El amor a mi alcance
Capítulo 204

Capítulo 204:

«Tenéis que dejar de discutir ahora mismo. No montéis una escena aquí», dijo Aron con calma a sus abuelos, que discutían entre sí.

«Abuela, no tienes que preocuparte por nada. Te aseguro que no me casaré con Becky».

Joanna se sintió aliviada por las palabras de Aron. Si Aron se casa con Becky por mi culpa, tendré que cargar con la culpa el resto de mi vida. Incluso después de la muerte, no encontraré consuelo’, pensó Joanna.

«Aron, ¿qué quieres decir? Estoy totalmente confundido», preguntó su abuelo. Mike frunció el ceño y le preguntó: «¿No habías dado ya tu consentimiento para casarte con Becky? Ahora me dices que no vas a seguir adelante. ¿No sabes que ya se han enviado las invitaciones de boda? ¿Quieres convertirme en el hazmerreír?». Mike se sintió ansioso e irritado con Aron.

«¿Estás embrollado? Sólo piensas en tu prestigio y estatus social, pero no tienes en cuenta la felicidad de Aron. ¿Has considerado las consecuencias de que Aron se case con una mujer a la que no ama? ¿Cómo esperas que pase el resto de su vida con una persona así? ¿Crees que será feliz?». Joanna regañó a Mike.

Mike estaba perplejo y confuso por lo que estaba pasando. Enfadado, Mike le preguntó a Joanna: «¿Lo dices en serio, Joanna? Aron aún es joven, así que puedo entender que a veces se sienta desconcertado, pero tú ya tienes suficiente experiencia. ¿Qué excusa tienes para actuar igual que él? ¿De verdad esperas que Aron se case con Isla?».

«Creo que Isla es una buena chica. ¿Qué le pasa?» Joanna respondió con calma. Mike se quedó completamente sorprendido al oír esto de Joanna, ya que había dado un giro brusco sobre Isla en tan poco tiempo.

Joanna odiaba mucho a Isla al principio, pero ahora decía que Isla era una buena chica. ¿Qué le ha pasado? se preguntó Mike.

«Abuela…» Aron arrugó las cejas. Oír lo que Joanna había dicho, le dio la respuesta a lo que estaba buscando. Creyó que sus conjeturas sobre el asunto eran acertadas.

«Fue Becky quien te empujó, ¿verdad?» Aron preguntó directamente. Habría esperado a que Joanna descansara antes de hablar de ello, pero ahora que ella lo había mencionado, Aron quería llegar al fondo del asunto, más pronto que tarde.

Conocía bien a Isla. Aunque Mandy dijo que no iban a presentar cargos contra Isla, Aron comprendió que Isla debía de estar disgustada por haber sido tratada injustamente. Isla debía de estar descontenta porque era inocente de las falsas acusaciones que se habían hecho contra ella.

Cuanto más pensaba Aron en ello, más culpable se sentía por Isla. Pero ahora era el momento de demostrar su inocencia al público.

«¡No digas tonterías aquí! Veo que esa mujer te ha lavado el cerebro. ¿Pero cómo puedes ser tan desconsiderado? ¿Te has vuelto loco?» Mike regañó duramente a Aron. «¿Cómo podría una chica como Becky hacer daño a tu abuela?» preguntó Mike furioso.

«¿Por qué me preguntas esto?» Joanna no le respondió directamente, sino que le pidió justificaciones, ya que quería conocer la opinión de Aron al respecto.

En realidad, aún se resistía a averiguar la verdad, después de todo Becky había cuidado de ellos durante mucho tiempo. Era un hecho innegable.

Si Aron confiaba incondicionalmente en Isla, Joanna estaba decidida a ocultarle esta verdad.

«Abuela, creo que Isla no te haría daño. No importa si te gusta o no; es la única mujer a la que quiero en este mundo. Llevaba mucho tiempo con ella y, aunque me encontró en la cama con Becky, se marchó en silencio, sin decir nada. Si realmente fuera una persona sin corazón, no habría esperado cuatro años para vengarse de mí. Abuela, por favor, intenta recordar. ¿Te pidió Becky que buscaras a Isla aquel día?».

Joanna trató de recordar las escenas de aquel día. Arrugó las cejas en cuanto se dio cuenta de algo. Aunque Becky no la animó directamente a buscar a Isla, ya había planeado engañar a Joanna para que buscara a Isla antes de recogerla para comer.

Joanna frunció el ceño al pensar en ello, mientras Aron leía la expresión de su rostro y se imaginaba lo que había ocurrido aquel día en el despacho de Isla.

