Enamorarme de ella después del divorcio -
Capítulo 500
Capítulo 500:
«‘¿Qué le pasa a África? ¿Qué problema tiene África?». Stella puso los ojos en blanco ante Emily. A Stella le gustaba mucho África.
«¡Tu idea va más allá de la comprensión de la gente corriente!». Emily abrió mucho los ojos y le dio a Stella un pulgar hacia arriba. Como era de esperar, esta mujer no podía hacerla pensar en sí misma como una persona normal.
«Hehe, así es. Gracias por tu cumplido!» Stella interrumpió directamente las palabras negativas de Emily, tomándolas como un elogio y sintiéndose bien consigo misma.
«Dime, ¿por qué elegiste África?» Emily quería saber por qué Stella hizo esa elección.
Stella se incorporó y miró a Emily con seriedad.
«Porque quiero ir al Árbol del Pan de Mono». Cuando Emily oyó hablar del Árbol del Pan de Mono, se emocionó de inmediato. «¡Dios mío, no puede ser… llévame contigo!».
Cuando Stella terminó de hablar, se sentó perezosamente en el sofá. Emily se incorporó inmediatamente y se inclinó hacia Stella, tirándole de la manga.
«¿Quién acaba de decir que no soy una persona normal?» Stella miró a Emily con indiferencia y luego volvió la cabeza hacia otro lado.
«¡Estoy equivocado! No soy una persona normal. ¡Siempre eres una persona normal! Por favor, ¡cuídame!»
Emily no podía calmarse ante la idea de ir a un lugar que siempre había considerado un cuento de hadas.
«Para que conozcas tu error y lo cambies, creo que debería ser un poco útil llevarte conmigo». Esta vez, Stella miró a Emily con orgullo. «Humph, ahora veo que si todavía te atreves a hablar así de mí.»
«¡Gracias, amo!» Emily masajeaba con entusiasmo las piernas y los hombros de Stella de vez en cuando.
Justo cuando los dos estaban charlando, el teléfono de Stella sonó. «Ding…»
«Hola, Damien». Al ver que el identificador de llamadas era Damien, Stella frunció el ceño, sintiéndose un poco avergonzada al recordar que había vomitado demasiado ese día. «Stella, ¿dónde estás ahora? Os invito a cenar a ti y a la hermana Emily. ¿Quieres ir o no?». Al otro lado del teléfono, Damien se sentía inquieto desde que supo quién era RK.
«‘Oye… chico, ¿no puedes llamarme hermana como Emily? Creo que necesitas una paliza». Stella miró a Emily, que se reía a un lado, y le puso los ojos en blanco. «‘¡No, vosotras dos sois diferentes! ¡Hasta luego! Adiós…» Llamó hermana a Emily, lo que significaba que quería ser su hermano pequeño. No llamó hermana a Stella porque no quería ser su hermano pequeño.
«‘Vale, adiós.»
Tras colgar el teléfono, Stella miró a Emily y se quedó pensativa. Pensó que Damien se merecía una paliza.
«¿Qué quería ese tipo, Damien, de ti?» Emily miró a Stella, queriendo ver lo que Damien le había dicho por la expresión de Stella.
«Nada. Dijo que nos invitaría a cenar más tarde». Stella dejó el móvil a un lado y empezó a evaluar a Emily.
«Esa es una buena relación. Sólo nos queda una comida». Emily sonrió a Stella, que se había levantado.
«Oye… Emily, ¿por qué no puede llamarme hermana pero te llama así? ¿Pareces mayor que yo?» Stella sostuvo su barbilla y miró a Emily cuidadosamente.
«Maldita sea, no finjas. Es imposible que no sepas que le gustas a Damien». Casi todos en la universidad sabían que a Damien le gustaba Stella, así que Emily no creía que Stella no lo supiera.
«¿Qué guapa crees que soy? Qué bonita es mi personalidad para que le guste a tanta gente…» Stella se dio la vuelta y posó, creyendo que era muy hermosa para Emily.
«Pero a ti no te gusta ninguno de ellos, y finges que no sabes que tú les gustas a ellos». Emily miró a Stella con una expresión de desprecio.
«Emily, ¿sabes que si no me gustan pero los acepto, entonces sería responsable de ellos, y ni siquiera sabría ser responsable de mí misma?».
Cuando pensaba que Tristán le diría que le gustaba, huía de él cada vez, sintiendo pena por él.
Stella sabía que le gustaba a Tristán, pero desde niña sólo lo había considerado su hermano mayor. Nunca había pensado en otra relación entre ellos que no fuera la de hermanos.
En cuanto a Damien, Stella siempre lo había considerado su hermano pequeño, y no podía desarrollar ningún otro sentimiento por él.
En la puerta del colegio, Damien vio a Stella y Emily acercándose y las saludó con la mano.
«Stella, Hermana Emily.»
Damien miró a Stella, que caminaba hacia él, deseando tomarla como suya.
«Bueno, ¿dónde vamos a cenar más tarde?» Emily preguntó.
Por otro lado, Stella envió un mensaje de texto a RK, diciendo que ya había decidido dónde hacer las fotos de la boda. Stella no sabía si RK leería el mensaje de texto en su teléfono, pero no quería llamarle en absoluto.
Sentada en el asiento trasero, Stella observó a Damien y Emily, que estaban sentados en el asiento delantero, charlando alegremente entre ellos.
«Stella, ¿qué quieres comer?»
A través del espejo retrovisor que tenía delante, Damien había estado observando la expresión de Stella.
«Está bien, siempre y cuando tú y Emily decidan. No soy exigente con la comida». Stella sonrió a Damien en el espejo. Ella miró su teléfono y encontró que RK había leído el mensaje de texto y ya había respondido.
«Bueno, depende de ti.» Era un mensaje tan simple. Se merecía tener tal cara de póquer.
«Stella, ¿podemos ir al Pabellón Paraíso?» Damien no sabía qué lugar le gustaba a Stella, así que pensó en un restaurante de su familia.
«De acuerdo.» Para Stella, no importaba a dónde fuera.
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Nota de Tac-K: Tengan un estupendo fin de semana lindas personitas, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (─‿‿O)
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