En mis tiempos de desesperación
Capítulo 220

Capítulo 220:

«Todas las partes por debajo de la rodilla derecha del paciente sufrieron necrosis y deben ser amputadas. Su cabeza también sufrió graves daños. Nadie podía garantizar las consecuencias de la operación. Después de que el familiar firmara, pudimos hacer la operación».

Esta es otra información que casi me hace desfallecer.

Pero pronto me obligué a calmarme.

Al menos, mi madre sigue viva, ¿No?

Firmé con lágrimas y pagué los honorarios de la operación. El médico empieza a operar a mi madre. Me siento fuera de la sala de operaciones con la mirada perdida, sintiendo que mi vida ya se ha derrumbado.

Alguien debería haberme reconocido. Al pasar a mi lado, sacan el teléfono, me miran a mí y a la pantalla.

Ya estoy entumecida. Ni siquiera tengo ánimos para coger el teléfono que sigue temblando en mi bolso.

La operación dura cuatro horas. Cuando el médico sale, también suda profusamente.

«La operación de la paciente ha ido bien. Debería despertarse pronto». Las palabras del médico me relajan.

Entro en la sala. Mi corazón se siente mal cuando veo la pierna derecha vacía de mi madre. Con el temperamento de mamá, es difícil imaginar cómo actuaría cuando se despierte y se vea así.

Lo más importante es que mamá quiere mucho a papá. Si se entera de que papá ya ha fallecido, no sería capaz de soportarlo.

Me tumbo en la cama de mi madre y duermo durante una noche. No la vi despertarse, así que volví a su casa y llevé algo de ropa al hospital.

Cuando camino hacia la esquina del hospital, me tropiezo con una persona.

¿Frank?

«¿Por qué estás aquí?» pregunté sorprendida.

«Mamá y papá se encontraron con algo así, claro que tengo que comprobarlo». Frank me lanza una mirada despectiva y entra en la sala.

Cuando llega a la sala, le oigo decir «mamá».

¿Se despierta mamá?

Me apresuro a entrar en la sala y veo que mamá abre los ojos inexpresivamente. Mira a su alrededor.

«Frank, qué bien que hayas salido».

Le habla a Frank alegremente, ignorándome por completo.

La veo forcejear para levantarse de la cama y me apresuro a detenerla.

«Mamá no te bajes».

«¿Quién es tu madre? Yo no tengo una hija como tú».

Mamá me mira disgustada. Al ver que está a punto de bajarse de la cama, me apresuro a decirle: «Mamá, no te muevas. Te han amputado la pierna derecha».

Mamá se queda atónita durante un rato. Después de un largo rato, baja la manta e intenta tocarse la pierna derecha.

Se quedó completamente petrificada.

«A partir de ahora, soy una lisiada. Sin ningún hijo y tullida. Je». Mamá se sienta allí y su rostro se llena de desesperación.

Pero hay una verdad que es aún más difícil de aceptar para ella. No sé cómo decirlo.

Al final, sin embargo, mamá lo pregunta.

«¿Dónde está tu padre? ¿Dónde está?»

«Mamá, papá ya se ha ido, si no, no podría haber salido». Después de todo, Frank tenía conciencia. Derramó lágrimas tristemente.

«Se ha ido, se ha ido…»

Mamá murmura y se desmaya con los ojos en blanco.

Durante el tiempo posterior a esto, me ocupo del funeral de papá mientras cuido de mamá en el hospital. La batería de mi teléfono ya está agotada, pero ni siquiera tengo ganas de cargarlo. Aunque Frank está fuera, parece estar deambulando. No le importa nada en absoluto, pero mamá por fin tiene motivación para seguir viviendo después de verle.

En cuanto a mí, estoy muy ocupada cuidando de ella, pero al final lo que obtengo es el odio de mamá.

Ya pierdo las ganas de discutir con ella.

Ahora que la familia se ha vuelto así, no quiero hacer más daño a mi madre.

Después de pasar tres días en el hospital, mamá pide el alta con impaciencia. No tengo más remedio que ocuparme del procedimiento por ella.

Cuando acabo de salir de la sala, veo inmediatamente a Francis que está de pie junto a la puerta con el rostro sombrío.

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Nota de Tac-K: Pasen un muy lindo lindo fin de semana queridas personitas, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. ٩(^◡^ )

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