Déjeme ir, Señor Hill -
Capítulo 2656
Capítulo 2656:
Eliza se quedó un poco boquiabierta.
No podía creer que una persona tan cauta como él hiciera semejante comentario.
«¿Me equivoco al decir eso?» preguntó Max.
«No deberías suponer que los demás piensan de ti lo mismo que tú. Cuando los miembros de mi equipo hablan de ti, todos están llenos de admiración. Fue una osadía por tu parte ir contra la Corporación Jewell, y fue muy amable por tu parte donar mil millones de dólares así como así. Incluso la Primera Dama te elogió en privado. ¿Cuántas personas en el mundo crees que pueden ser como tú? Sinceramente, la gente que se ríe de ti es malvada». Eliza se quedó atónita.
Aunque sabía que Max la estaba consolando, sus palabras le calentaron el corazón.
«Basándome en lo que has dicho, de repente piensas que soy una buena persona por practicar todas las virtudes tradicionales». Eliza se rió de sí misma.
«Charity, has sido una víctima todo el tiempo, y aun así estás dispuesta a ayudar a los demás.
Eso se considera asombroso. Vámonos».
Max cogió todo su equipaje. «A partir de ahora, yo seré tu guardaespaldas».
Eliza le miró en silencio un momento antes de decir con impotencia: «Max, me tratas muy bien, pero mi corazón está muerto. No puedo devolverte el favor».
«Yo no espero que me devuelvas ningún favor. Lo único que tienes que hacer es tratarme como a un amigo.
¿No deberíamos ayudarnos como amigos? Se tarda unos días en llegar a Drisdol en tren, y no es seguro que una chica como tú viaje sola. ¿Quién sabe si alguien de la Familia Jewell se vengará de ti durante el viaje?».
Tras hablar Max con franqueza, levantó el equipaje y se adelantó.
Eliza suspiró. No tuvo más remedio que seguirle.
En la sala de visitas de la prisión.
Sentado a un lado estaba Shaun con el teléfono en la mano, mientras que al otro lado estaba Chester, que vestía un uniforme azul de presidiario. Después de cortarse el pelo, parecía menos guapo, pero sus rasgos prominentes le daban un aspecto más fiero y salvaje.
«Esto es inesperado. No puedo creer que llegue un día en que charle contigo así», se burló Shaun juguetonamente.
«Yo tampoco me lo esperaba». Los labios de Chester se curvaron en una sonrisa de autodesprecio. «Éste es, sin duda, el momento más memorable de mi vida».
«Por eso no debes menospreciar a las mujeres». Shaun suspiró y dijo: «Con tu identidad, podrías conseguir fácilmente a cualquier mujer, ¿Por qué tuviste que forzarla?». Chester se quedó callado.
De hecho, en el pasado nunca habría hecho eso. Entonces, las mujeres lo hacían con él por dinero, y era consentido.
Sin embargo, cuanto más le rechazaba Eliza, más la deseaba.
«Quizá… me molestaba porque yo no podía tenerla».
«Pero no parecía que la quisieras después de conseguirla». Shaun negó con la cabeza. «Al final, incluso engañaste a Eliza. ¿Por qué no adivinas lo que ha hecho con los mil millones de dólares que le diste?»
«Mil millones de dólares es bastante atractivo». Chester dijo con indiferencia: «¿No me odia o se siente molesta conmigo porque yo no le di dinero ni coches lujosos?».
«Te equivocas».
Shaun dijo: «Ella donó mil millones de dólares a los pobres. Es más, ha ido personalmente a esas zonas rurales a construir escuelas y hospitales para asegurarse de que el dinero se utiliza sabiamente. Incluso los medios de comunicación internacionales han informado sobre ello.
Todos los principales canales de televisión la elogian y la ponen como ejemplo. Yo creo que ninguna otra estrella de cine o reina puede compararse con ella».
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