Capítulo 229: 

Aoba Hoyle no esperaba que esta mujer se durmiera antes que él. Siempre estaba en guardia, pero en ese momento bajó la guardia. Se sintió aliviada estando con él.

Aoba tenía que admitir que Chloe era una mujer atractiva. Después de observarla durante mucho tiempo, tuvo una sensación de sequedad en la garganta. ¡Maldita sea! Maldijo en secreto en su corazón, giró el rostro hacia el otro lado y se durmió lentamente.

No volvió a pasar nada durante la noche, pero cuando se despertó, Aoba sintió su cuello adolorido. Y la mujer no estaba en la cama.

Giró lentamente la cabeza y vio que ella estaba sentada en el escritorio de la computadora, pareciendo que buscaba algo. «¿Qué estás haciendo?».

Chloe le hizo una seña: «Ven aquí, ¿Eres tú?». Buscó su nombre en Internet y Goog$e presentó al artista Yang Yu que se hizo famoso cuando era Joven.

Sus cuadros eran famosos, pero nadie lo había visto nunca, nadie conocía su verdadero rostro. Si el hombre de la sala era el mismo que Yang Yu, ¿No sería una gran noticia?

Aoba se acercó: «Parece que no crees en mi».

«Si puedes mostrarme tu identificación, me creeré tus palabras».

«Yang Yu no es mi verdadero nombre».

«Es tu nombre artístico». Ella ya lo había adivinado, pero cuanto más pensaba en su rostro, más quería confirmar sus sospechas, pero este hombre no quería decirle nada.

«Oye, sólo quiero verlo».

«Mi ID no es nada especial. Oye, tengo hambre, ¿Puedes cocinar?». Aoba fue al baño.

Peor escucho su voz desde atrás: «¿No puedes pedir por tu cuenta?».

«Me temo que te arruinarías después de comer en este hotel durante diez días».

Aoba se quedó en la puerta con la boca llena de espuma. «El contrato dice que tienes que encargarte de mis tres comidas diarias».

«¿Vives en un hotel de alta categoría y quieres que yo pague tus comidas? Hay algo que no está bien en eso».

«Eso también es algo malo que fue causado por ti».

Chloe estaba muy enfadada: «Aquí no hay cocina, ¿Cómo voy a cocinar para ti? Vivo sola con una amiga. ¡Ni hablar!».

“Simplemente cámbiate a una habitación equipada con cocina». Dijo Aoba, e inmediatamente llamó a la recepción para que le cambiaran la habitación, y luego pidió a alguien que trajera dos desayunos.

«Olvídate de la comida de esta mañana, pero tienes que cocinar para mí la próxima vez».

Chloe lo insulto en secreto.

Después del desayuno, Aoba no quería salir, así que le pidió a Chloe que viera videos con él mientras se aburría. Este chico era tan pervertido que cerraba las cortinas para ver películas de fantasmas.

La imagen tenebrosa y la música de fondo hicieron que Chloe se sintiera fatal. Si fuera Oliva, diría con ligereza: «No hay ningún fantasma en el mundo, pensando que todo esto es artificial, no da tanto miedo».

Pero en el corazón de Chloe había una fuerte sensación de malestar. Esas voces cayeron en sus oídos y tiñeron de teatralidad la habitación. Estaba claro que afuera era un día soleado y que la habitación tenía calefacción, pero aun así le dio frío.

Luego le llegó un mensaje de texto de Oliva, que distrajo su miedo: [¿Adónde fuiste noche? ¿Tienes una aventura?]. Detrás del texto, había una sonrisa perversa.

Chloe quería responderle con la verdad, pero cuando pensó nombrar a Alan haría que Oliva se sintiera triste, se detuvo. Chloe nunca esperaría que, en ese momento, Oliva estuviera sentada en el auto de Alan mientras la llevaba al trabajo.

Después de pensarlo, Chloe respondió con un mensaje de texto en su teléfono móvil: [No hay ninguna aventura, pero sí un fantasma].

¿Acaso este fantasma no estaba sentado a su lado? Estaba mirando la película con tanta atención, y Chloe no sabía cómo podía atreverse a ver esos cuadros sangrientos y sombríos, la estética de este chico era realmente diferente.

Oliva sólo trató sus palabras como una broma. Chloe no sabía cómo decirle lo que le había pasado. ¿Debía decirle a Oliva que por error había herido a un chico que se parecía a Alan? ¿Y que fue chantajeada por este chico? ¿Y que sospechaba que ese chico tenía algo que ver con Alan? El nombre de Alan parecía un tabú entre los que conocían el asunto, y no se atrevían a mencionarlo fácilmente delante de Oliva.

Chloe no se atrevió a dar un vistazo a la pantalla del televisor, y regañó a Aoba varias veces en su oído. Chloe volvió a entrar en la página del pintor. Tenía muchas ganas de tomarle una foto y subirla a Internet diciendo que se trataba del Joven Yang Yu.

Debe haber mucha gente interesada en él, y sería mejor si hubiera alguien que pudiera buscar su historial. Era una pena que la luz fuera demasiado oscura y que los píxeles de su teléfono fueran demasiado pobres.

Al ver que la pantalla seguía haciendo pequeños movimientos, Chloe bajaba la cabeza, o cambiaba la vista de lugar, Chloe no se atrevía a mirar la televisión.

Era una expresión de miedo. Era divertido y ella no se atrevía a verlo, pero eso se lo puede decir ¿Por qué esta mujer pretendía ser fuerte? La valentía de las mujeres era menor que la de los hombres, lo cual no era algo para despreciar.

Cuando la imagen mostraba la mano del fantasma arrastrándose por el suelo, la comisura de la boca de Aoba se levantó ligeramente, y tuvo la idea de asustar a Chloe.

Su mano se extendió tranquilamente por detrás de ella, y luego se dejó caer gentilmente sobre su espalda. Chloe sintió de repente una brisa fresca en su espalda, y su cuerpo se puso rígido.

Cuando levantó la vista, vio una mano sin huesos que se arrastraba por el televisor, era calva, y parecía que iba a atacar el cuello del protagonista en cualquier momento.

Al mismo tiempo, Chloe sintió que también había algo arrastrándose por su espalda, estaba tan asustada que se levantó de la cama inmediatamente, y se apresuró a abrir las cortinas.

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