El presidente le propone matrimonio a su ex-esposa 99 veces
Capítulo 305

Capítulo 305:

«Bien», respondió Marshal sin comprometerse.

Clara sintió su indiferencia hacia la conversación por sus tibias reacciones, así que le dio las buenas noches y estuvo a punto de colgar.

Después de pensarlo un poco, Marshal decidió sacar el tema. «Señorita Henderson», dijo.

Clara hizo una pausa. «¿Sí?»

«He oído que hoy ha tenido un encuentro desagradable con Katherine y Kyle».

Esta vez, Clara se sintió realmente sorprendida. Sonando más seria que bromista, preguntó: «Entonces, ¿Qué, estás tratando de buscar un recurso legal para ellos?»

Marshal arrugó. «No estoy en posición de buscar un recurso en nombre de nadie. Simplemente quería asegurarme de que esto había ocurrido realmente hoy».

«Entonces sí, sucedió», respondió Clara de inmediato, «Sin embargo, no veo ninguna mala acción por mi parte».

No es que a Marshal le importara quién estaba equivocado de todos modos.

«Kyle puede ser un hombre muy infantil», dijo Marshal, «Como estoy seguro de que eres consciente. Solo quiero que sepas que no es buena idea enredarse con él. El hombre hará cualquier cosa si se le provoca».

Clara sonó disgustada cuando respondió. «Ya lo sé. Por eso nunca he chocado con el Señor Haverford antes, no cara a cara, al menos».

Marshal sonrió antes de continuar. «Ah, y una cosa más, Katherine es en realidad una figura aún más aterradora que Kyle, y podría haber consecuencias aún más graves si te enredas con ella».

Sin esperar la respuesta de Clara, Marshal continuó. «Independientemente de cuál sea mi relación actual con Katherine, no quiero verla nunca acosada, así que, si ocurre algo, me pondré de su parte. Así que quería avisarte, por si acaso mi familia y la tuya se enfrentan por algún asunto innecesario y se arma un gran enredo.»

No se oyó ni un solo ruido desde el lado de Clara. Mejor así, ya que Marshal colgó directamente el teléfono al terminar de hablar.

De alguna manera, se sentía extrañamente mareado de alegría.

Marshal decidió entrar en la aplicación de chat y comprobar las actualizaciones de la vida de Katherine. Katherine había publicado recientemente un selfie con una mascarilla para el cuidado de la piel. La máscara era delgada y debajo de ella se podía ver claramente su rostro.

Marshal se quedó mirando la foto durante un buen rato, ya que nunca había visto a Katherine así.

Una chica joven con una máscara puesta, haciendo un rostro para la cámara. Era un espectáculo que todo el mundo querría contemplar, ¿No? Aunque uno no se enamorara necesariamente de ella, apreciaría su juventud.

Marshal se quedó mirando la foto durante un buen rato, sonriendo a su pesar.

Chica tonta, probablemente no sabía que él le había devuelto la amistad en esta aplicación.

Era una persona tan desprevenida que la gente podría aprovecharse de ello. Marshal revisó cada una de las publicaciones de Katherine.

Katherine tenía activada la opción «global», por lo que todos los amigos podían ver todas sus publicaciones. Vio los más antiguos de cuando aún vivía con los Grant; no se la veía muy feliz, pero había mantenido su actitud positiva. Había publicado una foto del cielo, otra del jardín y otra del sol naciente. Por aquel entonces, no había ningún selfie, ni nadie más: ninguno de los Grant aparecía en sus fotos.

De alguna manera, Marshal lamentaba ese hecho. Se había esforzado mucho por vivir su mejor vida, pero los Grant, incluido él, no se dieron cuenta.

Marshal guardó el teléfono en la mesilla de noche y apagó la luz mientras se tumbaba en la cama.

Los dos días siguientes, Marshal estuvo tan metido en el trabajo que no tuvo tiempo de ver a Katherine. Ni siquiera se llamaban ni se enviaban mensajes de texto, como si ya no tuvieran nada que ver.

Kyle era el único que le llamaba constantemente, ya que estaba impaciente por conocer los resultados. Marshal no se oponía a que lo molestara, sino que solo le decía que esperara mientras la gente de Marshal realizaba una investigación minuciosa, porque no querías precipitarte en este tipo de cosas y encontrarte con un error.

Kyle maldecía profusamente cuando mencionaba su desgracia, regañando verbalmente no solo a los dos niños Bennett sino también a las mujeres Henderson. Sin embargo, naturalmente, al que más condenaba era a [Marcus].

