Descubriendo los secretos de mi esposa
Capítulo 392

Capítulo 392:

Hasta que no vio el vídeo en el que le ingresaba el dinero a Owen no supo que no podía negarlo. Así que empezó a inventarse una historia. Dijo que él y Owen eran amigos. Resulta que tenía algo de dinero, así que le había propuesto a Owen abrir juntos una farmacia. El dinero que le dio a Owen era el capital inicial. Para que sus palabras sonaran más convincentes, Craig incluso pintó un vívido cuadro del panorama actual de la medicina tradicional con un incesante flujo de palabras. Dijo animadamente: «La medicina tradicional está ganando más popularidad. Las farmacias que venden medicina tradicional apenas tenían negocio en el pasado. Pero ahora, esas tiendas están repletas de clientes. La gente presta más atención a su salud. «Antes, cuando tenían un nódulo o algo parecido, se operaban para extirparlo. Ahora hay más gente que confía en la medicina tradicional. Comprarán medicina tradicional para tratar los nódulos». Craig no paraba de hablar, pero poco sabía que la policía sólo escuchaba las pruebas.

Era inútil dijera lo que dijera. La policía se limitó a mostrarle las pruebas de que Michelle, la mujer de Jared, había retirado cuatrocientos mil dólares con él un día antes. El policía que tomó declaración a Craig preguntó: «¿Qué más quiere decir?». Craig puso los ojos en blanco y siguió inventando historias. Dijo que Michelle también era optimista respecto al mercado actual de la medicina tradicional, por lo que quería invertir algo de dinero y convertirse en accionista. «La digna Sra. Blake de Blake Corporation quiere invertir cuatrocientos mil dólares en medicina tradicional simplemente porque es optimista sobre el mercado?», preguntó el policía. Craig intentó disimular sus mentiras: «Así es. La señora Blake probablemente sólo quiere probar primero e invertirá más dinero en el futuro si todo va bien». La policía sacó la lista de contactos de Craig y le interrogó con severidad, «¿Tú y Owen sois amigos, pero ni siquiera tienes su WhatsApp?». Las pupilas de Craig se contrajeron por el pánico. Inmediatamente explicó: «Siempre nos llamamos. Por eso no lo agregué en WhatsApp».

«¿Cuánto tiempo lleváis contactando por teléfono? ¿Sólo cuatro días?», volvió a preguntar solemnemente el policía.

La mente de Craig estaba en un tumulto mientras seguía hilando sus historias. «Estamos… Agente de policía, ésta es la cuestión. Owen y yo no nos conocemos desde hace mucho, pero congeniamos enseguida, lo conocí hace medio año cuando fui a la farmacia a comprar medicinas. Cada vez que iba allí, charlábamos un poco. Más tarde, nos hicimos más amigos y pensamos que podríamos abrir una farmacia juntos.»

«Owen dijo que sólo os conocisteis hace cuatro días». El tono de voz del oficial de policía se volvió más serio. «Craig, esto es la comisaría.

Cada palabra que digas puede ser utilizada como prueba en un juicio. Espero que no mientas. Mentir es extremadamente desventajoso para tu defensa o sentencia». A Craig le entró más pánico cuando oyó la palabra sentencia. La policía siguió presionándole. «Owen ha confesado que sólo os conocéis desde hace cuatro días. Le diste el dinero y le dijiste que cambiara los ingredientes medicinales de la receta de Madam Blake». Craig se abatió al saber que ya no podía ocultarlo. El policía continuó: «¿Quién te pidió que hicieras esto? Craig, eres una persona muy culta. Deberías saber muy bien que hay una gran diferencia entre un cerebro y un cómplice.

Admitirlo y encubrir al cerebro traerá también un resultado completamente diferente». Craig soltó un largo suspiro y empezó a revelarlo todo bajo presión. Le dijo a la policía que había sido instigado por Jared.

Al principio, no estaba dispuesto a hacerlo. Al fin y al cabo, acabaría con la vida de una persona.

