El verdadero amor espera -
Capítulo 1141
Capítulo 1141:
Erica se calló, sintiéndose muy agraviada. Lo único que había hecho era procrastinar un poco, pero parecía que, a los ojos de Matthew, se había convertido en una enorme cría que no sabía cuidar de sí misma. Encima, no le permitía hablar e incluso la amenazaba con divorciarse si lo hacía.
¡Argh! Esto es tan injusto’, se quejó para sus adentros.
Matthew cogió una toalla nueva, le limpió los pies y la sacó del cuarto de baño.
Al llegar a la cama, la arrojó sobre ella sin ninguna ternura.
«¡Ay!» Erica rodó hasta el centro de la cama y se desparramó sobre ella.
La voz de Matthew era tan fría como de costumbre cuando dijo: «¿No dijiste que querías ser mi mujer? ¡Como quieras! Ponte el camisón nuevo mientras me baño.
Quiero verte con él puesto cuando salga».
Entonces, empezó a desabrocharse la camisa. Erica se sentó en la cama a toda prisa y le sonrió con satisfacción. «El camisón… ya no está».
«¿Cómo que no está?», preguntó él, frunciendo el ceño.
«Me arrepiento de haber dicho que quería ser tu mujer. Ya no quiero hacerlo, así que…». Erica no pudo terminar sus palabras, así que cogió la caja de regalo de la mesilla de noche y la abrió.
Parpadeó con picardía y dijo con una sonrisa de suficiencia: «Como puedes ver…».
Matthew dio dos pasos hacia delante y descubrió que el camisón que antes había estado doblado cómodamente dentro de la caja de regalo se había hecho pedazos. Erica no quería ponérselo, así que, temiendo que Matthew la obligara a ponérselo, lo había cortado en pedazos cuando él no estaba en la habitación.
Pensó que estaba siendo muy lista. Esperó a que Matthew se enfadara con ella, pero no lo hizo.
La camisa de Matthew ya estaba totalmente desabrochada, dejando al descubierto su pecho tonificado.
«Bien», dijo simplemente.
«¿Qué? Erica estaba confusa.
Matthew la miró fríamente. «De todas formas, no me interesas».
Erica debería haberse alegrado al oírlo; todo iba como ella quería. Pero, por alguna razón, se quedó paralizada. Luego, forzando una sonrisa, dijo torpemente: «¡Qué casualidad!».
Esta vez, Matthew ni siquiera la miró. Con una expresión fría en el rostro, se quitó la camiseta y entró en el cuarto de baño.
Aquella noche, como de costumbre, durmieron en la misma cama, pero con pensamientos distintos en la cabeza. A la mañana siguiente, temprano, Erica se despertó al oír una voz que la llamaba por su nombre. «Erica Li».
Aturdida, abrió los ojos y vio a Matthew, que estaba elegantemente vestido y la miraba desde la cabecera de la cama. «Ve a la escuela más tarde. Luego, asiste conmigo esta tarde a la ceremonia del séptimo día de Nathan».
«De acuerdo», respondió somnolienta y volvió a cerrar los ojos.
Matthew sacudió la cabeza con resignación. No importa. La llamaré a mediodía’, pensó.
Cuando Erica volvió a despertarse, Matthew ya se había ido a trabajar. Ya estaba acostumbrada. Todos los días, cuando ella se despertaba, Matthew ya hacía rato que se había ido a trabajar.
En la Academia de Cine de Y City, Erica ya había añadido en WeChat al alumno que debía recibirla. Cuando estaba a punto de llegar a la escuela, el estudiante le envió un mensaje diciendo que la esperaba en la puerta del dormitorio de las chicas.
El flamante coche Emperador Negro circuló lentamente por el campus, atrayendo muchas miradas envidiosas.
Los alumnos de la Academia de Cine veían a menudo coches lujosos en la puerta de la escuela, pero la dirección era tan estricta que se permitía a pocos coches entrar en la escuela y conducir hasta los dormitorios.
El coche emperador se detuvo en la puerta del dormitorio de las chicas. Los dos chicos que esperaban a Erica intercambiaron miradas y se dirigieron hacia el coche.
Un guardaespaldas salió del coche y abrió la puerta a Erica, que saltó del coche vestida con ropa deportiva rosa.
Uno de los chicos se adelantó y preguntó con una sonrisa: «Perdona, ¿Eres Erica Li?».
