La luz de mis ojos
Capítulo 165

Capítulo 165:

Mientras Charles fijaba los ojos en Autumn, le acarició el pelo con suavidad. Ella tartamudeó mientras sus mejillas se sonrojaban hasta el rosa: «Umm… ¿no me queda bien?».

«¡Sí, estás sencillamente impresionante!» A los ojos de Charles, Autumn era guapa. Pero nunca se había imaginado que se transformaría en una belleza tan cautivadora después de arreglarse. Autumn siempre salía con un aspecto natural. Nunca se maquillaba ni llevaba joyas. Después de ponerse este magnífico vestido, su aspecto era totalmente diferente.

«Este vestido, por favor. ¡Envuélvelo!» Ella era su esposa, así que quería darle nada menos que lo mejor.

«¡De acuerdo, señor!» La dependienta se apartó al quedar impresionada por la discreta belleza de Autumn. Tras comparar brevemente a Autumn con Rachel, por fin comprendieron por qué Charles había elegido a Autumn. Rachel era guapa pero carecía del recato y la elegancia que poseía Autumn.

Las dependientas presentes se alegraron muchísimo cuando Charles decidió comprar el vestido sin preguntar siquiera el precio. De ese modo podría gratificarse con una jugosa prima este mes.

«Lily, ¿dónde está la bata que te pedí que me guardaras?». La voz de Rachel llegó a sus oídos desde fuera del probador. En ese momento, Charles había salido a pagar el vestido. Al reconocer su voz, la dependienta frunció el ceño y le dijo a Autumn con aire incómodo: «Señora Lu, ¿qué tal si entra a ponerse la ropa? Hasta entonces, puedo envolverle el vestido nuevo».

Autumn respondió cortésmente: «De acuerdo». Su paso se ralentizó a la mitad debido al vestido con falda completa. Antes de que Autumn entrara en el probador, Rachel entró con una sonrisa radiante.

Parecía que estaba de buen humor. Pero su sonrisa se congeló inmediatamente al ver el vestido en otra persona. En ese momento, no reconoció a Autumn, que caminaba de espaldas a Rachel. Se volvió hacia Lily y la abofeteó bruscamente: «Sabes que nunca me pongo la ropa que otras se han probado. He sido tu clienta durante mucho tiempo, ¿cómo has podido cometer un error así?».

«Yo…» Lily casi rompe a llorar, mientras se sujetaba la cara con la mano. Le explicó a Rachel, «Señorita Bai, esta bata…»

«Elegí esta bata ayer y te dije que me la probaría hoy. Pero ahora has dejado que se la pruebe otra persona. ¿Por qué has hecho eso? ¿Crees que ella puede permitirse esta túnica tan cara?». le gritó Rachel a Lily despectivamente. Autumn no soportaba que Rachel pusiera a Lily en una situación incómoda, así que se dio la vuelta con el ceño fruncido y le dijo a Rachel: «¡Señorita Bai, cuánto tiempo sin verla!».

«Ya veo». Rachel observó a Autumn con desdén y continuó: «Ha pasado mucho tiempo. Realmente es bueno para ti casarte con un hombre rico, ¿verdad? Nunca habías visitado tiendas tan lujosas, ¿verdad? ¿Qué te trae por aquí? Debes estar eligiendo tu vestido de noche… ¿Cuánto dinero te dio Charles para gastar?»

Rachel se dio cuenta de que Autumn debía de haber venido a comprar un vestido de noche para su fiesta de cumpleaños. En cuanto miró a Autumn con ese vestido, quedó impresionada por su belleza. Si Autumn viene a mi fiesta con este vestido, se convertirá en el centro de atención de todo el mundo», pensó Rachel.

«Señorita Bai, es usted muy graciosa. Creo que no es asunto suyo. Puedo gastar el dinero de mi marido como y donde me plazca. A mí no me gusta gastar el dinero de un hombre casado». Autumn prosiguió bruscamente: «Casi olvidaba que Charles te había cortado todas las tarjetas bancarias. Me pregunto si la señorita Bai aún puede permitirse un gasto tan caro».