«Para ser sincero, nunca he sospechado de Isla desde el día que estuviste en el hospital, inconsciente. El doctor Zhao, el médico que te operó, es un conocido amigo de Isla. Es un médico muy solicitado y, de no ser por Isla, habría estado más allá de mis posibilidades encargarle tu operación. ¿Crees que me ayudaría a encontrar al Dr. Zhao si no se preocupara por ti? Mike se había quedado sin palabras, ya que las justificaciones de Aron empezaban a sonar razonables.

Frunció las cejas, porque aún no podía aceptar la verdad. ¿Cómo podía Becky herir a Joanna tan deliberadamente? «¿Cómo es posible? Becky ha estado aquí cuidando de tu abuela desde el accidente. Siempre ha sido tan amable y considerada. ¿Cómo pudo hacer algo así?» Mike intentó hablar en nombre de Becky.

«Abuelo, sé que Becky siempre está aquí para cuidar de la abuela, pero no es porque se preocupe por su salud. La verdadera razón es que tiene miedo de que la abuela descubra sus mentiras cuando se despierte», explicó Aron, con una sonrisa amarga en el rostro.

Mike frunció el ceño en silencio y a regañadientes, pues le costaba tragarse la amarga verdad.

«Aron… ¿Estás seguro? No me estarás tomando el pelo, ¿verdad?». Joanna también parecía seria y solemne.

«Abuela, cuando estabas inconsciente, Becky insistió en que fue Isla quien te hizo daño aquel día y se eximió de toda responsabilidad. Pero lo que más rabia me da es que pretenda ser magnánima y diga que no presentará cargos contra Isla. Es más, incluso le faltó al respeto pidiéndole que fuera su dama de honor. ¿Aún crees que es una buena persona? ¡Qué mujer tan despiadada! Le he pedido al abuelo que no le diga a Becky que estáis despiertos, porque me temo que se inventará nuevos problemas en cuanto se entere». Tanto Joanna como Mike se quedaron callados por la conmoción de lo que acababan de oír de Aron.

«Pero… Pero tus invitaciones de boda se han enviado a nuestros familiares y amigos. Si vas a cancelar esta boda…» Mike se detuvo en seco. Todavía estaba escéptico acerca de toda la situación porque creía que Becky nunca haría tal cosa.

«Mike, ¿por qué sigues preocupado por tu posición social en este momento? ¿No es más importante para ti la felicidad de Aron?». Joanna trató de persuadir a Mike para que tuviera la cabeza despejada. «No importa con quién decida casarse Aron, no será con Becky».

Joanna recordó las escenas que tuvieron lugar en el despacho de Isla aquel día. Becky estaba tan avergonzada y humillada por lo que Isla le había dicho que perdió el control de sí misma por la ira y empujó bruscamente a Joanna.

«Tengo una última cosa que preguntarte», Joanna se puso seria y le dijo a Aron: «Quiero saber si Becky estuvo realmente embarazada hace cuatro años. Dímelo, Aron». Mike se puso aún más furioso después de oír esto.

Ahora que Joanna se había enterado, Aron decidió no ocultarles más la verdad. Tenía que contarles toda la historia claramente porque quería deshacerse cuanto antes de Becky y de su boda ficticia.

«Abuelo, ¿recuerdas el otro día cuando me preguntaste si había estado antes con Becky? Aunque te dije la verdad, no te conté toda la historia. El día que me encontré en la cama con Becky, fui al hospital para que me hicieran un examen físico. El médico encontró en mi cuerpo unos restos de droga demasiado potentes. Y desde entonces empecé a sospechar que era Becky quien lo había planeado todo meticulosamente desde el principio. Todavía tengo el informe médico conmigo y, si quieres echarle un vistazo, te lo puedo enseñar en cualquier momento», dijo Aron.

Hizo una breve pausa y prosiguió: «Quise volver hace cuatro años, cuando la abuela se estaba recuperando, pero en cuanto Becky se enteró de que pensaba volver, me dijo que estaba embarazada, de sopetón. Sin embargo, después de nuestro enfrentamiento, tuvo un aborto inexplicable. No dije nada, aunque en aquel momento lo dudé, porque no creí que se atreviera a bromear sobre tales asuntos.

Incluso sentí pena por ella durante ese tiempo, así que decidí no volver y quedarme en el extranjero. Pero entonces me pareció extraño que no pareciera disgustada o arrepentida tras su aborto. Y desde entonces, dudé de si estaba realmente embarazada o no», explica Aron.

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