La mejor venganza
Capítulo 10

Capítulo 10:

Al escuchar la sugerencia de Andrew, los invitados comenzaron a discutir.

«¿Prohibidos de todas las industrias? Eso suena interesante. Pero, ¿es realmente necesario?».

«No creo que sea un problema. Estamos ayudando al nuevo director general de Kingland Group a castigar a un mentiroso. Tal vez nos recuerde así».

«Eso tiene sentido. Si sabe lo que hicimos por él, quizá también nos ayude en el futuro».

Dennis fue el primero en dar un paso al frente y decir: «En nombre de Sunrise Decoration Corp, declaro que Liam está completamente expulsado de nuestra empresa. De hecho, en mi opinión, un loco y un mentiroso como él no merece estar en Ninverton».

La familia Caldwell era famosa en Ninverton. Tenían una gran reputación en esta ciudad.

Todos aquí ahora eran de la clase alta, así que naturalmente sabían esto.

Como Archie estaba pensando en cómo acercarse a la familia Caldwell, dijo inmediatamente: «En nombre de Uber, declaro que todos los coches nuestros no servirán a Liam a partir de ahora».

Después de que Dennis y Archie tomaran la iniciativa, el resto de los invitados supieron que no había ninguna razón para que ellos no prohibieran también la entrada a Liam.

Pronto, Kervin Baron, el propietario del Hotel Von Merri, tomó la palabra. «Todo el mundo, mi nombre es Kervin Baron, y soy el propietario del Hotel Von Merri. Llevo tres décadas dirigiendo hoteles en Ninverton. Estoy dispuesto a apoyar a la familia Lambert, y nunca contrataré a Liam. Los propietarios de otros hoteles de esta ciudad son todos amigos míos. Me aseguraré de que Liam Hoffman no pueda entrar en ningún hotel a partir de ahora».

Liam no pudo evitar reírse. Se preguntó qué aspecto tendrían estas personas cuando conocieran su identidad.

En ese momento, un hombre de mediana edad con un abrigo caro se levantó y dijo: «Soy Booker Natt, el propietario de la cadena de pubs Pandora. También me aseguraré de que Liam Hoffman esté prohibido en todos mis pubs de Ninverton».

La mirada de Liam recorrió a estos supuestos peces gordos. Luego hizo una mueca: «¿Quién más quiere prohibirme la entrada?».

Otro hombre se levantó y dijo: «A partir de ahora, ninguna empresa de construcción de Ninverton te contratará».

Entonces todos los invitados se levantaron uno tras otro. Liam estaba completamente vetado en todo tipo de industrias de Ninverton.

Julie cruzó los brazos sobre el pecho y dijo con arrogancia: «¿Te arrepientes ahora? Arrodíllate y discúlpate ahora. De todos modos, mi oferta sigue en pie. Incluso te contrataré como mi chofer. ¿Qué te parece?»

«Paso», respondió Liam lentamente.

El rostro de Julie se enrojeció de rabia. «¡Te reto a que lo digas otra vez!».

«¿Estás sorda?» preguntó Liam. «Vale, lo diré otra vez. Paso».

«¡Cómo te atreves! Realmente tienes agallas».

Julie no esperaba que Liam rechazara su oferta estúpidamente.

¿Acaso la despreciaba?

Lo fulminó con la mirada y añadió: «Yo, Julie Fiber, la vicepresidenta del Kingland Group, también declaro que nunca podrás entrar en nuestra compañía».

En ese momento, los miembros de la familia Lambert estallaron en carcajadas.

Todos sabían que el Grupo Kingland tenía el mayor poder en Ninverton.

Con la declaración de Julie, lo único que significaba era que Liam realmente no tenía ninguna posibilidad de conseguir ningún trabajo en Ninverton a partir de ahora.

Pero Liam nunca mostró ningún rastro de miedo o pánico. Permaneció tranquilo.

Sonrió a Julie y le dijo: «Señorita Fiber, usted es sólo la vicepresidenta de la compañía. Ni siquiera es accionista. No creo que pueda tomar ninguna decisión en nombre de Kingland Group».

Con sus brazos aún cruzados sobre su pecho, Julie se burló, «El CEO y yo ya nos hemos reunido».

Después de decir esto, de repente bajó la cabeza tímidamente. «Me invitó a dormir en su villa por una noche».

Todo el mundo estaba en estado de shock.

«¿Pasó una noche en la villa del Director General? ¡Vaya!»

«Sólo tiene sentido. Después de todo, la señorita Fiber es la mujer de negocios más guapa de Ninverton. No me sorprende en absoluto».

«Liam está realmente condenado esta vez. No debería haberse metido con la señorita Fiber».

Mientras Isabella escuchaba a todos en silencio, los celos surgieron en su corazón. Se enfureció.

Esta era su boda, y se suponía que ella sería el centro de la noche.

Pero Julie le robó el protagonismo.

El novio de Julie era el CEO de Kingland Group, mientras que su marido sólo tenía algunos barcos.

Mirando a Julie, Yolanda sintió aún más envidia.

Ella también soñaba con estar con alguien como el CEO de Kingland Group.

Liam, por otro lado, se quedó atónito cuando escuchó las palabras de Julie.

Todavía no había regresado a Cloudhigh Resort. ¿Cómo iban a pasar él y Julie una noche juntos?

Con una sonrisa fría, le dijo con sorna: «Espero que puedas seguir siendo tan confiada como ahora cuando lo veas».

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