«¡Cállate ahora mismo!» Con la cara enrojecida por la ira, Rachel gritó: «¿Crees que no voy a defender mi honor y manchar tu imagen porque estás casada con Charles? Algún día te robaré a Charles».

Cuando mantenía una relación con Charles, él nunca la acompañaba de compras. En cambio, le daba dinero y le pedía que comprara lo que quisiera. Con esa idea, Rachel supuso que Autumn había venido sola.

Continuó con sorna: «Te aconsejo que dejes a Charles o no te perdonaré».

Charles acababa de pagar el vestido. Mientras volvía a zancadas hacia su mujer, vio a Rachel intimidando a Autumn con expresión despectiva. Preguntó autoritariamente: «¿Ahora sí? ¿Cómo vas a hacerle pasar un mal rato, por favor, explícate?». Y prosiguió con una mueca de desprecio: «Tengo curiosidad. ¿Qué vas a hacer con mi mujer?».

«Char… Charles…», balbuceó y se esforzó por decir su nombre. Después de darse cuenta de que Charles no quería verla, Rachel le había estado esquivando todos estos días. Sabía que Charles podría aburrirse de ella si seguía acudiendo a su encuentro. Además, tenía la intención de modificar su estado para que Charles notara el cambio durante su fiesta.

Como Charles le había dicho, en el pasado, que la amaba como a una mujer sensata; ella había resuelto fingir ser la que Charles había amado todo el tiempo.

Sin embargo, nunca pensó que todo lo que había planeado se esfumaría con un vestido de noche.

Rachel respondió mientras su rostro palidecía: «¿Qué haces aquí? »

Charles se acercó a Autumn y le contestó con severidad: «Yo, por supuesto, he venido a ayudar a mi mujer con las compras. ¿Ocurre algo?»

«Yo…» Rachel estaba extremadamente celosa de Autumn pero no dejó que se reflejara en su cara. Sonrió y le dijo a Charles: «Simplemente estoy bromeando con la señora Lu. ¿Estás aquí para comprar un vestido de noche?»

Ambos no respondieron. Charles se volvió hacia Autumn y le dijo con voz suave: «Ve a cambiarte de ropa. Te llevaré a comer una deliciosa comida».

Autumn le dijo a Charles con una pequeña inclinación de cabeza: «¡Eso suena bien!». Se dio la vuelta con intención de cambiarse el vestido de noche. En ese momento, Rachel agarró a Autumn por el brazo y le dijo: «Señora Lu, yo elegí este vestido ayer. ¿Podría devolvérmelo, por favor?».

«¿Usted eligió esto?» Autumn se sacudió la mano y continuó: «Señorita Bai, quiero regalarle esto, pero… mi marido ya lo ha pagado. Además, me gusta mucho este vestido. Así que debo disculparme ya que no puedo renunciar a él».

Autumn añadió sonriendo: «No tengo más tiempo que perder aquí. Hay tantos vestidos de noche bonitos aquí. Te sugiero… que no pierdas tiempo en coger otro en vez de tener esta discusión inútil. Quizá encuentres otro que te guste».

Sra. Lu…» Rachel no se sorprendió cuando Autumn se negó. Sin embargo, ella no podía renunciar a ese vestido tan fácilmente. Ella dio una sonrisa y procedió, «Como usted sabe, mi cumpleaños se acerca. Además, soy un personaje público. No puedo llevar un vestido sencillo en mi fiesta de cumpleaños delante de los medios de comunicación. ¿Puedes, por favor…?»

Autumn se volvió hacia Charles y lo miró. Rachel se apresuró a decir: «El señor Lu te trata muy bien. Mientras estés de acuerdo, él no se opondrá. ¿Estoy en lo cierto, Sr. Lu?»

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