Estuve allí antes -
Capítulo 261
Capítulo 261:
Grace se detuvo, pero no pidió a Ladd y a los demás que los expulsaran. Bajó la cabeza y miró a la mujer arrodillada en el suelo.
En silencio, Grace la examinó de arriba abajo. No pudo evitar sentir que era ridícula. ¿Por qué esta mujer tenía el valor de acercarse a ella y suplicarle?
¿Por qué esta mujer tenía la confianza de pensar que ella, Grace, la ayudaría?
Grace dio un vistazo a la hermosa mujer arrodillada frente a ella y dijo sin expresión,
«Tú dijiste que la Señora James quería matarte a ti y a tu hijo. Ahora esta es una sociedad regida por la ley. La Señora James no tiene el valor de hacerlo, ¿Verdad? Creo, Señorita, que puede estar viendo cosas últimamente. Le sugiero que se registre en el departamento de psiquiatría del hospital. El delirio persecutorio podría ser controlable médicamente».
Cuando la mujer escuchó esto, su rostro se tornó pálido, «Grace …»
«¡Cállate!» Grace interrumpió a la mujer sin rodeos y gritó: «Antes de hoy nunca la había visto. Así que, por favor, llámeme Señora Shaw».
Detrás de ella, Caden dijo fríamente: «Sí, debería llamarla Señora Shaw». La voz magnética y profunda sonaba débil, pero revelaba un tono duro que no podía ser rechazado por los demás.
Grace se sorprendió y miró de reojo al hombre que estaba a su lado. Sin embargo, esta mirada fue como una mirada coqueta para el hombre a su lado.
Caden fue audaz y, en silencio, abrazó firmemente el hombro de Grace.
Miró fijamente a Ladd, fingiendo no ver la resistencia en sus ojos.
Esto era realmente incómodo para Ladd.
Ladd pensó para sí mismo: Señor Shaw, ¿Por qué me mira cuando la abraza? Me siento incómodo al ser observado como un niño.
Ladd maldijo a Caden en su corazón.
Caden se preguntaba si debía echar a esta molesta mujer.
Esta mujer trajo a su hijo a ver a Grace, y él podría echarlos inmediatamente. Pero no lo hizo porque quería ver qué quería hacer esta amante de Jafar.
Había otra razón. Era mejor que esta mujer fuera difícil de tratar. De ser así, Grace no podría alejarse hoy.
¿Qué?
Si no puede mudarse hoy, podría hacerlo mañana.
Mañana… ¡Eso era cosa de mañana!
En cualquier caso, Grace no se mudaría hoy.
Al menos podra abrazarla y besarla esta noche mientras duerme.
Caden no tenía la más mínima vergüenza. Él era el director general de una gran empresa, sin embargo, hizo cosas vergonzosas en la noche. Pero no estaba avergonzado, sino más bien orgulloso.
En We%bo, un cariñoso internauta le envió un mensaje directo anoche, «Amigo, si también eres un hombre de verdad. ¿Cómo has ofendido a tu mujer? Tienes que recordar tres puntos importantes. ¡Los aprendí por experiencia propia!
¡Primero, la criatura más hermosa, linda y se%y del mundo es tu esposa!
¡Segundo, la única criatura del mundo que no puede ser ofendida sigue siendo tu esposa!
El tercer punto es tan importante que debes recordarlo. No intentes aprovecharte de tu esposa».
Caden estaba de acuerdo con este hombre y creía profundamente que la mujer más hermosa del mundo era Grace. Así era.
La única a la que no podía ofender, también era Grace. Eso también era cierto.
¡Estaba muy de acuerdo con el último punto! Y ahora se sentía miserable, era cierto. Incluso si lo hubieran ofendido al el sin piedad, aun así, no se sentiría miserable.
Pensando en esto, Caden la sujetó fuertemente por el hombro. La distancia entre ellos se acortó al instante.
«Señora Shaw». Esta hermosa mujer pareció temblar de miedo. Le dio a Grace una mirada acuosa, y también a Caden que estaba al lado de Grace.
«Señora Shaw, mi nombre es Nora y él es Ollie James. Sé que es descortés por mi parte irrumpir así hoy, pero no tengo otra opción. Por favor, ayúdenos. Si no, no podremos sobrevivir».
La mujer tomo valor y continuo: «La Señora James, ha ido demasiado lejos. Sé que me odia, pero el niño es inocente. Por mucho que me odie, no debería ir a la escuela de Ollie a intimidarlo. Ollie es todavía un niño. ¿Cómo puede ir Ollie a la escuela después de que la Señora James le haya causado problemas?
Señora Shaw, sé lo que siente la Señora James, pero Ollie es sólo un niño. Sólo tiene diez años. Antes de que la Señora James fuera a su escuela, él no sabía que era…»
Grace escuchó en silencio. Escuchó las palabras de Nora condenando a la Señora James en silencio y no interrumpió hasta que oyó que Nora se detenía y no podía continuar.
Miró a la mujer con indiferencia y preguntó: «¿Cuál es su identidad? ¡Un hijo ilegítimo! ¿Por qué no continuó?”.
No pudo evitar las ganas de reír.
«¿Por qué no seguiste?», preguntó.
Los ojos de Nora se pusieron rojos al instante mientras miraba a Grace con una expresión extremadamente humillada. «¡El niño sigue aquí! ¿Por qué la Señora Shaw debe ser tan agresiva? ¿Quieres que diga eso delante del niño?».
Parecía que estaba intimidando a Nora…
Esta vez Grace se rió de verdad.
«¡Mamá! ¡No supliquemos a esta mala mujer!» A un lado, el niño de diez años agarró a Nora y le dijo: «No te arrodilles delante de ella. ¡Mamá, ponte de pie! ¡Vamos a casa! ¡No hace falta que le roguemos! No es para tanto».
Nora agarró a su hijo y le dijo: «¡Pero se reirán de ti!».
«No me importa. No tengo miedo. No es para tanto». Nora abrazó al niño y lloró amargamente.
Grace miró sin expresión a la madre y al hijo que tenía delante, pero sus ojos estaban llenos de cansancio. Después de regresar del Lago Erhai, había estado ocupada con los negocios.
El enredo del Grupo James era difícil de manejar. Tenía que mantener la estabilidad en el interior y proteger a la empresa de otras compañías del exterior.
Para hacer frente a esos problemas, había transferido el 70% de sus antiguos subordinados de la Fundación Wei’ai al Grupo James.
Aun así, el Grupo James, que parecía estar en auge, era un ‘gran agujero’.
Estaba tan ocupada lidiando con el ‘agujero’ que estaba agotada.
El Grupo Shaw le había ayudado. Sin embargo, ella no quería deberle más a este hombre.
«Guarda tus lágrimas». Grace la miró y dijo: «¡Si tienes algo importante que decir, dilo!»
No había necesidad de actuar así delante de ella.
«Señora Shaw, le ruego que…»
«Si sigues diciendo tonterías, entonces puedes retirarte». Todavía tenía mucho que hacer, así que dijo: «Si tienes algo que decir, ve directamente al grano».
La impaciencia en los ojos de Grace y su tono frío hicieron que Nora se calmara. Ya no se atrevía a irse por las ramas. Nora atrajo a Ollie hacia Grace y le dijo con ansiedad.
«Señora Shaw, no tengo ninguna otra intención. Todo es por el bien de mi inocente hijo. Espero que pueda dejar que Ollie regrese a la Familia James y reconozca su identidad».
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