Infinitamente nuestra -
Capítulo 4
Capítulo 4:
POV Faith.
“Existe una manera, que puede garantizar que ustedes tengan una vida normal”, dijo mi madre mirando a papa.
“¡Hannia! ¡No! Ni lo pienses”, dijo papa y pude notar la angustia en su rostro.
“¿Cuál es? Haré lo que sea”, dije desesperada.
“Debemos separarlas, a partir de este momento sus vidas serán separadas y jamás volverán a verse, una de ustedes debe irse lejos y no regresar”.
Papá me miro y mamá también.
“¡No! Todo menos eso, no podría estar alejada de Arya”, dije con angustia.
“Faith, la que debe irse es la más fuerte de ambas, la que tiene mayor posibilidad de ser la oscuridad, la que tiene un carácter fuerte y rebelde”, dijo mi madre mirándome.
“¡No! No mamá, por favor haré lo que sea, pero no me alejen de ustedes, ¡Papa! Por favor seré mejor, lo prometo”, dije con lágrimas en mis ojos y me lancé a los brazos de mi padre buscando su protección.
“Hannia, tiene que haber otra solución”, dijo Alfa Máximo.
Pero Luna Hannia fue firme, se levantó de la cama y los miro ambos.
“Máximo sabes que no la hay, lo que paso en el lago les pudo haber costado la vida ambas, es nuestro deber protegerlas y esto debe hacerse”, dijo ella firme en su decisión.
“¡Papá!”, dijo Faith destrozada.
“Faith!, recuerdas lo que paso en el lago ¿Cuándo las encontré?”, preguntó Luna Hannia.
Eso hizo que Faith tratara de recordar lo que había pasado, pero las imágenes en su mente eran borrosas, ya no estaba segura de que había sucedido.
“El agua era fría, gritaba fría, yo le gritaba a mi hermana a Arya, para que me ayudara, no recuerdo muy bien”, dijo ella.
Luna Hannia la miro fijamente sin remordimiento.
“Era ella la que gritaba, pidiendo que le ayudaras, eras tú la que estaba parada viendo como tu hermana se estaba ahogando y no hiciste nada por ayudarla, cuando llegue no pude hacer nada”, dijo Luna Hannia.
“Intenté matar a mi hermana, no eso no es posible, yo la quiero mucho, ella es parte de mí, no es cierto eso, me estas mintiendo”, dije desesperada.
“Porque lo haría, ambas son mis hijas y solo quiero lo mejor para ustedes, ahora entiendes, por qué debes ser tú la que se aleje de ella y de nosotros”.
“Eres tú la más fuerte de ambas y la que no necesita de mis cuidados, pero Arya ella no podría sobrevivir lejos de nosotros su carácter no es tan fuerte como el tuyo y debo protegerla de ……”, dijo sin terminar esas palabras.
“¡De mí…!”, dije sintiendo como las lágrimas caían en mi rostro.
“Sé que ahora me entiendes y saber que lo hago porque las amo, pediré que tengan todo listo, te irán hoy mismo no hay tiempo que perder”, dijo mi madre.
“¡Hoy! Tan pronto, podré despedirme de Arya”, pregunté con tristeza.
“¡No! Deben estar alejadas, ya no pueden verse”.
“¿A dónde iré? ¿Por tiempo?”, pregunté mirando a papá.
“No te preocupes por nada mi princesa, estarás a salvo y muy bien acompañada, Silvana vendrá por ti y ella estará contigo, iras nuestro Coven White Magic, vivirán entre las brujas y aprenderás a controlar tus poderes, cuando llegue el momento, iremos a visitarte pequeña, te lo prometo”, dijo mi padre dando un beso en la frente y abrazándome con cariño.
“Iré a prepararlo todo”, dijo mi madre y camino hacia la puerta.
“Mama! ¿Cuándo poder regresar?”, pregunté con esperanza en mi voz, la cual vi desvanecerse en el aire con su respuesta.
“¡Nunca! Para evitar que algo mayor suceda, no deberán estar juntas, no sabemos qué más puede suceder, pero no te preocupes Faith, estarás bien, eres fuerte como yo, por eso sé que aunque estés lejos de nosotros sabrás salir adelante”, dijo mi madre y salió del cuarto.
