La exesposa muda del multimillonario -
Capítulo 318
Capítulo 318:
Mientras Gregory hablaba, lanzó una mirada de reojo a Kallie. Al ver su actitud serena, continuó-: Hay otra cosa extraña. La familia Reeves parece estar de capa caída y, sin embargo, siguen llevando una vida de lujo.
«Puede que no lo sepas, pero Dean ha cedido la dirección de la empresa al hijo ilegítimo de la familia Reeves.
Me he enterado de que este hijo se metió en sus vidas por su cuenta, y Dean ha prohibido terminantemente que nadie hable de ello. Además, las familias Reeves y Miller celebraron recientemente una fiesta de compromiso. Fue extravagante a más no poder».
Kallie enarcó una ceja. Estaba momentáneamente aturdida por la avalancha de nueva información. ¿Un hijo ilegítimo? Tenía que ser Stan.
¿Un compromiso entre la familia Reeves y la familia Miller? ¿Cómo era posible? ¿No había dejado Jake a la familia Reeves? Esto significaba que Stan estaba comprometido con Sarah. ¿Cómo habían acabado juntos?
Gregory compartió la mirada confusa de Kallie.
La familia Reeves había atravesado tiempos difíciles, pero seguían disfrutando de un estilo de vida lujoso. Mientras Kallie reflexionaba sobre esta contradicción, cayó en la cuenta.
Jake le había confiado una vez que sus padres y Roderick le habían dejado un patrimonio considerable, que Shirley usurpó con el tiempo. Esos bienes probablemente estaban ahora bajo el control de Dean y Stan. En esencia, la familia Reeves se estaba enriqueciendo con una riqueza que a ella le pertenecía por derecho.
La expresión de Kallie se tornó desdeñosa. Su indiferencia por estos asuntos debido a su apretada agenda no significaba que no fuera a actuar. Ya era hora de que le devolvieran, con intereses, todo lo que le habían quitado.
Con este pensamiento, Kallie se volvió hacia Gregory con una mirada de agradecimiento. «Gracias. Sé que has estado pendiente de estos asuntos por mí».
Gregory fingió indiferencia. «¿Quién ha dicho eso? Sólo disfruto con un poco de cotilleo».
Incapaz de contenerse, Kallie estalló en carcajadas.
Gregory se aclaró la garganta y añadió: «Sinceramente, no me gusta en lo que se ha convertido la familia Reeves. Bajo el liderazgo de Jake, eran la principal familia adinerada de Burmoos, regida por principios estrictos. Ahora, no son más que nuevos ricos de mal gusto».
Kallie suspiró en silencio, preocupada por la verdad de sus palabras. Si Roderick lo supiera, podría sentirse abatido.
Kallie se había cansado de hablar de la familia Reeves, así que hábilmente desvió la conversación, comprando varios artículos de la exposición de Gregory como regalo. Después, regresó a casa.
Kallie tenía la intención de entregarle el regalo a Ewing a su regreso, pero no estaba por ninguna parte.
Ewing, amante de las celebraciones bulliciosas, había optado por no celebrar una fiesta de cumpleaños.
El liderazgo era algo natural para Ewing. Su tiempo se dividía entre la oficina y los viajes de negocios.
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