El destino de Tiana -
Capítulo 16
Capítulo 16:
POV: Tiana
Justo como pensé, cuando salí del baño, sus ojos todavía estaban abiertos.
Estaban esperándome, asique suspiro, me arrastro de vuelta a la cama y cubro mi cabeza con las sábanas.
Supongo que ya no tengo escapatoria.
Para ser sincera, no sé ni cómo me siento al respecto.
Unos segundos más tarde, él ya se ha vuelto a dormir, mientras sigo luchando para conciliar el sueño.
La noche se hace demasiado larga y solo puedo dormir en las primeras horas de la mañana.
POV: Ryder
Es inocente y dulce, pero también terca, y tiene su propia manera de hacerme irritar rápidamente: sí, también es muy molesta.
Parece que disfrutara de desobedecer mis órdenes, pero ni siquiera eso lo cambiaria de ella: este pensamiento hace que mi ceño se frunza, haciendo que Louis y Elsie me miren con las cejas enarcadas.
Acabamos de terminar de desayunar y estamos sentados en el balcón, todavía tengo unos minutos antes de continuar con las obligaciones de hoy, asique decido compartir un rato con mis hermanos mientras mi pareja sigue profundamente dormida en mi habitación.
Es difícil de asimilar que ella es mi pareja, casi me parece increíble, pero al mismo tiempo es muy emocionante.
Aunque no sé mucho sobre ella, tengo la intención de averiguarlo, pero no parece ser alguien que hable mucho sobre su pasado, incluso le tomó un momento decir su edad.
La Manada Eclipse no es una de las más grandes y, por lo que sé, tampoco ha sido de las mejores: recibí la carta y los buenos deseos de su Alfa hacia mi padre.
Tiana no es una Omega. La reconocería con verla.
No es débil ni tímida, como la mayoría, pero aun así la enviaron aquí: lo más probable es que haya cometido un crimen en su manada, pero se ve demasiado inocente como para hacer algo así.
No hemos podido tener una conversación adecuada, pero tengo la intención de hacerlo hoy.
Si ella no me habla, entonces tendré que averiguar por mi cuenta por quela enviaron aquí.
La noche de ayer fue difícil para mí tenerla a mi lado, con su aroma llenando mis sábanas, y no poder tocarla fue una tortura: sin embargo, en cierto modo me hizo sentir tranquilo, y pronto me quedé dormido, pero seguí muy pendiente de cada uno de sus movimientos.
Cuando la vi llorar, mi primer instinto fue tratar de tranquilizarla e incluso me sentí mal por haberla hecho llorar, y eso no es algo que sienta muy a menudo: casi nunca me siento culpable por nada, así es como me criaron y entrenaron, pero tengo una especie de debilidad por esa chica.
Algo que ella nunca debe saber que existe.
Sí, ella nunca debe saberlo.
Nunca debe saber lo mucho que me afectan sus lágrimas, ni cuánto la deseo.
No puedo permitir que se repita lo que pasó con Adeline. El recuerdo de esa mujer hace que se forme otra mueca en mi rostro.
“Me pregunto si nunca vas a cambiar”, dice Elsie, mi hermana.
Yo la miro con frialdad, ella es la hija menor y mis padres la tratan como a un bebé. Yo haría cualquier cosa por ella. Lo sabe, y siempre ha sido muy cercana a mí, incluso más de lo que ha sido Louis, y haría cualquier cosa para protegerla.
Si no fuera por mí, ya la habrían entregado a un noble, pero quiero que sea feliz siempre, y sé que cree firmemente en el amor y el vínculo de pareja, así que quiero que lo tenga; puede que yo no haya tenido suerte con mi primera pareja, pero tal vez ella sí.
Después de Adeline, me encerré en un caparazón y sentí que nada más podría darme alegría, es por eso que me he dedicado tanto a este caso que ha estado sin resolver durante tantos años, me cuesta confiar en el se%o opuesto, en especial después de lloque pasó con Adeline.
Entonces cierro los ojos y sacudo la cabeza para sacar a esa mujer de mis pensamientos; han pasado dieciocho meses. Pero las heridas todavía se sienten como si hubiera sido ayer.
La única diferencia es que ahora mi nueva pareja se esté apoderando poco a poco de todos mis pensamientos; sin embargo, hay una parte de mí que no la quiere siempre en mi mente, que se empeña en bloquearla, recordándome que no debo cometer el mismo error que cometí en el pasado.
