En mis tiempos de desesperación
Capítulo 477

Capítulo 477:

Me levanto rápidamente y me abalanzo sobre ella.

Por supuesto, lo que predije se cumple.

Me detienen los guardaespaldas de aspecto feroz.

Whitney saluda y les dice fríamente: «Dejadla entrar».

Los guardaespaldas ceden y yo troto hacia Whitney.

Justo cuando estoy a punto de abrir la boca, ella me mira y dice con indiferencia: «Hablemos dentro».

La sigo como una muñeca.

En cuanto entro en la casa, veo a un montón de soldados de las Fuerzas Especiales erguidos.

Whitney me lleva hasta su habitación.

Cuando llega a la puerta, dice fríamente a la habitación: «Dejadnos solos. Os llamaré cuando os necesite».

Los dos hombres intercambian miradas y asienten mientras se alejan.

Whitney cierra la puerta y se sienta. Me dice en tono frío: «Di lo que has venido a decir. Sin embargo, demuéstrame tu sinceridad. No vi lo que hiciste ahí fuera porque estábamos demasiado lejos».

Sé lo que Whitney quiere decir. Quiere que me arrodille ante ella.

Si no fuera por Francis, nunca habría hecho algo tan humillante.

Pero, ¿Qué otra opción tengo que rogarle?

Por él, no hay nada que no pueda hacer. La dignidad sólo es trivial en este caso. Me importa un bledo.

Me mordí el labio y me arrodillé ante ella.

«Lo siento. Pido disculpas por lo que Francis y yo hicimos. Aunque sé que no todas las heridas pueden cicatrizar, aún espero que puedas dejar libre a Lawrence. Si accede a mi petición, puede hacer cualquier cosa por mí».

«¿Cualquier cosa? ¿Eso incluye acostarse con un hombre?» Whitney resopla fríamente y me dice con desdén.

Mi cara se pone mortalmente pálida.

Amo tanto a Francis. ¿Cómo puedo hacerlo con otro hombre?

Pero, ¿Y si es para salvarle?

No tengo ni idea de lo que debería hacer si Whitney realmente quiere eso.

«Cierto, casi lo olvido. Ya tonteaste con un hombre en un coche. Supongo que te tiraste a ese hombre hace mucho tiempo. Pensé que amabas a Francis. Resulta que es sólo un espectáculo».

Whitney saca su teléfono y lo agita delante de mí.

Aparentemente, está hablando de las fotos mías con Noah en el coche.

No necesito explicárselo.

Lo que Whitney quiere es dejarme en ridículo, así que se lo concedo.

Tal vez, si está de buen humor, Lawrence le daría un respiro al Grupo Louis.

Al notar que guardo silencio, Whitney se pone un poco más contenta.

Me mira con una leve sonrisa.

Pero rápidamente, su rostro se vuelve feroz.

«¿Sabes lo doloroso que fue ese día para mí? ¿De verdad crees que esto puede desaparecer con una disculpa? Déjame que te lo diga, Jane. Me has robado a mi hombre favorito y me has insultado. ¿Cómo puedo dejar que Francis y tú os vayáis tan fácilmente? ¡Debes pagar por esto! Ya que has venido sin invitación, ¡Te haré sufrir!»

Mientras habla, da unas suaves palmadas y una voz suena al otro lado de la puerta.

«Señorita Whitney, ¿Qué pasa?»

«Tráigame a Jack y a Leonard. Además, cualquiera de ustedes que no haya tocado a una mujer en mucho tiempo puede esperar en la puerta». Estoy petrificada y asustada.

¿Qué habrá querido decir?

¿He cometido un error al venir aquí?

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