
Pero Yolanda le agarró del brazo de repente.
Se volvió hacia ella y le preguntó fríamente: «¿Qué más puedo hacer por ti?».
Con una mirada avergonzada, Yolanda le pidió: «Liam, ¿puedes no arruinar mi boda?».
Ella creía firmemente que Liam aún sentía algo por ella.
Así que ahora que él sabía de su boda, sin duda haría algo para arruinarla.
Pero la petición de Yolanda fue como un cuchillo afilado que atravesó el corazón de Liam.
Antes de que pudiera perder los estribos, se deshizo de su mano y abandonó la sala de recepción sin mirar atrás.
En ese momento, Julie estaba trabajando en el despacho del director general.
Se sobresaltó cuando la puerta se abrió de repente.
Liam entró corriendo desde fuera y le entregó las tarjetas de invitación enfadado.
Cuando Julie vio la fecha revisada en las invitaciones, su rostro también se ensombreció. Regañó enfadada: «Esta gente está yendo demasiado lejos».
Cuando Liam asumió el cargo por primera vez, ella lo había investigado. Por eso conocía la fecha de su boda con Yolanda, tres años atrás.
El corazón de Liam había sido herido por Dennis y Yolanda.
Y ahora, se esforzaban por desgarrarle la herida.
Liam apretó los puños y dijo con frialdad: «Ya que han llegado tan lejos, no voy a ser blando con ellos. Julie, quiero que esta boda sea la mayor broma de Ninverton. Anuncia a todo el mundo que Kingland Group celebrará un banquete y que el director general pronunciará allí un discurso. Hablaré de mi plan para desarrollar Ninverton en los próximos diez años.
Haz una reserva en el Hotel Von Merri e invita a todos los peces gordos de Ninverton. Pero diles que lo mantengan en secreto. Y que no pueden revelar ninguna información al respecto».
Julie comprendió inmediatamente la intención de Liam.
Quería que todos los invitados de Dennis y Yolanda acudieran a su banquete el día de su boda.
Así que inmediatamente respondió respetuosamente: «Sí, señor. Lo organizaré todo enseguida. Me aseguraré de que nadie de las familias Lambert y Caldwell se entere de nada».
Liam miró por la ventana y dijo fríamente: «Quiero ver a quién elegirán, a la familia Caldwell o a mí».
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