El regreso de la heredera adorada
Capítulo 281

Capítulo 281:

Los dedos de Madisyn bailaron sobre el teclado. «Este vídeo está claramente manipulado».

Con unos pocos clics, restauró la grabación original y se la envió a Víctor.

La respuesta de Víctor fue casi inmediata. «¡Dios mío! ¿De verdad es falso? No puedo creer que cayera en la trampa. Oh no, acusé erróneamente a esa nueva actriz. Bueno, aunque hoy ha actuado bien, sigo preocupado por su actuación en el futuro».

Madisyn lanzó un sutil desafío. «¿No vas a darle una oportunidad?»

Hubo un momento de silencio. Madisyn imaginó a Víctor dudando, con los dedos suspendidos sobre el teclado.

Por fin llegó su respuesta, esta vez más reflexiva. «Se merece una oportunidad. Aunque ya me ha decepcionado algún recién llegado, eso no significa que todos los recién llegados deban ser descartados tan rápidamente».

Madisyn se limitó a teclear «De acuerdo» y, con un suspiro de cansancio, cerró el portátil. El peso del día tiró de ella y la atrajo hacia el reconfortante abrazo de su cama. El sueño no tardó en apoderarse de ella y se sumió en un profundo letargo sin sueños.

A la mañana siguiente, el cielo estaba gris con nubes de tormenta. Tatiana se levantó temprano. Hoy era la ceremonia de inauguración de la nueva telenovela, que era fundamental para su éxito. La novela original había sido escrita nada menos que por Hermione, así que era de suponer que muchos periodistas ansiosos estarían presentes. Tatiana se tomó su tiempo para prepararse, decidida a destacar en la ceremonia.

Justo cuando estaba dando los últimos retoques, sonó su teléfono. Era Kiley. «Tatiana, todavía no he oído nada de Víctor. ¿Conseguí el papel o no?» preguntó Kiley, con la voz llena de ansiedad.

Tatiana frunció el ceño, preocupada. El rodaje iba a empezar hoy, ¿y Víctor aún no se había puesto en contacto con Kiley? Entre todas las audiciones de ayer, Kiley era la que más había destacado. No tenía sentido.

«Hablaré con Víctor», dijo Tatiana, con voz tranquila.

Intentó llamar a Víctor, pero la línea estaba ocupada. Después de varios intentos, finalmente se dio por vencida y volvió a llamar a Kiley. «¿Por qué no vienes primero? Seguro que tienes el papel».

«Vale», respondió Kiley, animándose al instante.

La ceremonia de apertura bullía de vida, el aire estaba cargado de expectación mientras los periodistas se agolpaban en el recinto con las cámaras preparadas. Cuando Tatiana hizo su entrada, los flashes estallaron en un frenesí, captando cada una de sus elegantes sonrisas y saludos. Kiley, un paso por detrás, también sintió los ojos del público clavados en ella. Los fotógrafos, como polillas a una llama, documentaron con avidez cada uno de sus movimientos.

Se había especulado mucho en Internet sobre quién se haría con el codiciado segundo papel femenino, pero por fin se había acabado el suspense. Los periodistas se apresuraron a dar la noticia, ansiosos por ser los primeros en compartirla.

En cuanto los internautas se enteraron de la noticia, les llovieron las reacciones. «¡Lo sabía! Ese papel era de Kiley desde el principio. Victor nunca apostaría por una novata desconocida», decía un comentario. «La recién llegada es preciosa, pero parece que no resulta muy simpática», comentaba otro.

«Es una pena. Con su aspecto, podría haber sido una estrella, pero ¿esa personalidad? Totalmente decepcionante», añadió otro.

Incluso antes de dar el salto a la industria del espectáculo, Milly ya había acumulado una legión de haters.

Acomodándose en un rincón tranquilo del local, Kiley consultó su teléfono y echó un vistazo a los comentarios, con una sonrisa de satisfacción dibujada en los labios. Irradiaba confianza. El papel era suyo, sin lugar a dudas. ¿Y qué si la otra mujer era guapa y tenía talento? En este mundo despiadado, lo importante eran los contactos, no las habilidades. Mientras Kiley se deleitaba con su triunfo, Victor hizo su gran entrada. El recinto estalló en calurosos saludos, un coro de respeto por el hombre que tenía tanta influencia en la industria.

Pero cuando la multitud vio a la mujer que le seguía, una oleada de conmoción recorrió el aire. ¿Quién era? ¿No era la misma mujer que había estado compitiendo con Kiley por el segundo papel protagonista femenino? ¿No se había asegurado ya Kiley el papel? ¿Por qué estaba aquí también Milly?

Los ojos de Tatiana se abrieron de par en par y rápidamente intervino: «Víctor, ¿qué…?».

Pero la fría mirada de Víctor la silenció. Su voz era gélida cuando declaró: «Esta es Milly, nuestra segunda protagonista femenina».

«¿Qué?» Tatiana casi gritó. Con los ojos muy abiertos, bajó la voz y susurró: «Pero, Víctor, tú…».

¿No había visto ese video? ¿Cómo pudo haber elegido a Milly?

La expresión de Víctor seguía siendo severa, inflexible. «Tatiana, en realidad quería preguntarte algo. ¿Por qué me enviaste un video trucado?»

A Tatiana se le cayó el corazón al estómago. Víctor era un admirador incondicional de Hermione y compartía su desdén por cualquier atisbo de injusticia. Sus acciones le habían disgustado claramente.

Una sombra de ansiedad cruzó su rostro. ¿Habría descubierto Víctor la verdad?

«Víctor, esto debe ser algún tipo de malentendido. ¿Ese vídeo estaba realmente manipulado? Te juro que no lo sabía. Un amigo me lo envió y reconocí a la persona que aparecía en él, así que te lo reenvié, preocupada de que alguien indigno pudiera unirse a nuestra producción», se apresuró a decir, con la voz ligeramente temblorosa. «Lo siento mucho».

Milly, que hasta entonces había permanecido en silencio, finalmente miró a Tatiana a los ojos. Su voz era tranquila, pero tenía un tono afilado. «¿Así que fuiste tú quien envió un vídeo a Víctor para despistarle? Por curiosidad, ¿de dónde has sacado ese vídeo? Dudo que mucha gente sepa quién soy».

El aire se llenó de tensión cuando los presentes empezaron a reconstruir la situación.

Tsk tsk.

Los oscuros entresijos de la industria del entretenimiento les resultaban demasiado familiares. Obviamente, Tatiana había intentado sabotear a Milly, pero había fracasado estrepitosamente.

¿Tatiana, una actriz veterana con numerosos premios en su haber, recurrió a tenderle una trampa a una recién llegada? ¿Cómo puede ser tan mezquina?

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