La dulce esposa del presidente
Capítulo 568

Capítulo 568:

Laura se congeló un poco, inconscientemente miró a Nicole y preguntó: «¿Qué está pasando afuera?».

Nicole también estaba confusa: «No lo sé».

Pero inmediatamente dijo: «Laura, quédate aquí. Voy a echar un vistazo». Después de decir eso, salió rápidamente.

Nicole regresó diez minutos después.

Nada más entrar, cerró cuidadosamente la puerta con una mirada extraña.

Laura estaba confusa: «¿Qué pasa fuera?».

Nicole se acercó a ella, se inclinó ligeramente y le susurró: «¿Adivina a quién acabo de ver fuera?».

Laura supo que debía ser alguien conocido y preguntó con curiosidad: «¿Quién era?».

«El señor Nixon».

¿Qué?

Laura se quedó helada y se olvidó de beber la taza de té que tenía en la mano. Su mente se quedó en blanco por un momento.

En ese momento, la puerta se abrió de golpe.

Ambas se estremecieron.

Levantaron la vista y vieron a Max de pie, con gesto adusto.

Detrás de él estaba Lily, que parecía triste con los ojos hinchados por las lágrimas.

Era obvio que Lily acababa de molestar a Max.

Al ver a Lily, Laura se sintió un poco avergonzada. Forzó una sonrisa a modo de saludo y luego giró la cabeza torpemente.

¿Pero qué demonios…?

¿Qué quería?

Sabía que Lily le había dado dinero y que ella había prometido no meterse en el camino de Lily, pero llevó a Lily directamente hacia ella.

Quería que Lily la odiara, ¿no?

Laura se quedó sin habla pero no se atrevió a decir nada.

Lily se puso pálida en cuanto vio a Laura en la habitación.

«¿Por qué… por qué estás…?»

Laura no tuvo más remedio que saludarla con una sonrisa.

«Señorita Thomson, señor Nixon, qué coincidencia. ¿También están aquí para almorzar?» Se distanció deliberadamente de Max.

Sin embargo, ¿cómo podía Max estar de acuerdo?

Estaba realmente molesto con Lily, que no dejaba de importunarle.

Incluso pretendía encontrarse con él por casualidad. No era tonto. ¿Cómo podía no ver a través de ella?

¡Qué ridículo!

Justo ahora, vio a Nicole espiándoles fuera. Al instante se dio cuenta de que Laura también estaba comiendo aquí.

Así que corrió hacia allí sin dudarlo.

Lily apretó los dientes. Antes de que pudiera decir nada, vio entrar a Max y sentarse en la silla junto a Laura.

«¿No habíamos quedado en comer juntos? ¿Por qué no me avisaste cuando llegaste?».

Laura estaba confusa.

¡Ella no sabía nada!

Sin embargo, era demasiado tarde para explicárselo. Lily estaba furiosa.

Ignorando la fría mirada de Max, Lily entró corriendo, señaló a Laura y gritó: «Max, ¿por qué sigues con ella? ¿Sabes qué clase de mujer es?». Laura agachó la cabeza en silencio.

Quería que Lily la denigrara.

Quería que Lily dijera que sólo le gustaba el dinero y que era una descarada. Quería que Max se sintiera mal y la dejara.

Por favor. Deseaba desesperadamente que eso ocurriera.

Sin embargo, Max se limitó a mirarla y le preguntó: «¿Tiene algo que ver contigo?».

Lily se quedó muda.

Estaba demasiado enfadada.

«No me importa, pero no quiero que te dejes engañar por ella. ¿Sabes una cosa? Le di una gran suma de dinero y le pedí que te dejara y ¡aceptó!».

«Aceptó dejarte por 20 millones de dólares. ¿Cómo puedes seguir con ella?» Max entrecerró los ojos y miró a Laura.

Laura parecía inocente.

Él sabía que ella le había devuelto todo el dinero.

Max sonrió y de repente estiró la mano para acariciarle el pelo.

«Niña tonta. ¿Por qué no me dijiste que te faltaba dinero? ¿Es más cómodo gastar el dinero de otro que el mío? Aquí tienes mi tarjeta. Cógela y pásala como quieras».

Literalmente, sacó una tarjeta negra y se la metió en la mano.

Laura se quedó de piedra.

¿Qué estaba pasando?

Admitió que era actriz.

Pero, ¿podía una actriz secundaria cobrar un sueldo tan alto hoy en día? ¿La engañaban sus ojos?

Laura ya no era la niña miope. Reconoció la tarjeta que le había dado Max.

Era una tarjeta negra ilimitada de edición limitada mundial. Contenía una gran cantidad de dinero y era un símbolo de estatus.

Mirando la sonrisa de Max, dudó y no se atrevió a cogerla.

«Bueno… No debes hacer eso. No me falta dinero ahora mismo…»

«¡Cógelo!»

El tono de Max se volvió brusco de repente y le metió la tarjeta directamente en la mano.

Laura no pudo resistirse. No podía decirle que no a Max delante de Lily o se avergonzaría, así que sólo podía coger su tarjeta.

Max volvió a acariciarle la cabeza satisfecho: «Buena chica».

Lily, que había sido descuidada y cambiada de protagonista a espectadora, estaba completamente confundida.

No sabía qué estaba pasando.

¿Qué les pasaba? Estaba muy enfadada y venía a buscar pelea.

¿Podrían al menos mostrarle un poco de respeto?

Además, ¿por qué las cosas resultaron así?

¿No debería Max estar furioso? ¿No deberían malinterpretarse y romper?

Ella había estado planeando esto durante tanto tiempo. ¿Por qué no hicieron lo que ella quería que hicieran?

Además, el enfoque de Max estaba mal, ¿no?

Laura le quitó el dinero, pero Max sólo se fijó en que era pobre e ignoró que le había traicionado por dinero.

¿Qué les pasaba?

¡Lily estaba devastada!

Totalmente devastada.

Nunca pensó que se sentiría tan frustrada.

Se había preparado y planeado cuidadosamente.

Aprovechó la oportunidad y puso en práctica su plan, pero sus enemigos no se preocupaban por ella en absoluto.

No era nada para ellos.

Lily estaba tan enfadada que casi se desmaya. Su agente, Selina, entró corriendo y se dio cuenta de que el ambiente en la habitación era raro. Se apresuró a sostener a Lily para que no se desmayara.

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