Capítulo 715:

Con nuevas contrataciones en el estudio, Sabrina planeó delegar tareas a su asistente y empleados.

«De acuerdo». Tyrone inspeccionó el montaje del estudio, y un marco de fotos en la estantería le llamó la atención. Se acercó, cogió el marco y lo examinó de cerca. «¿El hombre que está a tu lado en esta foto es tu padre?».

Sabrina lo miró y asintió.

«¿Cuántos años tenías en esta foto? preguntó Tyrone, volviendo a colocar el marco. «Parecías tan joven e inexperta».

«Tenía quince años». Era la foto más reciente que Sabrina tenía con su padre.

«¿Algo más?»

«¿Qué?»

«Fotos tuyas de niña». Tyrone se acercó a Sabrina, apoyando las manos en la mesa. Le sonrió. «Tengo curiosidad».

Sabrina señaló el cajón que había bajo la estantería. «Ahí hay un álbum de fotos. Tiene fotos antiguas de mi padre y mías…».

Al ver que Tyrone se movía para cogerlo, advirtió: «Ten cuidado. No lo estropees».

«Vale». Tyrone cogió el álbum de fotos y lo abrió.

Por aquel entonces, la mayoría de la gente de las zonas rurales no solía visitar los estudios fotográficos, así que sus colecciones de fotos eran limitadas. Cuando Sabrina era joven, sólo había un puñado de fotos. Como su padre trabajaba como reportero, hacía las fotos con su propia cámara y las revelaba él mismo.

Tyrone estudió una foto de Sabrina a la edad de cinco o seis años, escrutando cuidadosamente sus rasgos. «Sabrina, eras una niña tan mona».

Sabrina rió suavemente y no dijo nada.

Tyrone volvió a colocar el álbum con cuidado y se acercó a Sabrina. «Tómate un descanso. Te ayudaré. Sólo dime lo que hay que hacer».

«De acuerdo.» Sabrina se levantó y le ofreció su asiento.

Jennie permitió que Tyrone durmiera junto a Sabrina, pero ella insistió en estar con Sabrina hasta la hora de acostarse. Una vez que Jennie se hubo dormido, Sabrina salió silenciosamente de la habitación de invitados y se dirigió a su dormitorio. Cogió su pijama y se dirigió al baño.

«¿Vas a ducharte?» preguntó Tyrone desde la puerta.

«Sí», respondió Sabrina.

Entró en el cuarto de baño y estaba a punto de cerrar la puerta cuando Tyrone la siguió dentro.

«¿Qué estás haciendo? exclamó Sabrina, agarrándose el estómago y abriendo mucho los ojos. No podían tener sexo ahora.

«Me preocupa que te resbales, así que me ducharé contigo», dijo Tyrone con seriedad.

«No, tengo una silla especial», replicó Sabrina.

Tyrone no tuvo más remedio que actuar descaradamente. Dio un paso adelante y cerró la puerta. «Podemos ahorrar agua si nos duchamos juntos. No te preocupes. Estás embarazada. No haré nada…».

Sabrina se sintió impotente. Al ver su resignación, Tyrone empezó a desabrocharse la camisa uno a uno, dejando al descubierto su fuerte pecho y sus músculos. La marcada línea de sus abdominales se extendía hacia abajo y quedaba cubierta por su cinturón.

Cuando Sabrina examinó a Tyrone de cerca, se dio cuenta de que el cinturón era un regalo que ella le había hecho durante su matrimonio. Sabrina desvió la mirada y miró hacia arriba. Tyrone la miraba con una leve sonrisa, como si hubiera malinterpretado algo.

Sabrina lo miró fríamente y volvió la cabeza hacia otro lado. Estaba embarazada de cinco meses y su cuerpo había cambiado notablemente. Además de su creciente barriga, sus pechos también habían aumentado de tamaño.

Parecía que a Tyrone le gustaban los cambios.

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Nota de Tac-K: Volvemos con nuevos capítulos lindas personitas, tengan una linda linda tarde, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (=◡=) /

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