Déjeme ir, Señor Hill
Capítulo 197

Capítulo 197:

Shaun le pellizcó las mejillas.

“Pórtate bien, todavía estoy esperando que me levantes después de conseguir a Hudson».

La magnética voz hizo que Catherine no pudiera decir nada.

Al otro lado, Elle les dirigió una mirada extraña.

Catherine se dio cuenta. Después de que Shaun se pusiera a trabajar, le preguntó a Elle con una sonrisa: «¿Conoces a Shaunny?».

Al oir el nombre «Shaunny», Elle sonrio y contesto respetuosamente, » Si».

Catherine miró a su alrededor y preguntó: «Entonces debes saber si ha tenido alguna exnovia antes. ¿Cuántas ha tenido?»

» Señorita Jones, puede preguntárselo al Señor Hill”.

Elle se desentendió del tema con unas pocas palabras.

Catherine estaba muy desanimada. Este guardaespaldas era demasiado hermético.

Ese mismo día, Catherine renunció a su puesto en Talton y se preparó para ir a Hudson.

….

En la Residencia Jones.

Jeffery estaba de buen humor después de recibir una llamada telefónica de un accionista.

“El Director Irvine finalmente aceptó apoyarme. El puesto de presidente será mío mañana».

» Cariño, felicidades”.

Sally sonrió muy orgullosa. La noticia de la condición de Jeffery como accionista mayoritario de Hudson se había difundido estos días, por lo que aquellas esposas ricas que solían mirarla con desprecio se apresuraban a adularla de nuevo.

“Cuando ocupes el puesto de presidente y Rebecca y Stephen se casen, nuestra Familia Jones estará en lo más alto de Melbourne».

» Así es. Antes admirábamos a las Familias Harrison y Clark, pero pronto las superaremos y nos convertiremos en la familia más poderosa de Melbourne».

Jeffery se sentía más triunfante cuanto más lo pensaba y no pudo evitar estallar en carcajadas.

Rebecca también se echó a reír.

“Papá, ¿Has encontrado ya a la Tía Wendy? Es una bomba de relojería si nos la quedamos».

» Sí, esa vieja sabe demasiadas cosas», se apresuró a decir Sally.

» ¿Y qué si sabe cosas? Ahora soy yo quien está en el poder. Catherine es sólo una mísera niña. ¿Qué puede hacerme?»

Jeffery se burló, sin darle ninguna importancia a esas personas.

“Aunque tenga a Shaun Hill detrás de ella, sospecho que Shaun no seguirá vivo mucho tiempo».

«Papá, Hugh Jewell ha llegado a Melbourne”.

Rebecca sonrió con extrañeza.

“Desde la muerte de su hermana, odia tanto a Shaun Hill que no parará hasta matarlo. Todo su propósito de vivir es matar a Shaun Hill».

» Bien hecho”.

Jeffery la miró elogiosamente.

“Como se esperaba de mi hija».

Rebecca no podía ocultar su felicidad. Mañana sería la número uno de la alta sociedad de Melbourne. Ya no tendría que soportar nunca más que los demás la miraran por encima del hombro.

Al día siguiente a las 9:00 am.

Se celebró la gran junta anual de accionistas.

Jeffery cogió a Rebecca y entró a grandes zancadas. Fue saludado por todas las personas que le estrecharon la mano.

» Director Jones, ¡Enhorabuena! Creo que el puesto de presidente será suyo una vez que el Director Irvine se retire».

» ¿Qué está diciendo? Acabo de incorporarme a Hudson y todavía no tengo muy claros los asuntos internos», dijo Jeffery con modestia mientras contenía su petulancia.

» ¿Qué tienes que tener claro? Para eso están los ejecutivos que contratamos con altos sueldos», dijo otro hombre con tono halagador, «El desarrollo futuro de la empresa depende ahora del Director Jones».

» Sí, sí, Director Jones. Los pequeños de la Familia Levy dependerán de usted y de Hudson», también se hizo eco el Director Levy.

» No hay problema”.

Jeffery ya no pudo contener la expresión de suficiencia de su rostro y se echó a reír.

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