Déjeme ir, Señor Hill
Capítulo 458

Capítulo 458:

Catherine descubrió que Shaun dormía profundamente en la enorme cama. Sin embargo, Shelley estaba tumbada a su lado con las manos fuertemente unidas.

Shelley se levantó de la cama al oír el alboroto. Al ver a la mujer, su rostro se llenó de inquietud.

“Joven Señora, por favor no me malinterprete…»

Catherine se apresuró a abofetear a la otra mujer.

“He notado algo raro en ti desde el primer día. Te contraté como enfermera, y el trabajo no incluye dormir con él en nuestra cama».

» No lo hice», dijo Shelley con impotencia.

» ¿No lo hiciste?» Catherine estaba tan furiosa que perdió el control de sí misma.

“Te pedí que te largaras ayer, y aquí estás hoy. ¿De verdad crees que eres la señora de esta casa? ¿No te enseñaron tus padres modales? ¿Sabes lo que es la vergüenza?»

» Eres tan ruidosa».

El hombre se dio la vuelta de repente y se incorporó de la cama, con aspecto agotado. Coincidentemente, el pálido rostro de Shelley estaba manchado de lágrimas y tenía una huella de mano en la mejilla. Por otro lado, el rostro de Catherine gritaba rabia. Era evidente que había abofeteado a la otra mujer.

«Catherine, ¿Qué estás haciendo?»

Shaun la miró furioso.

“Mírate, descargando tu ira contra otra persona nada más llegar a casa. ¿Te he mimado demasiado?» Catherine se quedó de piedra.

Según esa lógica, ¿Tenía que hacer la vista gorda al ver a otra mujer tumbada en la misma cama con su marido, cogidos de la mano?

No tenía ni idea del valor que le había costado volver a casa después de enterarse de la verdad.

Ella pensaba en su enfermedad.

Con eso, decidió superar este obstáculo con él a pesar del dolor palpitante en su corazón. Podrían hablar una vez que todo hubiera pasado.

Resultó que su consideración no era necesaria.

» ¿Por qué está aquí?» Señaló a Shelley y le interrogó de mala gana.

«¿No dijiste que la habías despedido ayer?»

» Puedo despedirla o volver a contratarla cuando quiera».

Shaun tenía los ojos enrojecidos. Había despedido a Shelley a su antojo, pero ¿Y a ella? Salió a tomar un helado con Wesley a sus espaldas. ¿Pensaba en sus sentimientos cuando estaba intimando con otro hombre en público?

«Está bien, lo entiendo.»

Su corazón se rompió en mil pedazos.

Luego se dirigio hacia el vestidor y comenzo a empacar sus pertenencias.

De hecho, ella no tenía muchas pertenencias aquí. La mayoría de las cosas las había comprado él. Simplemente metió algunas de sus ropas en la maleta y salió.

» ¿Qué haces?» Él la miró con incredulidad.

Ella levantó la cabeza para evitar que se le saltaran las lágrimas.

“No hay razón para que me quede aquí. Les deseo lo mejor. Ahora me marcho”.

Después de eso, se dio la vuelta y se dirigió hacia la puerta.

Shaun agarró su maleta y la estrelló contra el suelo. Le gritó furioso: «¿Me dejas por Wesley? ¿Qué te ha dicho? Catherine Jones, ¿Has olvidado tu promesa? ¿Que te quedarías a mi lado hasta que me recuperara? ¿Que te quedarías conmigo para siempre si mi enfermedad no desaparece?».

Finalmente, las lágrimas se desbordaron de sus redondos ojos como un dique roto.

Estaba casi convencida al oír al hombre gritar aquellas palabras.

Sin embargo, Shelley dijo débilmente: «Así es, Joven Señora. El Joven Maestro Mayor realmente te necesita. Por favor, deja de hacerle daño».

» ¿Hacerle daño?» Catherine se burló.

“¿Quién hace daño a quién? Ya me tiene a su lado, y todavía está pensando en conseguir más. No tengo tiempo para esta mi$rda. Deja que Shelley trate tu enfermedad. De todas formas, no soy médico».

Soltó su mano de la de él y salió del dormitorio, dejando su maleta atrás.

» No te permito que te vayas».

Él se apresuró a agarrarle la muñeca de nuevo. Sus ojos parecían tan locos como los de una bestia salvaje.

“Catherine, mentirosa. ¿Me odias porque estoy enfermo? Déjame que te lo diga ahora. Nunca dejarás este lugar a menos que mueras».

» ¿Qué quieres de mí?» Ella estaba aterrorizada al verlo.

» ¿Qué crees?”

Se la echó al hombro y la arrojó a la bodega subterránea.

» Shaun, no puedes hacer esto”.

Ella se dio cuenta al instante de su intención y corrió rápidamente hacia el exterior, con la intención de escapar. Sin embargo, él no le dio la oportunidad. En su lugar, cerró la puerta de golpe y la bloqueó desde fuera.

» Shaun, te odio. ¿Qué te he hecho de malo? Tu Familia Hill me atrapó en el sótano, y ahora tú haces lo mismo. Eres un demonio”.

Catherine golpeó la puerta con el puño.

.

.

.