Erica le saludó con la cabeza y le devolvió la sonrisa. «Sí. Eres Morton He, ¿Verdad? Encantada de conocerte. Soy Erica Li».
«Encantado de conocerte también, Erica. Éste es Skeet Wang, el director del departamento de secretaría del Sindicato de Estudiantes».
Sabiendo que Erica Li era la mujer de Matthew Huo, Skeet Wang se ajustó las gafas y la saludó nervioso. «Bienvenida a la Academia de Cine de Ciudad Y, Erica. El director nos ha encargado que te llevemos a tu dormitorio. Ven, te ayudaremos con el equipaje. ¿Dónde está?»
Erica se volvió y miró un Bentley Mulsanne negro que se detuvo detrás del coche del emperador. Señaló el coche de lujo que valía millones y dijo: «El coche en el que he venido no tiene maletero, y tengo muchas cosas, así que las he traído en ese coche».
Morton He y Skeet Wang se quedaron tan sorprendidos que casi se les salen los ojos. Aunque estaban rodeados de gente adinerada en la escuela, nunca habían visto a nadie utilizar un coche de lujo para transportar equipaje. La Señora Huo es tan extravagante», pensaron ambos.
Pero la verdad era que Erica sabía tan poco de coches que no tenía ni idea de cuánto costaba el Bentley Mulsanne. Se había limitado a decirle al chófer que necesitaba un coche más para su equipaje, y él le había conseguido un Bentley Mulsanne.
Matthew tenía decenas de coches de lujo en su garaje, entre los cuales el Bentley Mulsanne era barato.
Los dos estudiantes y el guardaespaldas cogieron el equipaje del segundo coche y se dirigieron al dormitorio de las chicas.
Erica iba delante con el bolso colgado a la espalda. Los dos estudiantes y el guardaespaldas la seguían.
Estas cuatro personas atrajeron la atención de muchas chicas.
Mucha gente había invertido en la Academia de Cine de Ciudad Y, por lo que el equipo docente, el personal y el comedor eran los mejores de la ciudad. Además, era el alma mater de muchas estrellas populares, por lo que había mucha competencia para entrar en esta escuela.
La habitación de Erica estaba en el tercer piso. En ella se alojaban cuatro personas, incluida ella.
Dentro de la habitación había dos literas de madera de color rosa. Una de las literas superiores era la de Erica.
El director le había preguntado por su preferencia, y ella había elegido la litera superior.
Sabiendo que la mujer de Matthew Huo se iba a quedar con ellos, todos sus compañeros de habitación estaban esperando su llegada.
No era apropiado que los estudiantes varones y los forasteros permanecieran demasiado tiempo en el dormitorio de las chicas, así que Morton He, Skeet Wang y el guardaespaldas se marcharon después de meter el equipaje de Erica en su habitación.
Una vez fuera del edificio de la residencia de chicas, Morton He y Skeet Wang vieron alejarse los dos lujosos coches. «¡Quiero hacerme amigo de Erica!» dijo emocionado Skeet Wang.
Morton He se mofó. «¿Tú? ¿No tienes miedo de que Matthew Huo te mate?».
«¡No llegará tan lejos! Sólo quiero hacerme amigo de ella. Nada más». Por supuesto, Skeet Wang conocía la verdadera razón por la que Morton He se había mofado de él. Había una enorme diferencia entre su estatus y el de Erica. Sin embargo, seguía sintiéndose infeliz por la forma en que Morton le menospreciaba.
«¡Vamos! Tu primera clase está a punto de empezar», dijo Morton. Los dos chicos se marcharon.
En la habitación del dormitorio, Erica saludó a las otras tres chicas, y luego hizo su cama y guardó todas sus cosas dentro del armario.
Sus compañeras de habitación no parecían entusiasmadas con su llegada, pero a Erica le daba igual. Sólo iría al dormitorio durante el descanso del mediodía y no se quedaría allí por la noche.
Pronto estuvo lista. A partir de ese momento, su vida escolar en la Academia de Cine de Ciudad Y comenzaría oficialmente.
Estaba muy emocionada, pero más tarde, cuando estaba delante del edificio de enseñanza, Erica miró al chico que tenía delante con un mal presentimiento en el corazón.
«¿Por qué estás aquí?», le preguntó.
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