Mi padre me abrazo y yo lloraba en sus brazos, sentía como el corazón se me partía, hoy sería mi último día en casa con mi familia, jamás regresaría viviría exiliada en un país extraño lejos de todo lo que conozco y tanto quiero, ese era mi castigo tenía que ser fuerte.
POV Hannia.
Salí del cuarto de Faith, con lágrimas en mis ojos, tenía que ser fuerte por ella, el mandarla lejos y ser fría fue difícil, pero alguien tenía que hacerlo, Máximo estaba cegado por el amor que les tenía, pero eso era inevitable.
Inicio Flashback dos días atrás en el lago Chenek.
Aún recuerdo lo que vi cuando llegue al lago, ese sueño que me atormento tantos años se hizo realidad, una de mis hijas se estaba ahogando y la otra la estaba dejando morir, nadie las conocía como yo, en ese momento me di cuenta de quien era la luz y quien la oscuridad, sabía que una tenía el lunar de la luna bajo su cabello, esa era la mayor prueba.
Pero cuando quise entrar al agua, una luz roja rodeo a la que se estaba ahogando y una explosión fuerte las envolvió a las dos, ocasionando que mi cuerpo fuera expulsado a unos metros de ella, cuando levanté la mirada, ambas estaban en la orilla en la tierra inconscientes.
Me Levanté y me acerque a ellas, pero ambas habían cambiado, ese color rubio de sus rizos se había ido y fue remplazo por un tono rojo fuego, fue cuando entendí lo que tenía que hacer, el momento había llegado y ahora sabia, quien era la que tenía que alejarse de nosotros.
Me acerque a ambas y las tome en mis brazos, mientras sentía los pasos de Niza acercándose a nosotras.
“¡Su alteza, Hannia! ¿Qué ha pasado?”, dijo Niza arrodillándose y tomando a una de ellas en sus brazos.
“El momento ha llegado Niza, no sabes lo que daría gustosa mi vida, para que ellas no sufrieran, las amo tanto mis hijas ¡Lo siento! Perdónenme por haberles ocasionado esto”, dijo con el corazón hecho mil pedazos.
“Hannia, no hay nada que puedas hacer, sabíamos que esto pasaría y por eso, nos preparamos, me encargaré de todo y contactaré a Silvana, no te preocupes ella nos tendrá a nosotras, te juro que daré mi vida por ella y la querré como si fuera mi hija”, dijo Niza mirándome con una sonrisa en su rostro.
“Lo sé, tú has sido como mi hermana Niza, sé que estarás a su lado, ahora que yo no poder, cuídala por favor, solo espero que ella sea lo suficientemente fuerte para sobrevivir esto”, dije con tristeza.
Fin Flashback.
POV Arya.
Desperté en mi cuarto, pero no tengo la más remota idea de cómo llegue hasta aquí.
“Buenos días mi princesa, ¿Cómo te sientes Arya?”, dijo mama mirándome con una sonrisa, mientras se sentaba en la orilla de mi cama.
“Me siento de maravilla, aunque no recuerdo cómo fue que llegué a mi cuarto”, le dije algo confundida, mi mamá me miro y pude ver que algo estaba pasando.
“Arya, tengo que decirte algo y quiero que me escuches sin hacer alguna pregunta hasta que termine”, me dijo seria y no puedo hacer otra cosa más que asentar con mi cabeza y escuchar.
Mi madre me contó sobre el hechizo que realizaron cuando nacimos, la maldición de las gemelas y las consecuencias que esto nos traería a Faith y a mí, no podía dejar de sorprenderme cada que mencionaba esto.
Siempre supimos que algo nos ocultaban, pero esto, es algo que jamás me hubiera imaginado, hasta que escuche de su boca las palabras que más me dolieron, Faith tendría que irse, mi otra mitad mi alma gemela, mi hermana debía alejarse de mí para no hacerme daño.
“¡Mama!, ¡Faith jamás me lastimará”, le dije, pero en el fondo sabía que eso podría pasar, por algo mis padres querían que ella se fuera y no se acercara más a mí.
“No podemos saberlo hermosa, así como tampoco podemos estar seguros de que tú no la lastimaras, pero ella es fuerte y sé que saldrá adelante, no estará sola Silvana y Niza estarán con ella”
“¿A dónde ira?”, le pregunte.
“A París, a nuestro Coven White Magic, veraz que ella estará bien es como nuestra segunda casa podrémos ir a verla en algunas ocasiones”, dijo mama y eso me emociono mucho.
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