Estuve allí antes
Capítulo 204

Capítulo 204:

Caden gritó: «Kirk».

Kirk sacó inmediatamente un puñado de dinero, unos cincuenta mil dólares: «Señor, ésta es la recompensa por su información. Tenemos prisa y no hemos traído mucho dinero. Lo siento».

Con eso, puso el dinero en la mano del chofer, que ya estaba sorprendido. Kirk atrapó a Caden y subió a su auto.

«Haz una llamada para preguntar por el vuelo a Xiamen: si sólo hay un vuelo en este momento, y si ya ha despegado el más reciente».

«No hay problema».

Después de un rato, Kirk respondió: «Jefe, acaba de despegar, ¿Qué debemos hacer?».

«¿Si no me equivoco, el Señor Chang tenía un avión privado en Hangzhou?» Mientras lo decía, empezó a llamar al ‘Señor Chang’, tratando de preguntarle a este si era posible prestarle del avión.

Una capa de fino sudor brotó en la frente de Gloria. Caden entrecerró los ojos: «Gloria, ¿Tienes calor?»

«Sí, un poco. No estoy muy acostumbrada al clima de Hangzhou». Su respuesta fue mediocre. Caden la miró fijamente durante un rato y luego apartó la vista.

Nadie sabía que la espalda de Gloria estaba ya empapada por el sudor.

El avión privado que Caden tomó prestado despegó.

Se dirigía a Xiamen.

Grace no tomó el avión a Xiamen. En su lugar, cambió de dirección en el aeropuerto y se dirigió a la ciudad. En primer lugar, se registró para obtener una tarjeta bancaria. A continuación, se dirigió a una tienda de antigüedades de muy alta gama, donde vendió un collar de diamantes y un jade de la caja de hierro. Al ver el collar de diamantes y el jade, sintió que la vida era realmente irónica.

Ella estaba a punto de escapar, pero el dinero era el regalo que Caden le dio.

Las joyas que Caden le regaló eran muy caras. Ese jade valía más de trescientos mil. Ella lo sabía, sin mencionar el collar de diamantes. Ahora la tienda de antigüedades bajó deliberadamente el precio a un total de trescientos mil por el collar y el jade.

«Este precio puede servir para intimidar a los que no saben nada de antigüedades. Pero sé que este jade por sí solo vale más de trescientos mil dólares», dijo, pero se apresuró a continuar: «Sin embargo, si puede darme trescientos mil en efectivo ahora mismo, también serviría».

«¿Están limpios?»

Grace comprendió. El comprador se dio cuenta de su afán por vender esas cosas cuanto antes, y temió que los cargamentos fueran ilegales.

Grace sacó el recibo de la caja de hierro: «Tengo los recibos».

El comprador se sintió aliviado cuando vio los recibos. En cuanto a la razón por la que Grace vendería esos dos artículos a un precio tan bajo. No le importaba mientras los cargamentos fueran legales, no le importaban otras cosas.

Por lo tanto, no quiso preguntar la razón, y dijo, «Deme los recibos». Con eso, llamó a un empleado a su lado: «Ve a preparar trescientos mil en efectivo».

Al trabajar en este círculo, a veces necesitaban una gran cantidad de dinero en efectivo. Por ello, la caja fuerte del despacho guardaba mucho dinero en efectivo por si lo necesitaban.

«¿Puedo enviar a alguien para que le acompañe?»

Grace sonrió débilmente y dio un vistazo al comprador: «No, Gracias».

Llevaba en la mano una mochila negra, las muy grandes se vendían por Internet. Puso los trescientos mil en la mochila para que no llamara la atención de los demás.

Fue al banco discretamente y guardó el dinero en su tarjeta, dejando sólo diez mil como efectivo en el bolso.

Después de todos los preparativos, tomó un taxi a Ningbo, donde vendió algunas otras joyas de la caja de hierro y guardó el dinero en su tarjeta.

Luego tomó un taxi de nuevo a Suzhou, vendió otras joyas y guardó el dinero en efectivo.

No es que no quisiera coger un tren, un avión o un autobús. Sin embargo, con la caja de hierro que llevaba, no podía pasar el control de seguridad.

