La esposa inocente del presidente calculador -
Capítulo 380
Capítulo 380:
Norton comió con alegría. Hace días que había perdido el apetito, se tragaba pastillas recetadas todos los días, y su lengua casi se le entumecía.
No pudo evitar suspirar: «Es una bendición comer».
Las enfermedades le limitaban de varias comidas. No podía comer esto, no podía comer aquello y su mujer cumplía con los consejos del doctor. No era divertido para él vivir en una jaula así. Pero su vida estaba en juego y no sabía cuánto tiempo su cuerpo podría soportar esto. Sólo quería vivir, pasar los días con su mujer y esperar ver a su hija.
Oliva sonrió: «Deberías hacer caso al doctor. Mientras me lo permita, te traeré comida deliciosa».
«¿Me estás sobornando?». Preguntó Norton.
«Tú tienes que escuchar al doctor. Lory ha hecho mucho, ayudarte a cooperar mejor con el doctor es lo menos que puedo hacer».
«Estás jugando conmigo». Norton la miró con impotencia: «Por cierto, ¿Has comido? Pronto serán las doce. No seas condescendiente para hacerme feliz».
Oliva sonrió. Su rostro floreció de felicidad: «Tengo una cita más tarde».
«¡Oh, resulta que esta hermosa señorita tiene una cita!». Norton sonrió.
«Si tienes algo que hacer, puedes irte. No retrases tu cita». Dijo Lory.
«Está bien, todavía no he recibido ninguna llamada». Al mismo tiempo, su teléfono sonó de repente.
Norton miró su teléfono y se rió: «Hablando del diablo. Ve, rápido, no quiero que piense que te estoy reteniendo aquí».
«Norton, deja de burlarte de mí».
Oliva sonrió y contestó al teléfono: «Ya voy». Le dijo a Alan, ella sabía que él estaba esperando en la puerta del hospital.
Norton le pidió el teléfono y le dijo: «Alan, sé amable con nuestra Oliva. Si le haces mal, me encargaré de ti. Últimamente he pasado desapercibido, pero todavía lo tengo. Si la agravas, se pondrá feo».
Lory le echó los brazos encima y lo regañó: «¿Por qué hablas así?».
Oliva soltó una risita. En efecto, sería feo si Norton decidía ocuparse de él, pero su entusiasmo le calentaba el corazón.
Alan sonrió gentilmente: «No se preocupe, señor, no ocurrirá».
“Me alegra saber eso con certeza. No me queda mucho tiempo, mi tratamiento ha sido bueno últimamente, pero no sé si mis viejos huesos sobrevivirán otros ocho o diez años».
«Me alegro de que tu salud mejore. Estoy esperando a que vuelvas al hotel y liberes a mi mujer». Le preocupaba que la presión del trabajo aplastara su pequeño cuerpo.
Norton devolvió el teléfono a Oliva después de discutir varias veces con Alan.
Lory Ted miró a su marido con diversión: «Cuanto más viejo eres, más infantil te vuelves».
«Volver a ser Joven. ¿No sería bonito?».
Oliva se rió. Una enfermedad no era del todo mala; pero el impacto psicológico sí lo era.
«Soy feliz sólo con mirarte». Deseaba tener una hija tan encantadora, pero no se atrevía a decirlo delante de su mujer por miedo a que la disgustara.
Oliva volvió a guardar el teléfono en su bolso: «Me voy ya».
«Yo te acompañare». Dijo Lory.
Oliva quería negarse, pero era incómodo. Estaba a punto de decir algo, pero finalmente asintió con una sonrisa. ´
Sólo estaban ellas dos dentro del ascensor que descendía.
Lory parecía haber querido preguntar esto durante mucho tiempo: «Oliva, la madre de Alan, ¿Todavía se niega a aceptarte?».
Ella no quería hurgar en su punto débil, peor simplemente le importaba.
Oliva suspiró y sonrió con amargura: «No ha sido fácil tratar con ella».
La decisión de Alan fue un duro golpe en el rostro de su madre. Su enfrentamiento fue acalorado.
«Tú y Alan han recorrido un largo camino. Si su madre puede aceptarte, sería perfecto, pero la realidad es a veces cruel y temo que vas a sufrir más injusticias. Además, creo que Ofelia Meyer volverá a hacerte algo. Ahora está en el hospital con la Señora Hoyle ¿Lo sabes?». Preguntó Lory con cuidado.
«Lo sé. Acabo de velas. No te preocupes, Lory, no pueden hacerme daño».
«Sé que Alan cuidará bien de ti. Tú me contaste lo que te hizo Ofelia una vez, creo que no se rendirá fácilmente, debes tener cuidado. Vigila tu espalda, siempre». Lore le dijo repetidamente.
«Gracias. Lo haré». Oliva no entendía cómo se las arreglaba para ganarse la simpatía de tanta gente, pero no podía hacerlo con la Vieja Señora Hoyle.
Pensó que la anciana la odiaba desde el principio de los tiempos. O bien, estaba en su lista negra y nunca quiso conocerla. La querida aspirante a nuera, Ofelia Meyer, era la única en su mente. Quería borrarse de esa lista negra, pero sabía que iba a ser un largo camino.
Abajo, después de despedirse de Lory, Oliva salió y se dirigió a la puerta del hospital.
Si la Vieja Señora Hoyle la seguía odiando tanto, bien podía estar dispuesta a arreglar las cosas con ella. Pero, Alan le dijo que no se preocupara, que todo mejoraría pronto. Ella sabía que él estaba trabajando duro y que estaba haciendo algo en secreto con Kent Bai, pero temía que no fuera suficiente.
No significaba que su madre la aceptara de buen grado y le gustara. Sentía que tenía que encontrar una oportunidad adecuada para acercarse a la terca señora para terminar las cosas.
También necesitaba hacer algunos preparativos. Algunas cosas no estaban destinadas a ser apresuradas. Algunas cosas estaban destinadas a ser un largo viaje, esperaba que todos la perdonaran por ser una mujer misteriosa.
Se había estaba conteniendo durante mucho tiempo. Nunca pensó en hacer daño a los demás, sin embargo, en estos días, la gente buena no era bienvenida.
Chloe le dijo una vez: ‘Tienes que luchar en esta guerra contra tu suegra’. La palabra ‘guerra’ hacía que las cosas sonaran serias y hostiles. Ella no quería que resultara así, pero la vieja era una imbécil celosa.
Había una palabra más agradable para esto, pero ella no podía pensar en ella. Después de todo, la Vieja Señora Hoyle la consideraba la mujer que le había robado a su hijo.
«¡Maldita sea!». Maldijo en voz baja.
Suspiró y pateó una pequeña piedra en el borde del camino. Sin embargo, cuando levantó la vista no esperaba ver a lo lejos dos figuras familiares abrazadas bajo un cerezo.
Ofelia estaba frente a ella y el hombre, ¿No era su marido quien acepto reunirse con ella en la puerta del hospital?
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Nota de Tac-K: Ánimos en sus actividades en este inicio de semana lindas personitas, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (>‿=)✌
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