Marshal le escuchaba pacientemente mientras lo hacía y, cuando terminaba su ataque verbal, le preguntaba si había contactado con Katherine. Y cada vez que Marshal le preguntaba, Kyle sí había contactado con ella.

Kyle, verdaderamente aburrido, llamaba cada vez a Katherine y luego a Marshal, acosando a todos los que podía contactar. Entonces, Marshal le preguntaba muy convenientemente en qué andaba Katherine. Kyle, siempre tan honesto, le contaba a Marshal todo lo que hacía Katherine sin ocultar nada así que, de esa manera, Marshal podía indirectamente seguir de cerca el paradero de Katherine.

Cuando Kyle le dijo que Katherine estaba haciendo la primera parte del examen de conducir,

Marshal se sorprendió. «¿Por qué no estás con ella?»

Porque normalmente, el carácter intrusivo y divertido de Kyle seguramente lo habría impulsado a seguirla.

«No estoy con ella por apoyo moral porque Hector lo está», dijo Kyle, «Una persona es más que suficiente para hacerle compañía».

Con el teléfono en una mano y un bolígrafo en la otra, Marshal estaba a punto de poner su firma en un documento. Cuando lo oyó, detuvo todos los movimientos. «¿Dijiste que Hector está con ella? ¿Por qué no está Hector en el trabajo?»

«¿Eh?», respondió Kyle, «¿No te lo he dicho? Hector dejó su trabajo. Ha estado con Kathy los últimos días».

Marshal cerró los ojos por unos segundos antes de firmar rápidamente su nombre. Dejando los papeles y el bolígrafo, se levantó y dijo: «Ok, entendido», y colgó el teléfono.

Marshal agarro su abrigo y salió del despacho, encontrándose con Peter que salía del mismo cuando Marshal se dirigía al ascensor.

Sorprendido, Peter miró a Marshal y le preguntó: «¿Adónde va, jefe?». Marshal se detuvo en seco. ¿Adónde iba exactamente? Había planeado ir a buscar a Katherine, pero ¿Qué haría cuando la encontrara?

Peter sostenía un documento en el que necesitaba la firma de Marshal mientras daba una mirada confusa a su jefe. «¿Vas a salir por negocios?»

Marshal frunció el ceño. «No».

«Sí, eso es lo que yo también pienso. No recuerdo que tuvieras compromisos de negocios fuera del despacho hoy».

Marshal alternaba su mirada entre Peter y el documento que tenía en la mano. Aparentemente descuidado, miró por la ventana hacia el espacio no muy lejano antes de darse la vuelta y caminar lentamente hacia su despacho.

En el despacho, Peter le entregó el documento a Marshal. «Bien, quiero decirte que es difícil investigar a los Henderson, porque mantienen un control estricto de la información que dejan escapar. No encontré nada sospechoso en ellos, así que seguí adelante e investigué a los Bennett ya que pensé que los Bennett eran más sospechosos. Y adivinen lo que encontré».

Marshal levantó lentamente la vista y miró a Peter con una expresión neutra, incluso ligeramente escalofriante.

Sin atreverse a mantener al jefe en vilo por más tiempo, Peter dijo con sinceridad: «Patrick y Alexis no estaban, con toda seguridad, involucrados en esto, pero Ariel Kingsey, su madre, sí lo estaba. Ella fue de compras al centro comercial esa mañana y se encontró con Marcus allí. Y así es como hicieron la conexión».

Pero Marshal no estaba prestando atención a nada de esto. El aspecto sombrío de su rostro tampoco se debió a lo que dijo Peter. Estaba sumido en sus propios pensamientos. Cuando colgó a Kyle, no se lo pensó antes de salir corriendo, porque quería saber por qué ese tal Hector andaba rondando a Katherine.

El hecho de que Hector estuviera siempre cerca de Katherine había hecho que Marshal se sintiera muy incómodo, pero ahora que lo pensaba, no había razón para su inquietud, ya que a Hector le gustaba claramente Katherine, hecho que Marshal había sabido desde el principio.

Alguien a quien le gustaba Katherine no haría nada para perjudicarla, por lo que no había necesidad de que Marshal se preocupara. Pfft, ¿Por qué iba a preocuparse?

Marshal cerró los ojos una vez más y apoyó las manos sobre su mesa de trabajo cuando oyó a Peter decir: «Entonces, ¿Le cuento lo que he desenterrado al Señor Haverford?»

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