Embarazada de una noche con el Alfa
Capítulo 230

Capítulo 230:

En algunos, ella me daba la espalda, y en otros, su rostro estaba borroso.

Desperté exaltado y empapado en sudor. A pesar de que no habían sido pesadillas, la sensación de familiaridad me hizo sentir nervioso.

Pude sentir que conocía a la mujer con la que había soñado y que ella en verdad era mi esposa.

Sin embargo, ¿por qué no recordaba su nombre ni su rostro? ¿Por qué no podía recordarlo a pesar de haber vivido todos esos momentos con ella? Manuel también estuvo de acuerdo en que todo se había sentido muy familiar, pero ninguno de nosotros sabía por qué.

Antes de que pudiéramos llegar a una conclusión, vi que los rayos de luz comenzaban a filtrarse a través de mis cortinas y recordé que era el día de la boda.

Dado que ya no podía dormir más, decidí levantarme y arreglarme.

Me bañé y me vestí completamente en silencio.

La boda no era real, así que no entendía por qué me sentía tan nervioso.

Estaba tan inquieto y confundido que decidí tomar mi celular y llamar a alguien a quien nunca creí tener que recurrir.

«¿Hola?», respondió la voz al otro lado de la línea.

«Caspian, soy yo, Marco. ¿Podríamos vernos para hablar?», le pedí.

Su sorpresa al escucharme fue clara, pero después de un par de segundos dijo:

«Sí, claro. Estoy en una reunión, pero estaré libre en dos horas. Si quieres, podemos vernos en el cuartel general cuando termine».

«Perfecto».

Eso fue todo lo que dije antes de colgar.

Al terminar de arreglarme, traté de relajarme, pero aún así continué sintiéndome nervioso.

Finalmente, llegó el momento y me dirigí al cuartel.

Cuando llegué, Caspian me saludó y comenzamos a caminar por el jardín del lugar.

El tiempo que pasé a solas en casa me sirvió para pensar en lo que iba a decir y hacer.

La razón por la que quería hablar con Caspian era porque necesitaba confirmar una sospecha.

Sin embargo, debía hacerlo con tacto, por lo que elegí mis palabras con cuidado.

“Quería verte porque necesitaba hacerte un par de preguntas».

Él asintió.

“Claro, adelante».

«Quiero entender mejor los antecedentes de Tanya.

¿Ella creció en la manada Blue Moon? ¿Quién era su esposo?».

Pude notar que mis preguntas lo tomaron un poco desprevenido, pues tardó un poco en darme una respuesta.

El verlo reaccionar así me hizo preguntarme qué era lo que estaba pensando y me hizo sospechar aún más acerca de quién era Tanya y qué tenía ella que ver conmigo.

Estaba consciente de que mi relación con Caspian había sido bastante difícil desde que había llegado a vivir a la manada.

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