El presidente asesino
Capítulo 552

Capítulo 552:

«Papá, te prometo que, pase lo que pase, me aseguraré de tolerarla y aceptarla. Sin embargo, hay una cosa que no entiendo. Qué quieres decir con que Annabelle era una niña pobre?».

¿Podría ser…?

El hombre levantó los ojos y miró a Teneria.

Teneria no lo dijo directamente y se limitó a mirar a Alistair: «Pase lo que pase, ¡espero que puedas cuidar bien de ella!».

Alistair se quedó atónito y asintió: «¡No te preocupes, seguro que lo haré!».

Teneria sonrió tranquila, «¡Aunque no tengo confianza en ti, creo en ti!».

«¡Papá, definitivamente puedes tener confianza y creer en mí!».

Teneria se rió entre dientes: «¡Entonces enséñame algo que me haga tener confianza!».

Alistair sonrió: «¡No hay problema!».

«¡Jaque mate!» Dijo Teneria de repente.

Alistair miró el tablero y exclamó: «¡Papá, eres realmente un maestro en ajedrez, he perdido!».

Teneria también le devolvió la sonrisa. Sabía que Alistair se había estado conteniendo.

«¡Te agradezco que honres a tu mayor conteniéndote!».

«¡En absoluto, papá, es que eres demasiado hábil!». dijo Alistair.

Cuando Teneria oyó eso, se rió a carcajadas. Antes siempre había visto a Alistair como un matón. Después de interactuar con él, sintió que no era tan malo.

«¡Vamos a echar otra partida!»

«¡Con mucho gusto!»

Como los dos hombres siguieron charlando, su relación se hizo más estrecha.

Annabelle estaba charlando con Waynie en el salón. Cuando Annabelle vio que su padre y Alistair jugaban alegremente al ajedrez, de repente sintió que su casa estaba llena de alegría y felicidad.

Sus labios se curvaron.

«Annabelle, ¿de verdad te has decidido?» Waynie miró a Annabelle y le preguntó.

Annabelle asintió: «¡Sí!».

«¡Deberías recordar que ustedes dos no eran felices antes de esto!»

«Mamá, fue como lo que dijo Alistair. Antes no sentíamos nada el uno por el otro. Pero ahora las cosas son diferentes, ¡creo que él me ama y creo que lo conozco muy bien!» enunció Annabelle.

Desde que aceptó la proposición de Alistair, se había decidido.

Cuando Waynie vio lo decidida que estaba Annabelle, asintió: «Muy bien, ya que te has decidido, mamá no te detendrá. Sin embargo, si pasara algo, ¡debes decírselo a tu madre!».

«Entendido, mamá. No tienes que preocuparte por mí!» dijo Annabelle.

«Claro que me preocuparía, antes pensaba que te quedarías con esa Song Jing, pero ahora…»

«¡Mamá!» Antes de que Waynie terminara, Annabelle la interrumpió: «¡Sólo éramos amigas, nada más que eso!».

Todo el mundo sabía que a Song Jing le gustaba Annabelle, pero ahora que Annabelle decía eso, Waynie sabía que no debía interferir. La madre simplemente asintió: «Está bien, mamá lo entiende. Mientras seas feliz, mamá no dirá nada». Annabelle se rió entre dientes.

«¡Siéntate aquí, mamá irá a ver si el almuerzo está listo!»

«¡De acuerdo!» Annabelle asintió y Waynie se levantó y fue a la cocina.

Annabelle se sentó en la sala y del otro lado, Alistair seguía jugando ajedrez con Teneria. Annabelle sonrió y recordó algo de repente. Después de eso, cogió su teléfono y llamó a Ralphy.

El teléfono sonó después de unos pitidos.

«Hola, hermano…»

«Hola, puedo saber…»

Cuando Annabelle oyó la voz de una mujer, se quedó atónita.

«¿Quién eres?» Preguntó Annabelle, «¡¿Por qué contestas al teléfono de mi hermano?!»

«¿Tu hermano?» La mujer que atendía la llamada se quedó atónita: «Todavía está durmiendo…». Al segundo siguiente, le arrebataron el teléfono que tenía en la mano.

.

.

.