Jared dijo que Preston había despertado. Si quería hacerse con la propiedad de Blake Corporation, tenía que matar a la señora Blake antes de que hiciera testamento. Jared era el único hijo de la anciana. Después de que ella muriera, todos los bienes a su nombre serían heredados por él. Como Craig quería confesar, tenía que dejar claro que Jared era el cerebro. No podía importarle menos ofender a su jefe, ahora. Cuando se lo llevó la policía, esperaba que Jared viniera a sacarlo. Pero después de un largo rato, no se veía a su jefe. Desde que Owen había confesado, ya no podía ocultarlo. Después de la confesión de Craig, el doctor Darren también confesó. El doctor Darren tenía grandes habilidades médicas, pero era codicioso y mentalmente débil.

Cuando la policía le preguntó de dónde había sacado los lingotes de oro, apenas se esforzó por ocultarlo todo. Con la cara cubierta de lágrimas, les dijo que Michelle le había invitado a una consulta y que Jared le había tentado con los lingotes de oro. Sin embargo, negó que quisiera hacer daño a nadie. Jared le mostró una receta y le preguntó qué ingredientes medicinales se podían sustituir. Pensó que Jared quería sustituir los ingredientes medicinales costosos por otros baratos. Por ello, mantuvo una conversación informal con Jared. «¿Le dio más de cien lingotes de oro por una discusión casual?», le preguntó la policía. El doctor Darren explicó repetidamente que creía que Blake Corporation ganaba mucho dinero, y que por eso Jared le había recompensado generosamente. De hecho, el doctor se odiaba mucho a sí mismo. Cuando conoció a Jared, era mentalmente fuerte y muy cuidadoso.

Él no había escrito la receta, y le había pedido a Jared que lo hiciera él mismo. En un principio, podría haberlo negado todo. Pero en cuanto vio a la policía, se asustó tanto que le flaquearon las piernas. No pudo controlarse y admitió algo que no debería haber admitido. Ya era demasiado tarde para negarlo. También estaba enfadado con su hijo por haberle llevado al límite. Al principio, habían acordado esperar a que todo terminara antes de vender los lingotes de oro. Pero su hijo no dejaba de insistirle. Ahora se había metido en un buen lío. Si lo hubiera sabido, no le habría hablado a su hijo del oro. Se enfadaba mucho consigo mismo cuando pensaba en ello. Bajo el interrogatorio de la policía, sólo pudo revelar todo con honestidad. Todas las pruebas demostraban que Jared y Michelle eran los verdaderos autores intelectuales. Caleb dirigió personalmente a su equipo para ir a arrestarlos. En la villa.

Jared tenía un mal presentimiento. Pensó que no podía esperar más. Necesitaba hacer un movimiento. De repente, cogió la mano de Michelle y le dijo: «Cariño, vamos arriba. Tengo algo que decirte». Al ver la expresión solemne de Jared, Michelle también puso cara de preocupación. Inmediatamente siguió a su marido escaleras arriba. Jared fue directamente al estudio. Después de que Michelle entrara en la habitación, Jared dijo gravemente: «Cierra la puerta». Michelle hizo rápidamente lo que él le decía. «Cariño, ven aqui», le dijo Jared a su mujer. Michelle se acercó a él y el hombre le tendió la mano.

«Jared, ¿qué te pasa? Me estás dando mucho miedo». Michelle se sintió incómoda al ver que Jared parecía el fin del mundo. Jared dejó escapar un largo suspiro y dijo: «Michelle, tenemos un gran problema». Michelle miró sin pestañear al hombre. Jared declaró: «Craig y el personal de la farmacia están en la comisaría, y el doctor Darren está ilocalizable. Probablemente también se lo haya llevado la policía. Pronto vendrán a por nosotros».

«¿No habíamos hecho un pacto de que no nos delataríamos aunque nos llevaran a comisaría?». dijo Michelle enfadada. Jared volvió a suspirar. «La mayoría de la gente se rendirá cuando llegue allí». Michelle frunció el ceño. «Jared, ¿de qué estás hablando? Lo hicimos con mucho cuidado y de forma encubierta. No nos asustemos, ¿de acuerdo? Aunque digan que somos nosotros, no hay pruebas. No les transferimos el dinero, ni tuvimos ningún trato con ellos».

«Pero llamaste al doctor Darren», dijo Jared.

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