El vínculo de pareja es simplemente inexplicable y juega con tu mente, cambia tus pensamientos y te hace sentir cosas que normalmente pensarías que no eres capaz de sentir. O te fuerza a hacer lo que nunca creíste que serías capaz, todo esto es peor para un macho Alfa, y en especial para un Príncipe que será Reyen poco tiempo.
“¿A qué te refieres?”. Le pregunto a Elsie, fingiendo no entender de qué habla.
“Necesitas verte en un espejo en este momento”. Responde ella.
“Tienes que dejarla salir”, interviene Louis, yo lo miro con el ceño fruncido, y él se estremece y de inmediato desvía la mirada.
Todavía estoy enojado con él, y lo sabe: conozco a Louis, es un buen chico, ha sido mi confidente y mi mano derecha desde el principio. y siempre sabe qué hacer y cuándo hacerlo.
Al ser el segundo Príncipe Alfa, también tiene mucha responsabilidad sobre sus hombros, y nunca ha dejado de cumplir con ella.
Además del color de ojos, compartimos muchas cualidades físicas, y a pesar de que mido unos siete centímetros más que él y mí cabello es un poco más largo.Algunos dirían que parecemos gemelos.
El problema de Louis es que le gustan mucho las mujeres, es coqueto, y gracias a su posición y apariencia, no tiene problemas en conseguir a la chica que quiera, pero usa mucho ese privilegio: sin embargo, no puedo culparlo, porque yo mismo era un mujeriego antes de Adeline.
Ayer vi cómo Louis miraba a mi pareja, lo cerca que estuvo de ella, y de inmediato supe que estaba interesado. Pero él no debería acercarse a mi pareja.
“No sabía que era tu pareja”, dice Louis
Supongo que debo haber proyectado mis pensamientos a través del enlace mental; es extraño, siempre suelo mantener mi mente bien resguardada, en especial de mi familia, debido a que tenemos un vínculo más cercano y fuerte.
“Él no lo sabía, Ryder”. Rápidamente lo defiende Elsie
“Louis nunca se acercaría a ninguna mujer que te gustara, y muchos menos a tu pareja, sabes que siempre te ha demostrado su respeto”.
Ella tiene razón, Louis y yo compartimos muchas cosas, pero no las mujeres, y él sabe mejor que nadie que no debe acercarse a ninguna cosa que me guste, ni siquiera admirar a una de mis chicas. Además, también sabe cuánto me afectó Adeline y fue una delas personas que me ayudó a superarla.
“Tienes razón”, fruncí los labios y volví a mirar el reloj en mi muñeca, todavía tenía unos minutos.
“Lo siento, solo estaba admirando a una bella dama, pero no lo habría hecho de haber sabido que era tú segunda pareja”, dice, y yo frunzo el ceño de nuevo.
Esta vez él levanta las manos en señal de sumisión y Elsie pone los ojos en blanco.
“Pero hablando en serio, tienes que dejarla salir, ninguna mujer quiere sentirse enjaulada, solo la harás más rebelde”, exclama ella.
“No puedo dejarla salir”. Digo con severidad.
“No me importa cómo se sienta”.
“¿Ah, sí? ¿De verdad piensas eso?”, ella entorna los ojos y yo le doy una mirada dura.
“Ella es mía”, digo con firmeza
“Y yo decido qué hacer con lo que es mío”.
“No estás siendo razonable, Ryder, y espero que no te arrepientas de esto”, añade Louis.
“¿Entonces vas a dejarla encerrada allí por lo que pasó con Adeline?”, vuelve a intervenir Elsie.
Mi ceño se frunce aún más ante la mención de ese nombre.
Una cosa es que yo siga pensando en ella y otra es que alguien más me la recuerde: veo que Elsie nota rápidamente mi cambio de humor, pero no se retracta.
“Eso no fue tu culpa y no debes descargar toda tu ira en la pobre chica”, añade.
“¿Qué vas a hacer?, ¿Dejarla encerrada en tu habitación para siempre”
“Hermano, Adeline es cosa del pasado, y la Diosa de la Luna te ha dado otra oportunidad, no muchas personas pueden decir eso, pero por la forma en que estás manejando las cosas, solo espero que no termines haciendo que te odie”, comenta Louis.
Dejo escapar un gruñido, no puedo tolerarlo más. Así que aprieto los dientes, me pongo de pie y me marcho: escucho que Elsie dice mi nombre, pero ni siquiera me molesto en mirarlos.
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