Por lo tanto, sólo podía tomar un taxi para ir a diferentes lugares y vender las joyas hasta que sólo quedara un anillo de diamantes en la caja de hierro. Frotó el anillo gentilmente mientras permanecía en su sitio durante mucho tiempo.

Poco a poco, pasó el anillo por el collar que le había dado Gloria y se lo volvió a poner en el cuello.

Compró un billete de avión para Lijiang.

No fue hasta el momento en que el avión despegó, cuando soltó un suspiro.

Cuando sintió que el avión ascendía, se dio cuenta de que por fin se había librado de todo.

El cielo de Lijiang era azul y estaba cerca del suelo, como si pudiera tocarlo al estirar la mano. En el momento en que salió del aeropuerto, casi no pudo evitar gritar en voz alta: ¡Soy libre!

«¿A dónde va, señora?»

«Erhai… ¡Erhai!» Lo dijo una vez, y luego gritó en voz alta al chofer por segunda vez: «¡Voy a Erhai!».

Lo dijo con más determinación por tercera vez.

Como si no pudiera creer que el día que había estado esperando finalmente había llegado. Esto era real. Se confirmó a sí misma una y otra vez.

«Le he oído, le he oído, Madame. Por favor, no haga tanto ruido, no soy sordo». El chofer estaba bromeando con ella, con mucho humor. Más tarde, Grace era como una persona completamente diferente. Seguía conversando con el chofer y hablaba mucho. Y el chofer era un miembro de la minoría.

«¿Has encontrado ya un hotel? Los hoteles de Erhai tienen su propia singularidad».

Por el camino, el chofer fue muy amable y los dos siguieron charlando. El trayecto hasta Erhai tenía una distancia considerable, así que el chofer charlaba con Grace para matar el tiempo.

De repente, Grace pensó en algo. Sólo quería llegar rápido, pero se olvidó de lo que tenía que hacer al llegar a Erhai.

Abrir un hotel sonaba fácil, pero no tenía ni idea de cómo lograrlo cuando realmente tuviera que hacerlo. Por suerte, consiguió una gran cantidad de dinero vendiendo las joyas.

«Quiero… quiero encontrar uno que no sea tan popular. Es la primera vez que voy a Erhai, ¿Conoces alguno?»

«¿Una no tan popular? Tú eres especial. Todos los demás se dirigen a algún tipo de ciudad antigua, pero tú estás buscando una lejana. Mi familia vive al lado de Erhai, y teníamos una casa que fue heredada por muchas generaciones. Ahora fue cambiada por un hotel, ¿Por qué no vienes al hotel de mi familia si aún no has encontrado uno?»

Erhai no era un océano, pero éste era el lago más puro que Grace había visto en su vida. El lago era tan grande que no se podían ver sus extremos.

«Abre la ventana».

La ventanilla del auto se bajó, ella estiró las manos, sólo se atrevió a estirar un poco para sentir el viento deslizándose por las yemas de los dedos, esa era la sensación de libertad. Cada vez que el viento pasaba, se llevaba algo de calor. Las cosas buenas y malas que había vivido se las llevaba poco a poco junto con el viento.

Se dijo a sí misma una vez: Todo está en el pasado.

Esta vez, todo será realmente el pasado.

Lo que ella no sabía era que durante los días que se fue, alguien casi se volvió loco. Esa persona buscó en cada rincón de la Ciudad S, pero no pudo encontrar ningún rastro de ella.

La Familia Shaw era como cambiar de sangre. Kirk se arrodilló en el suelo. No sabía que algunas palabras eran letales para otros; no sabía que sus palabras explícitas o implícitas estaban hiriendo a esa mujer una y otra vez en el pasado; no sabía que él, que no sabía nada de esa mujer, actuaba como todo el mundo, etiquetando muchos desprecios a esa mujer sin rastro.

Pero al final… ¡Esa mujer era la más inocente!

«Te daré la oportunidad de explicarte». En el sofá del salón, el hombre daba un aspecto deprimido, con las patillas desordenadas y la barbilla llena de bigote. Parecía que había experimentado mucho, pero sus ojos eran tan fríos que podrían congelar los huesos de alguien.

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